Combinar estas dos palabras en una frase no es siempre posible y es que un estudio, al ser de reducido tamaño, ya es un gran inconveniente para que llegue a ser perfecto.
Con apenas 35 m² sin embargo, fijaos lo completa, moderna y atractiva que puede ser una vivienda. Para empezar es un ático, lo que muchas veces se traduce en vistas, terraza, menos vecinos, menos ruidos, etc. casi siempre son ventajas.
En este caso la distribución es prácticamente diáfana, lo que hace que la luz natural se multiplique y la sensación de amplitud también. Tenemos la división acristalada entre el dormitorio y el resto, que divide y protege de ruidos, pero deja pasar la luz y transforma los pocos metros en muchos más.
El mobiliario es funcional y moderno, perfecto para una persona, con buen sitio de almacenaje en la cocina y el dormitorio. Al ser la cocina abierta hay incluso espacio para una mesa de comedor, redonda, rodeada de sillas Eames que tanto nos gustan, la originales ¿eh? las copias las aborrecemos!
Y la última joya de la casa, aunque no menos importante, la terracita, que seguro en los días de verano hará las delicias de su dueño. ¿Qué os parece, podríais vivir en un estudio así? Yo si viviera sola, por supuesto. ¡Feliz lunes!
Vía: Henrik Nero