Revista Deportes

El fúbol moderno.

Publicado el 22 julio 2011 por Llallo
Cada vez el futbol se va volviendo más físico, empieza a importar más la velocidad, la fuerza y la resistencia que la calidad, el regate y la técnica de un jugador. Este deporte es muy diferente al de principios del siglo XX, donde se jugaba por diversión, el amateurismo era obligatorio y todavía no llegaba la corrupcion al futbol. Pero al pasar de los años los clubes empezaron a pagarle clandestinamente a los jugadores, estos ya no jugaban por mera diversión sino por trabajo. Poco a poco se fue transformando la figura del entrenador en un nuevo e imponente líder: el director técnico.
Antes los jugadores jugaban para divertirse y ganar en el proceso; ahora, bajo el mando del director técnico, tienen como objetivo ganar, y si es posible divertirse en el intento. Uno de los principales trabajo de los directores técnicos es formar esquemas tácticos para disminuir la fluidez del juego rival, estos intelectuales suelen pasar horas estudiando cada debilidad del contrario, y luego analizando las fortalezas de su equipo y como aprovecharlas. Tanto así que los DTs desarrollaron ingeniosas y complicadas jugadas para los tiros libres, corners o cualquier otro momento, con la única finalidad de marcar un gol.
Así fue como con el tiempo descubrieron que la fuerza, la velocidad y la resistencia son esenciales para que un jugador de menor nivel pudiera hacerle cara a un crack. Además con la compra de los derechos televisivos empezó a ser mucho más importante ganar, llegó la corrupcion al futbol y los salarios subieron. El futbol se fue volviendo mucho mas defensivo y menos creativo, es cada vez menos común ver a un equipo con las intenciones de golear al rival y se fue volviendo popular la idea de defenderse a toda costa y atacar cuando se puede. A tal punto se llego que en la competición de selecciones mas antigua del mundo, la Copa America, uno de los finalistas no ha ganado ningún juego, los ha empatado todos…

Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revistas