Hay una cosa que me sucede, a menudo, cuando me tomo los medicamentos y que me da muchísima rabia.
Una vez que saco el blíster (es la tira de plástico transparente donde se encuentran las pastillas), para extraer una de ellas, y tomar la que me corresponde, cuando la vuelvo a introducir en la cajita no hay manera de que entre por completo... me desespera, forjeceo con ella, la vuelvo a sacar, acomodo un poco las otras, vuelvo a intentarlo, forjeceo con más fuerza, pero... nada de nada, hay veces que la condenada tira de pastillas no quiere entrar en su correspondiente caja junto a la demás...
El extenso prospecto me lo impide. Eso me exaspera, intento forzar la tira para que entre, se me arruga, saco el prospecto, lo doblo y lo aplasto bien para encajarlo lo mejor posible, lo vuelvo a intentar colocándolo de otra forma.
Al final termino sacando el dichoso prospecto, total tengo otra caja igual y ya me lo se de memoria. En caso de no tener otra caja del mismo medicamento, si no consigo meterlo, ni siquiera arrugándolo, lo guardo aparte en un cajón.
Otra cosa que me desespera es que, a pesar de que pienso bien por dónde abrir la cajita del medicamento, muchas veces la suelo abrir por donde está el prospecto doblado, así que tengo que volver a cerrarla y darle la vuelta. La miro y pienso "tengo que acordarme que he de abrirla por este lado", pero nada, a la próxima me vuelve a pasar.
¿Os pasa a alguno de vosotros/as lo mismo?