Las propuestas más esperadas de lo que dará de sí el género fantástico durante 2014.
The sacrament (Ti West): otro ejemplo más de la moda del found footage, esta vez sobre una secta apocalíptica que prepara un suicidio masivo. Nos hará evocar y dará un aire al film de culto británico El hombre de mimbre (The wicker man, Robin Hardy, 1973), ya rehecho en una desafortunada producción de 2006 protagonizada por Nicolas Cage. Ya veremos si confirma a West como uno de los valores más seguros del panorama fantástico actual, o echa por tierra un prestigio labrado a base del talento mostrado en La casa del diablo (The house of the devil, 2009) y The inkeepers (2011). Eli Roth en la producción le da caché al asunto.
The green inferno(Eli Roth): a simple vista parece que será un homenaje a la película de culto Holocausto caníbal (Ruggero Deodato, 1981) pero a lo bestia, ya que la firma Roth, responsable de Hostel, que contará la historia de unos jóvenes que se pierden en la selva amazónica y son secuestrados por una tribu caníbal, que torturarán y devorarán (o sea, un Hostel en la selva). Mucho se ha hablado en foros y festivales de esta esperada nueva propuesta del director que se hizo un nombre gracias a Tarantino, así que podemos (medio)afirmar que seguramente se trate de la mejor película del director, aterrador y muy desagradable, con las escenas gore más extremas vistas en una pantalla de cine en años.
Afflicted (Derek Lee): otra nueva vuelta de tuerca al found footage, esta vez tratando el tema del vampirismo, con una historia de dos amigos de viaje por Europa, los cuales se enfrentan a la infección que uno de ellos sufre y que lo va transformando en una criatura aterradora, todo ello contado en forma de vídeo diario. Así a simple vista se me ocurre que puede ser un híbrido entre las estupendas Chronicle (2012) y La mosca (The fly, David Cronenberg, 1986). Una buena muestra de horror que ha triunfado allá donde ha sido expuesta, con un potencial artístico fuera de toda duda.
Oculus (Mike Flanagan): un thriller de contornos clásicos, con fantasmas, espejos y otros elementos clásicos del más convencional horror film. Será clásico aunque intentará ser inteligente, alejándose de las modas (found footage) y los lugares comunes del género (Insidious).
The station (Marvin Kren): terror biológico en una aislada zona de los Alpes, donde una forma de vida diferente a la nuestra amenaza con terribles mutaciones a las personas que trabajan allí. Todo nos evoca a la granLa cosa (The thing, John Carpenter, 1982), especialmente los efectos especiales, pues he leído que serán artesanales, muy en la onda de los 70/80, y también al film de culto aunque poco conocido (y no tan brillante como se ha dicho) The last winter (Larry Fessenden, 2006)
Enemy (Dennis Villeneuve): esperada nueva propuesta del realizador de la prestigiosa Prisioneros (Prisoners, 2013), que adapta a la gran pantalla un cuento de José Saramago, sobre un personaje atormenado por su propio (y quizás irreal) doble, todo bajo el mismo tono pesadillesco que ya evocaba Prisioneros. Puede que recuerde un poco a la magnífica Carretera perdida (Lost highway, David Lynch, 1996). La reciente reputación adquirida de su firmante, su fotografía, su, a priori, apabullante guión y el hecho de que viene protagonizada por un primer espada como Jake Gyllenhal la convierten en, seguramente, una propuesta de horror nihilista y aterradora.
La belle et la béte (Christophe Gans): el director de, la ya algo lejana en el tiempo, El pacto de los lobos (2000) vuelve con esta propuesta que, a priori, parece que va a tener muy poco que ver con la versión de Disney que todos conocemos de La bella y la bestia, y sí mucho más con ese cine de género francés que tanto gustó a finales de los 90. Será una superproducción. Veremos.
Dawn of the planet of the apes (Matt Reeves): secuela de la interesante El origen del planeta de los simios, esta vez ya con el punto apocalíptico que tanto evocaba el final de la icónica El planeta de los simios (The planet of the apes, Franklin Schaffner, 1968) y centrándose en la toma de poder del planeta por parte de los simios inteligentes. Se espera de ella, como mínimo, lo que ofreció su antecesora, que dejó en ridículo (si hacía falta incluso dejarla, que no está claro, ya que era una mierda) la versión de Tim Burton, por mucho que la película de Burton fuera un remake y no una precuela. Reeves ha conseguido unos efectos especiales geniales, que no harán sino aumentar su caché, algo bajo pese a que es el firmante de Monstruoso(Cloverfield, 2008) y la versión norteamericana de Déjame entrar (Let me in,2010), dos buenas películas.
Edge of tomorrow (Doug Liman): invasiones extraterrestes al estilo japonés, o sea, que promete bastante más que una repetición de los esquemas de películas conocidas como Independence day (1996) o Starship troopers (1997). Ciencia-ficción y acción en una superproducción que vendrá protagonizada por Tom Cruise, con lo cual el éxito comercial está bastante asegurado. Otra cosa será el crítico. Además, el último acercamiento de Cruise por estos lares, Oblivion,no fue para nada brillante, pese a que entretenía.
Godzilla (Gareth Edwards): visión oscura y aterradora, y esperemos que mucho mejor (todos recordamos la hecatombe que supuso el Godzillade finales de los 90, dirigido por Roland Emmerich), del clásico monster film japonés. Se han depositado unas expectativas quizás exageradamente altas, especialmente cuando Pacific rim (pendiente de ver por el que suscribe esta entrada) funcionó comercialmente por debajo de lo esperado. Pese a todo, imagino que en Asia arrasará, habida cuenta de que es la adaptación mainstream de uno de sus iconos populares.
Interestellar (Christopher Nolan): nueva incursión en la realización para Nolan, tras cerrar su trilogía de Batman de la manera menos brillante posible- El caballero oscuro: la leyenda renace (The dark knight rises). Como con la nueva adaptación de Godzilla, se ha hablado una barbaridad y se espera no menos que eso de esta nueva 2001: una odisea en el espacio(Stanley Kubrick, 1968) para las nuevas generaciones de aficionados, o sea que podemos estar hablando de la película de ciencia-ficción que marque una época. Agujeros negros, viajes a los confines del universo… y Nolan, uno de los creadores cinematográficos de mayor interés de la última década.
Robocop (José Padilha): ambiciosa nueva versión de uno de los mejores trabajos de Paul Verhoeven, la mítica y muy violenta Robocop(1987). No pinta nada mal, siempre y cuando sea una película de acción pura y dura que entretenga de principio a fin. Puede parecer algo pretencioso (y quizás hasta innecesario) liarse a hacer remakesde películas tan populares (y por qué, según la edad que se tenga, hasta incluso recientes, pero más que nada populares), de modo que será aceptada y aplaudida sólo si es realmente buena.