Martes 23 de Junio de 2015
Esta imagen de NGC 247 revela los finos detalles de esta galaxia espiral muy inclinada y su rico telón de fondo. Los astrónomos piensan que esta orientación tan inclinada, tal como la observamos desde la Tierra, explica que la distancia a esta prominente galaxia haya sido previamente sobreestimada. La galaxia espiral NGC 247 es una de las galaxias espirales más cercanas del cielo austral. En esta nueva visión entregada por el Wide Field Imager del telescopio MPG/ESO de 2,2 metros en el Observatorio La Silla de ESO, en Chile, un gran número de estrellas que componen la galaxia aparecen claramente definidas y muchas nubes de hidrógeno rosadas y brillantes, que señalan las regiones de formación estelar activa, pueden distinguirse en los difusos e irregulares brazos espirales.
NGC 247 es parte del Grupo Sculptor, una aglomeración de galaxias asociadas con la galaxia Sculptor (NGC 253, como se muestra en este comunicado de 2009 y otro de 2010. Este es el grupo de galaxias más cercano a nuestro Grupo Local, a que pertenece nuestra la Vía Láctea, pero darle un valor exacto a estas distancias cósmicas es tremendamente difícil. Para medir la distancia desde la Tierra a una galaxia cercana, los astrónomos deben confiar en un tipo de estrellas variables llamadas Cefeidas, que actúan como indicadores de distancia.
La Cefeidas son estrellas muy luminosas, cuyo brillo varía a intervalos regulares. El tiempo que tarda una de estas estrellas en pasar del brillo máximo al mínimo puede ser introducido en una simple fórmula matemática que permite obtener su brillo intrínseco. Cuando se compara este valor con el brillo medido, se obtiene su distancia. Sin embargo este método no es infalible, ya que los astrónomos piensan que esta relación entre período y luminosidad depende de la composición de la Cefeida. Además de la galaxia principal, esta imagen también revela numerosas galaxias brillando a distancias mucho mayores que NGC 247. En la parte superior derecha de la fotografía, tres espirales prominentes forman una línea e incluso detrás de ellas, mucho más lejos, muchas otras galaxias son visibles, algunas brillando justo a través del disco de NGC 247.
Fotografía original
Crédito: ESO