El pasado mes de agosto, la editorial Planeta tuvo la amabilidad de acceder a mi petición y me hizo llegar 'El error azul', del periodista Javier Lorenzo. Así, me he vuelto a sumergir en una historia de posguerra, de esas que calan hondo y hacen pensar sobre la brutalidad que puede alcanzar el ser humano, tanto por odiar como por amar.
"Ninguna mujer es culpable de que la amen dos hombres a la vez". Con esta sentencia comienza esta desgarradora historia. Amelia no tiene la culpa de que dos hombres de carácter e ideales políticos totalmente antagónicos, la amen. No tiene la culpa de que pese a estar casada con Martín, el teniente Alberto Recuero siga enamorado de ella. Pese a la distancia insalvable en sus ideas, en sus sentimientos y en su posición social.Martín y Amelia representan la España que fue vencida, la de los perdedores, a la España que se tuvo que esconder en un armario para no ser descubierta y fusilada. Alberto en cambio es vencedor, de los que se permitían rapar el pelo tanto a hombres como a mujeres, de los que de vez en cuando se aburrían y torturaban. Como hacía con Amelia, pese a estar enamorado de ella. Lo hacía por venganza, porque cuando la chica tuvo que elegir se quedo con Martín, 'el rojo'. El teniente Recuero es un amante de la filatelia, colecciona los mejores sellos, los más caros. Se lo puede permitir y ya tiene una fortuna en miniatura que podría ser mayor si no hubiese separado dos sellos gemelos y únicos: "el error azul". Cuando Alberto decide darle la mitad de ese sello a Amelia, todo se rompe en añicos, al menos para él. Sus recuerdos, su odio visceral a Martín, las fiestas del pueblo y el beso a Amelia que nunca pudo ser... Todos serán recuerdos que le van minando por dentro y por eso, en el tramo final, se termina de convertir en bestia y va a por ella, a coger lo que considera que siempre tuvo que ser suyo, a cobrarse su venganza por ser un hombre infeliz. Después de ese acto final nada volverá a ser lo mismo, tres vidas cambiarán para siempre porque el amor no se puede controlar y la obsesión, tampoco.
Javier Lorenzo nos traslada con 'El error azul' a una España todavía herida por la guerra, pero que tendrá que luchar por salir adelante. Teruel es el epicentro de esta novela de amor y de guerra, donde Amelia, Martín y Alberto, nos contarán su historia, desde tres perspectivas diferentes porque el amor nunca tiene un sólo punto de vista. Los personajes están magistralmente construidos, con sus virtudes y sus defectos. Podemos acercarnos a ellos desde tres perspectivas totalmente distintas y alejadas porque cada uno de ellos representa un mundo totalmente diferente, que habrá descubrir para comprender sus actuaciones en esta historia, que es la de su vida.
A estos tres protagonistas les acompaña una narración espléndida pero difícil y también dura. Javier Lorenzo ha construido un mundo aparte dentro de la miseria de la guerra, nos acerca un relato humano con sus cosas buenas y sobre todo con las malas. Es ficción pero también tiene personajes reales, como aclara el autor en el anexo de la novela.
Os recomiendo 'El error azul' porque nunca es tarde para leer y aprender de nuestra historia más cercana. Para recrear una España que de verdad existió. Para intentar comprender y no cometer los mismos errores. Un 10.