Según un estudio publicado en el Instituto de Ciencias Evaluativas, entidad sin ánimo de lucro que se dedica a la investigación de excelencia en diversos campos, el embarazo incrementa el riesgo de accidentes de tráfico. Los datos obtenidos muestran que el riesgo de sufrir un accidente de tráfico mientras se conduce embarazada, aumenta de forma paralela al avance del embarazo.
Los expertos llevaron a cabo un análisis longitudinal de las mujeres que habían dado a luz en Ontario (Canadá) en un periodo comprendido entre el año 2006 y el año 2011, se excluyeron a las mujeres menores de edad, a las que vivían fuera de la región, las que no tenían seguro médico, etc. En total 507.262 mujeres dieron a luz durante este periodo, los investigadores querían comprobar si las características comunes asociadas al embarazo, fatiga, náuseas, insomnio y distracción entre otras, incrementaban el riesgo de tener un accidente a consecuencia de un error humano. Recabaron información sobre el número de accidentes de coche en los que estuvieron implicadas tres años antes de quedarse embarazadas y se constató que en total se produjeron 6.922 accidentes, una media de 177 accidentes por mes.
Posteriormente se analizó el número de accidentes de tráfico que se habían producido en las mujeres gestantes que conducían durante el segundo trimestre del embarazo, en total se contabilizaron 757 accidentes, siendo la media de 252 por mes. Muchas mujeres se preocupan por temas como los viajes en avión, la natación, las bañeras de hidromasaje, etc., sin embargo, pueden pasar por alto riesgos graves como un accidente de tráfico. El embarazo, según el estudio, aumenta el riesgo de accidente de tráfico grave que requiere atención médica de urgencia.
Las estadísticas muestran que una de cada 50 futuras mamás estarán involucradas en un accidente de tráfico en algún momento del embarazo, aunque hay que apuntar un dato curioso, en relación a los riesgos absolutos entre mujeres embarazadas y hombres, éstos últimos son los que más accidentes de tráfico causan. Según leemos aquí, los expertos aclaran que estos no son motivos de peso para decidir no concebir un bebé o dejar de conducir, apuntan que únicamente hay que ser más prudentes cuando se conduce estando embarazada, respetar las señales de tráfico, evitar las distracciones y sobre todo, no olvidar nunca el cinturón de seguridad.
Hay que tener en cuenta que un accidente de tráfico durante el embarazo, aunque sea de poca importancia, podría afectar a la salud de la madre y del futuro bebé, por ello es obligado realizar una conducción segura. Aunque la investigación destaca que la gestación incrementa el riesgo de accidentes de tráfico, ni en el artículo del ICES ni en la publicación en la revista científica Canadian Medical Association Journal, hablan de las supuestas causas antes nombradas que incrementan el riesgo de accidente.