Revista Cultura y Ocio
La forma en que algunos libros llegan a mis manos me resulta a mí incluso un tanto sorprendente. Estoy suscrita a muchos boletines de editoriales, me gusta mantenerme informada y siempre suelo dar mi opinión sobre lo que me parece la presentación de una determinada novedad. Creo que mi entusiasmo fue tan palpable cuando me presentaron esta que la editorial se puso en contacto conmigo para hacérmelo llegar.
Tantas eran las ganas de leerlo que no duró mucho en mi estantería, tan solo un par de meses cuando hay libros que llevan allí años atrapados. Me pareció una buena novela para el verano, que mejor que un thriller para esas tardes calurosas y esos viajes en tren. Me costó un poco de leer porque me encontraba inmersa en esos momentos en las fiestas patronales del pueblo y los madrugones para trabajar y las escasas horas de sueño me pasaron factura y muchas veces me he dormido en el sofá de casa con el libro en la mano.
No vayáis a pensar que era soporífero, pues nos encontramos con un libro de mucha acción, pero el cansancio podía más que mi curiosidad por la trama. Avanzo que el libro me ha sorprendido muy gratamente, que lo disfruté como una niña, y que cuando terminó me dejó un poco huérfana, seguía necesitando a los personajes y el misterio escondido en el manuscrito por más que este ya me había sido desvelado. Creo que esa sensación me la causó el final que es un tanto sorprendente y que deja demasiado a la imaginación del lector, y la de una servidora se desboca por momentos.
El autor
Luis Zueco nace en Borja, Zaragoza, en 1979, ingeniero, licenciado en Historia y máster en Investigación Artística e Histórica por la UNED. Colaborador habitual en medios de comunicación, radio, televisión, prensa escrita y on-line, imparte asiduamente conferencias sobre historia, patrimonio y fotografía.
Ha escrito multitud de artículos de investigación y en 2011 publicó sus primeros títulos que obtuvieron un gran éxito comercial y de crítica, alcanzando ambos su segunda edición en pocos meses: Rojo amanecer en Lepanto, novela histórica ambientada en la famosa batalla, y Castillos de Aragón. 133 rutas, una publicación a medio camino entre la divulgación histórica y la guía de viajes.
Como fotógrafo ha expuesto en numerosas exposiciones y es el autor de los blogs culturales exposicionesenmadrid.blogspot.com y exposicionesenzaragoza.blogspot.com. También lo podréis encontrar en su web www.luiszueco.com
En facebook: facebook.com/LuisZuecoEscritor
En twitter @luiszueco
Y el blog de la novela elescalon33.blogspot.com
Argumento
Nos encontramos ante una novela en la que contar el argumento es complicado debido a sus dos líneas argumentales que se entrecruzan magistralmente. Intentar no desvelar ningún secreto se presenta complicado por lo que esta sinopsis puede esconder más que poner de manifiesto.
Silvia es una mujer de su tiempo, soltera, con inquietudes, un trabajo apasionante y mucha rutina en su vida. Madrid es la ciudad donde vive y trabaja, su afición las antigüedades y se centra sobre todo en los libros, mapas y fotografías. El lugar donde vive es un enclave robado al misterio, sin embargo solo tiene un anhelo en su vida, ganar bastante dinero y retirarse a un enclave retirado para poder disfrutar de la soledad y la paz que se respira en los pueblos.
Mientras llega esto se divierte con sus amigas Marta y Vicky, trabaja como restauradora en la Biblioteca Nacional de Madrid y compra on-line antigüedades que le llaman la atención. Precisamente su última adquisición un libro sobre los amoríos de Quevedo datado en el s. XIX pondrá su vida patas arriba y la sacará de la monotonía en la que vive.
Observando el libro Silvia se da cuenta que las guardas están un poco estropeadas y la embarga en el enfado, sin embargo una vez estropeada se dedica a investigar y encuentra un manuscrito más antiguo que el libro en cuestión, que contiene 7 símbolos y seis descripciones que no sabe descifrar. Acude a su compañero de trabajo que traduciendo el manuscrito se da cuenta que tiene algo gordo entre manos.
Otro personaje oscuro y siniestro está interesado en el manuscrito y su salida a la luz lo pondrá en marcha para recuperarlo, Silvia ajena sigue sin saber dónde buscar, parece que la clave se encuentra en castillos medievales pero el tema es totalmente desconocido para ella. La casualidad se alía con ella y un programa de radio le da esperanzas. Alex Aperte es experto en castillos y acepta colaborar por curiosidad.
