Puesto porJCP on Sep 20, 2013 in Autores

La “gran banca” se aprovecha de la artificial crisis y de la corrupción de quienes gobiernan, para hacerse aún más grande. De manera que si crece, el expolio aumenta. Así de sencillo.
Nadie desconoce que lo que han llamado crisis no es igual para todos. Pero lo que muchos no sospechaban es que gracias a los llamados “rescates” bancarios –que no son sino un auténtico saqueo de los recursos públicos– la banca la está aprovechando para crecer aún más rápido y hacerse más grande a costa del dinero de todos sobre el que el Gobierno reaccionario de la Monarquía decide su destino, pues para eso son representantes de la población paganini. Según los últimos informes de la patronal bancaria (AEB), la gran banca controla un 62% más de depósitos que al inicio de la crisis.
Los datos revelan un hecho fundamental, la crisis no sólo no les ha impedido crecer, sino todo lo contrario: el sistema de rescates bancarios impuesto por el FMI y Berlín, y ejecutado por los gobiernos de Zapatero y Rajoy, les ha servido para seguir creciendo y multiplicar su tamaño. Lo que redunda necesariamente en un aumento del trinque por parte de los comisionistas, osea, de los políticos.
El hundimiento de las cajas de ahorros, sostenido (rescatadas) con miles de millones de dinero público –agravado por los escándalos de las preferentes y el saqueo de sus directivos con millonarias indemnizaciones, jubilaciones y bonus– ha sido aprovechado por la gran banca para quedarse con los clientes y sus depósitos.
La gran mayoría de las cajas han sido saneadas con miles de millones de los contribuyentes para ser vendidas a precio de saldo a la gran banca. Así la Caja de Ahorros del Mediterráneo fue entregada al Sabadell por 1€ después de ser reflotada por el FROB con más de 5.000 millones de euros. ¿Ésto tiene nombre?.
Veamos:
El Santander del Botín, líder del sistema financiero, es el que más dinero ha captado: 250.000 millones de euros, hasta los 595.000 millones de euros en depósitos a 30 de junio de 2013. ¡Un 72,5% más que al inicio de la crisis!
El BBVA, segundo banco del sistema financiero, ha incrementado sus activos en un 27%, alcanzando con los 29.373 millones de euros de UNNIM (la suma de las cajas de Sabadell, Terrasa y Manlleu) – “comprada” también por 1 euro– los 340.000 millones de euros en depósitos.
El Sabadell, gracias a las compras del Guipuzcoano y la CAM, ha triplicado sus depósitos, pasando de 33.000 millones hace cinco años a 98.000 millones de euros.
El Popular ha multiplicado por dos el volumen de sus depósitos tras la compra del Pastor, hasta los 106.000 millones de euros.
Engordan pero no prestan
Zapatero y Rajoy han justificado los sucesivos rescates financieros con la cantinela de que había que “salvar a la banca para favorecer el crédito”.
Han fabricado una gran mentira que al no tener que responder ante nadie se la pueden permitir: mientras la gran banca se quedaban con un 62% más de nuestros ahorros en sus depósitos, los préstamos familiares-empresariales sólo han crecido un 9% en los últimos cinco años y medio. El grupo Santander lleva cinco años estancado en la concesión de crédito. Y lo que han aumentado el BBVA (un 8,8%), el Popular (un 13%) y el Sabadell (un 77%) se debe a los créditos que han asumido de las cajas con las que se han quedado.
Dicen que no prestan porque han tenido que cubrir las nuevas exigencias de capital impuestas por la reestructuración bancaria y dotar de más fondos al Fondo de Garantía de Depósitos.
Una auténtica y desvergonzada justificación. Porque no sólo tienen los depósitos, también disponen de los 248.293 millones de euros logrados del Banco Central Europeo entre el 1% y el 0,5% de interés.
La realidad es que durante la crisis Botín y Cía han aumentado sus depósitos en más de 670.000 millones de euros, pero siguen negando –con la complicidad del gobierno– el crédito, el dinero fresco y efectivo que necesita nuestra economía y las familias para salir de la crisis.
Cuando un país está gobernado por sátrapas ladrones a los que la gente sigue legitimando con su voto, ya nos podemos quejar cada medio minuto que no se conseguirá absolutamente nada. Quienes no votan acabarán enfrentándose a los que sí lo hacen y por ahí comenzará el fregao. Si no, al tiempo.