En 1999, México destilaba fútbol por los cuatro costados. El país organizaba la Copa Confederaciones. Todo el mundo alababa la gran acogida del pueblo mexicano pero nadie se atrevía a darle el papel de favorito a su selección. Estaban profundamente equivocados.
Participantes
Fase de Grupos
México logró armar un buen equipo para la ocasión. Entre los nombres de la plantilla destacaban: Jorge Campos, Rafael Márquez o Cuauhtémoc Blanco. En el banquillo el mítico entrenador de Club Puebla, Manuel Lapuente.
El Tricolor formó parte del Grupo A junto con Arabia Saudita, Bolivia y Egipto. El primer partido fue contra los árabes en lo que fue un plácido encuentro. En el minuto 21 ya ganaba 3-0. Finalmente México se llevaría una clara victoria por 5-1 con un excelso Cuauhtémoc Blanco anotando un póker. Buenas sensaciones ofreció el combinado de Lapuente, espoleado por un público entregado.
Jorge Campos fue clave para México en la Copa Confederaciones (fuente: espndeportes.com) El segundo partido contra Egipto, que venía de jugar un gran fútbol ganando la exigente Copa África, fue mucho más duro. Empate a dos goles pese a que México se había adelantado gracias a los goles del mediocampista Pável Pardo, ex-jugador entre otros de Club América y de Stuttgart, y José Manuel Abundis. Igualdad tras los 90 minutos y sabor agridulce para México tras desperdiciar la ventaja que tenía y ver cómo le empataban en el minuto 85.
El último encuentro de la fase de grupos fue un clásico del fútbol entre México y Bolivia. Victoria sufrida y por la mínima con gol de Juan Francisco Palencia. El Tricolor terminaba campeona de grupo aunque con muchas dudas en su juego. De las últimas once participaciones de México en la Copa Confederaciones, en siete había logrado pasar la fase de grupos.
Cita con la historia
Las semifinales fueron contra el acérrimo rival, Estados Unidos. Los americanos habían visto cómo el fútbol se popularizaba tras la organización del Mundial de 1994. Este hecho había propiciado un aumento de las licencias federativas lo que llevó a un mayor profesionalismo. De todo ello se benefició la selección.
Partido muy disputado donde los dos porteros, Jorge Campos por México y Kasey Keller por el lado estadounidense, dieron un auténtico recital. El encuentro llegó finalmente a la prórroga hasta que, quien sino, el mito Cuauhtémoc Blanco marcó en el minuto 97 el gol de oro que clasificaba a México para la final.
El 4 de agosto de 1999, México disputó la final de la Copa Confederaciones en un abarrotado Estadio Azteca ante 110.000 espectadores. El último escollo antes de levantar el trofeo era Brasil quien decidió acudir con un equipo sub 23 pero con muchísima calidad. Lideraba la selección verdeamarella un joven Ronaldinho que asombraba al mundo del fútbol. A su lado, jugadores consagrados como Flávio Conceiçao, Emerson o Ze Roberto. En el banquillo, Vanderlei Luxemburgo.
El partido fue una antología al fútbol. Un toma y daca entre las dos selecciones. Serginho de penalti y Roni contrarrestaron los goles de Zepeda y Abundis para los locales. El propio Zepeda en el 51′ y Cuauhtémoc Blanco en el 62′ adelantaron de nuevo a México. Sin embargo, tan sólo dos minutos después, Ze Roberto ponía la emoción con el 4-3. Como era de esperar sufrió México el resto del encuentro. Cuando el árbitro sueco Anders Frisk pitó el final del partido, todo un país celebró la histórica victoria.
Cuando repaso los logros de mi carrera, ganar la Copa Confederaciones en México se encuentra en lo más alto de mi lista. El triunfo es lo más importante para cualquier futbolista, y aquel en concreto supone una gesta que jamás olvidaré."
Rafael Márquez
México dejó atrás las buenas actuaciones de los Mundiales del 94 y del 98 para, por fin, hacer justicia a su historia y sumar su primer título.
Una gesta que aún hoy se recuerda.
México, campeona de la Copa Confederaciones (fuente: pinterest.com)
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