A partir de este momento sus vidas se convierten en un ir y venir y en una búsqueda constante de las claves que les lleven a la resolución del misterio. ¿Te apetece unirte a ellos? Yo ya lo hice
Mis Impresiones
Cuando comencé a leer a esta novela lo hice consciente de que me encontraba ante una novela de entretenimiento puro y duro, una de tantas que se valen de los símbolos, y los secretos antiguos ocultos en manuscritos y arquitectura. Digamos que el lastre dejado por el Código Da Vinci todavía sigue siendo rentable. Sin embargo la obra me sorprendió por todos los costados desde el principio, por varios motivos y pronto me dejó muy claro lo equivocada que estaba.
Lo primero que sin duda me atrajo fue su protagonista Silvia, una mujer que pudiendo ser feliz se encontraba un tanto desmotivada, su trabajo aunque apasionante se había burocratizado mucho, y la hacía sentirse un poco de vuelta de todo. Su relación con los hombres distaba mucho de ser perfecta y sólo parecía llenarla esa salida con sus amigas que la obligaba a buscar terrazas nuevas de vez en cuando para sorprenderlas. Y por si fuera poco una gran amante de los libros, pero no de todos, los bestsellers no entraban en sus cálculos. Para mí la protagonista perfecta. La temprana aparición del manuscrito y todo el misterio que lo envuelve convierten esta novela en thriller que si bien no es trepidante, tampoco deja resquicio para que la trama se relaje, para ello cuenta con dos tramas que se entrecruzan en numerosas ocasiones hasta que confluyen en los capítulos finales.
En la primera trama encontramos a Silvia, que habiendo encontrado un manuscrito que no comprende se dedica a involucrar a expertos, con consecuencias más o menos indirectas para estos. Silvia y Alex Aperte terminan convirtiéndose en un tándem de lo más atractivo en connivencia con Santos un personaje para mí un poco infrautilizado que podría haber dado mucho más juego.
En la segunda trama mucho más oscura y siniestra encontramos a un ladrón de arte de oscuro pasado que no tiembla ante ningún reto, Edgar Svak ha renunciado a su vida por su profesión y aunque esta aflora por pequeños resquicios es capaz de mantenerla a raya. Svak es contratado por un siniestro personaje que no nos será simpático en ningún momento, el multimillonario Alfred Llull que como tantos otros busca la senda de la inmortalidad, aunque el mismo parece que haya hecho un pacto con el diablo. A su servicio un ser misterioso que se desliza como las sombras y que se pegara a Silvia y a Alex. Y faltará por entrar en acción Margot, una enigmática mujer que jugará sus cartas de forma insospechada.
A priori la segunda trama puede parecer mucho más atractiva que la primera, sin embargo al menos en mi caso no ha sido para nada así, y creo que eso se debe al estilo del autor. La historia está narrada en tercera persona por un narrador omnisciente que nos va situando en cada una de las acciones, por lo que tenemos desde el principio un fresco impresionante. La experiencia del autor en los medios de comunicación y como ponente de conferencias se traslada a la narración, por lo que Alex Aperte se convierte en un personaje rico en matices y aleccionador, que habla con pasión de la historia y nos lleva de la mano hacía el descubrimiento de los castillos y fortalezas medievales y la forma de vida de sus moradores. Y tengo que reconocer que esta es la parte del libro que más me ha entusiasmado. Esperaba los largos monólogos de Alex tratando de impresionar a Silvia con sus conocimientos, a la vez que deseaba haber tenido profesores de historia con una pasión similar al explicar el temario.
Me ha parecido ver en Alex que termina comiéndole protagonismo a Silvia el alter ego de Luis Zueco, por lo poco que conozco de él como profesional, y me he preguntado en muchísimas ocasiones cuanto hay del autor en el protagonista, pero esa pregunta solo la puede contestar él.
Luis Zueco pone de manifiesto una de las grandes problemáticas que envuelven el mundo del arte, el robo, durante un tiempo este fue tan usual que llegó a sernos hasta familiar, grandes fortunas encargando unos robos que solo pueden disfrutar ellos. El personaje de Svak me parece muy logrado, un hombre de éxito en su terreno, contratado por los mejores e infalible y sin embargo con un pasado al que ha tenido que renunciar para seguir siendo el mejor y no perjudicar a nadie. Me ha sorprendido su inteligencia, y su intuición, y sobre todo me ha resultado muy atractivo, porque completaba las piezas del puzle que parecían faltarle a nuestro tándem.
El libro:
Nos encontramos como he dicho antes con una novela escrita en tercera persona por un narrador omnisciente que va envolviéndonos en luces y sombras para dar el toque de intriga a la historia. La novela se divide en tres partes.
