El Liberalismo es, dicho claramente, animalización gregaria.

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Puesto porJCP on Nov 29, 2014 in Autores

“ La guerra educa para la libertad. Pues ¿qué es la libertad? Tener voluntad de auto-responsabilidad. Volverse más indiferente a la fatiga, a la dureza, a la privación, incluso a la vida. El hombre que ha llegado a ser libre, y mucho más el espíritu que ha llegado a ser libre, pisotea la despreciable especie de bienestar con que sueñan los tenderos, los cristianos, las vacas, las mujeres, los ingleses y demás demócratas. El hombre libre es un Guerrero”.

“A quien es a quién más odio, entre la chusma de hoy. A la chusma de los socialistas, a los apóstoles de los chandalas, que con su pequeño ser socavan el instinto de placer, el sentimiento de satisfacción del obrero, que lo hacen envidioso, que le enseñan la venganza. La injusticia no está nunca en los derechos desiguales, sino en reclamar derechos iguales. ¿Qué es malo? Pero si ya lo he dicho: todo lo que proceda de la debilidad, de la envidia, de la venganza. El anarquista y el cristiano son de una misma procedencia”.

Antes que nada, pido disculpas por haberle escupido la paella a algunos. Aunque en realidad esto lo dice Federico, y no yo… En dos frases el filósofo alemán aclara meridianamente cual es su posición con relación al liberalismo, al socialismo, y al anarquismo. Y que, como la práctica totalidad de los movimientos ideológicos que han conformado la realidad presente de Europa, son herederas de esa plaga nefasta que es el Judeo-Cristianismo.

El Anarquismo (el acratismo es un concepto más complejo) es valioso en tanto actitud individual, o de pequeños grupos, de rebeldía y autosuficiencia ante un estado de cosas tan pavoroso como el actual. Pero el Anarquismo no podrá jamás ser un Sistema, y mucho menos con la complejidad de la sociedad actual, porque sería anulado por su propia naturaleza. El Anarquista (hablo del anarquista de libro, no del 99% de los “anarquistas” que nutres las organizaciones actuales que se definen como tales) encaja perfectamente en la figura del León, más bien una variante de él, en la parábola de Nietzsche.

El Ente Estatal, al igual que los dentistas y los mecánicos, es un mal necesario. Nietzsche habla pestes del Estado, del Reich alemán, porque visualiza premonitoriamente la decadencia del alma alemana y europea, y en qué se convertirá el Estado en manos de liberales y socialistas apátridas. Una máquina burocrática parasitaria, cuya máxima expresión fue la autoinmolada URSS. Pero que también lo es en las naciones aparentemente libres, pero verdadera y completamente subyugadas al látigo de la Oligarquía Financiera (Capitalista) Internacional. Desde 1945 para ser más exactos, año en el cual fuera derrotada la única y verdadera alternativa práctica al Imperio de Mammón. Hoy los Estados (partidos políticos + burocracia) son instrumentos enteramente al servicio de los Mercados (Oligarquía financiera) y de sí mismos (intereses corporativos). La Deuda fue el Caballo de Troya.

Nietzsche dijo: “Es un nuevo paso hacia la independencia el atreverse a expresar apreciaciones que han de causar vergüenza a quienes las propagan. En este caso hasta los amigos y conocidos se manifiestan inquietos. Es este todavía un fuego por el cual debe pasar la naturaleza bien dotada; enseguida se pertenece aún más a ella misma” (Humano, demasiado humano).

Camarada Schicklgruber .