Dos historias paralelas que se cruzan en un punto. Dos hombres que se rebelan a su destino. Dos padres defraudados por sus hijos. Amor y desamores, amantes, criadas que se casan con los señores, hijos que no lo son e incluso personajes del más allá. Y además humor, mucho humor, que sustentado por la prosa perfecta y concisa de Vargas Llosa nos envuelve en este peculiar culebrón ambientado en Perú . Una trama propia de una telenovela que sin estar a la altura de La Fiesta del Chivo o El sueño del Celta conserva la brillantez de la pluma del nobel peruano. Y además esos personajes ya familiares que nos hacen sentir en casa.