Siguen bajando agitadas las aguas de la caverna. Uno de las excusas para esta santa ira radicaría en el “ataque a las libertades que representa la ley antitabaco”.
Bien, ya sabemos que en las cloacas políticas españolas, el “derecho a la vida” se esgrime solo respecto a óvulos fecundados o para prolongar la agonía de enfermos terminales taladrados de dolor.