En la primera el protagonismo es para Silvia y su forma de vida y nos sitúa en Madrid, y me atrevo a decir que hará las delicias de cuanto madrileño la lea porque hace un recorrido casi fotográfico por algunos rincones de la ciudad, si ya los conoce el lector seguro que se regodea en ellos, y si no todavía no los ha descubierto les creará la necesidad de hacerlo. En esta parte la acción es todavía latente, solo con algunos toques y parece que nos está presentando a los diferentes personajes y encuadrándolos en la historia.
En la segunda parte Silvia y Alex comparten el protagonismo aunque poco a poco el señor de los castillos se lo va robando. El paseo que nos ofrece el autor por la historia de los castillos medievales españoles y por la geografía española no tiene precio y la he disfrutado como una niña. En esta parte la acción se vuelve más rápida, una sombra sigue a nuestros protagonistas que tienen la sensación de hallarse en constante peligro. La historia va sembrándose de muertos y el inspector Torralba comienza pisarles los talones a Silvia y a Alex.
En la tercera parte la historia aunque sigue un poco de aquí para allá, se centra en el desenlace y en un castillo ubicado en Teruel, con todos los símbolos encontrados y el secreto desvelado el peligro se hace más latente, la acción se intensifica y el final resulta sorprendente y demasiado abierto para mi gusto, porque tengo una imaginación muy poderosa que echó a volar de inmediato.
El estilo del autor es ágil, directo y aleccionador. Se vale de largos monólogos para la parte histórica que no enlentecen la acción por los diálogos cortos y directos que salpican la narración. Incluso para aquellas personas que no gusten de la historia creo que pueden disfrutar esta novela por la parte de la intriga y sobre todo aprender un poco más de un mundo tan desconocido y apasionante como la arquitectura medieval y las marcas de cantero.
El autor ha creado unos personajes que se levantan del papel, unos personajes de carne y hueso con los que bien podríamos cruzarnos cada día por la calle, y para mi ese ha sido un atractivo más a la hora de leer la novela. He disfrutado con cada uno de ellos, me he visto reprendiéndolos por su actuación, comprendiéndolos y poniéndome de su parte, admirándolos aunque no compartiera su forma de ser. Si un personaje me ha resultado atractivo por lo escurridizo que es y lo poco que lo he entendido ese ha sido Margot, una mujer que nunca he entendido de que lado estaba y porque actuaba como lo hacía… y desde luego tras terminar la novela sigo igual.
Sin embargo a riesgo de poder desvelar partes de las personalidades de los personajes que puedan deslucir su lectura esta vez os dejo tan solo esas ligeras pinceladas con las que he salpicado el texto y me reservo el análisis de los personajes, porque creo que merece la pena descubrirlos por uno mismo.
Un viaje por España
Leer siempre ha sido una forma de viajar tan válida como cualquier otra, se depende de la pericia del autor para sumergirnos en la historia y para recrear los pasajes. Nuestro autor es fotógrafo y esa faceta se nota a cada paso. Porque descubre tan minuciosamente el enclave que parece que nos encontremos junto a él.
Me ha gustado ese viaje por los castillos medievales y por la geografía española y lusa, descubrir que España es el país con más fortificaciones militares. Sobre todo he disfrutado cuando ha llegado a mi tierra. Conozco Peñiscola, he visitado su casco antiguo y su castillo en muchas ocasiones y me he visto transportada allí gracias a la pericia del autor y su entusiasmo en las explicaciones.
Viajar me apasiona y falta de tiempo y recursos para hacerlo de forma presencial, creo que libros como el de Luis Zueco nos ayudan a mover la imaginación con el cuerpo sentado cómodamente en un sofá. Así que considero eso como un atractivo más para adentrarte en la narración.
Son siete castillos los que hay que encontrar, seis en la geografía española y otro en la vecina Portugal. La península ibérica más protagonista que nunca y si conoces nuestra orografía y nuestros monumentos seguro que en más de uno habrás recalado, aunque reconozco que no es mi caso, pero ya tengo una expectativa más para cuando retome mis viajes.
Conclusión
Un libro en el que puedes encontrar numerosos alicientes, si no te gusta la historia te atrapara la acción y la personalidad de los personajes, y presumo que no llegaré a cargarte la parte descriptiva. Y si la historia te apasiona te perderás en las palabras de Alex y desearás sus intervenciones como me sucedía a mí.Una historia redonda, con dos tramas que se complementan y en la que podemos encontrar algún error de imprenta que supongo que se resolverán en próximas ediciones. Sin duda habrá que tener en cuenta a Luis Zueco en el panorama literario. Este thriller de corto histórico es lo primero que leo de él y presumo que no será lo último.
¿Te animas a viajar con la imaginación?, ¿A correr peligros y a resolver el misterio que esconde el manuscrito? ¿A qué esperas para hacerte con un ejemplar?
Esta lectura se enclava dentro del mes temático histórico de Laky