Gracias al tesón de su propietario, Iñigo, el apoyo del Ayuntamiento y a la ayuda de Adel Sierra Norte, este convento del Carmelo vuelve a cobrar vida después de casi dos siglos de abandono (maltrecho tras la Guerra de Independencia, fue abandonado en 1.835 por la desamortizacion de Mendizábal). Ahora se ha reconvertido en un centro de congresos, reuniones y banquetes.
El maestro Juan Luis Perez Arribas, en su libro “Cogolludo, su historia, arte y costumbres” nos cuenta sus vicistudes a lo largo de 430 años. Fundado en 1.588 por un rico prohombre de Cogolludo (Juan Fonte de la Cruz), que optó por la vida religiosa, inicialmente iba a ser construido junto a la ermita del Val, pero la idea fue desestimada en un plazo de 9 años.
La construcción se realizó de acuerdo con las directrices de la orden: iglesia de cruz latina con fachada de silleria y sillarejo, de tres cuerpos y tres arcos de entrada al atrio a la que se sumaban celdas, refectorio, patio, biblioteca, enfermería, claustro, … Además de una vaquería, era con pozo, bodega, jardín con dos cedros centenarios, huerta y el olivar de las cabras, … cercado por muros da caliza.
En la fachada de la iglesia figura “año 1.622” que no corresponde al año de construcción, sino al año de canonizacion de Santa Teresa de Jesús, que fue celebrado con gran fasto en honor de su fundadora.
Lar-ami, gerente de CR La Vereda de Puebla, entre cárcavas y olivos milenarios. Todo sobre Actualidad, Costumbres, Fiestas, Mundo Rural y Paisajes y Lugares de la Sierra Norte de Guadalajara.