Revista Espiritualidad
El manuscrito de María Magdalena, por Chamuel Arcángel
La relación de Jesús y María Magdalena y el poder de la Alquimia de la Magia Sexual
El texto que figura a continuación está incluido en el libro “TheMagdalen Manuscript” de Tom Kenyon y Judi Sion. Se trata de una canalización procedente posiblemente de María Magdalena sin que el propio Tom Kenyon af irme taxativamente que esa sea su procedencia real aunque sí asegura haberlo recibido por esa vía. Junto a la propia “canalización”, que es lo que aquí se recoge, aparecen en el libro otros textos de Tom y Judi sobre la realización práctica de los ejercicios a que se hace referencia en el Manuscrito así como a las
Alquimias Internas en diferentes tradiciones y otras vivencias personales.
Dado que curiosamente el libro no parece estar traducido al castellano y habiendo constatado el interés de
muchas personas por conocerlo, hemos preparado esta traducción que probablemente no esté a la altura
de la que pudiera haber hecho un traductor profesional.
Debemos señalar también que hemos procurado respetar todo lo posible el texto original aunque en algún
momento pudiéramos pensar que existía una forma mejor de expresar la idea. El autor refiere el cuidado
que ponía Magdalena en cada palabra y expresión que transmitía y lo cuidadosos que ellos mismos fueron
en mantener la integridad del mensaje tal como ella lo expresó.
En cualquier caso el cariño y la dedicación con que hemos hecho este trabajo y la presencia de alguna
manera en todo ello de Magdalena nos hace sentir que el mensaje básico está perfectamente conservado.
Esperamos que el libro completo aparezca pronto en las librerías en su versión castellana.
Nota: Nos parece adecuado añadir esta recomendación de Tom sobre la realización práctica de los ejercicios:
Debido a que estos ejercicios llevan energía al cerebro y a los centros superiores de la cabeza, están
contraindicados para algunas personas. Si ha sufrido un traumatismo craneal o ha experimentado apoplejía
consulte con su médico antes de realizarlos. Aquellos que sufran ataques de tipo epiléptico deberían
buscar también el consejo de sus médicos antes de comenzar estas meditaciones de entrenamiento.
Finalmente estos ejercicios están contraindicados para los maníaco-depresivos especialmente durante las
f ases maníacas. Para las demás personas son inofensivos y muy beneficiosos. Si en cualquier momento
durante las meditaciones experimenta dolores de cabeza pare y descanse.
EL MANUSCRITO DE MAGDALENA
Uno
Fui educada en el conocimiento de la magia.
Mi padre era de Mesopotamia y mi madre de Egipto.
Antes de que yo naciera ella había rogado a Isis que la bendijera con una hija.
Yo soy esa hija.
Y fui conocida como María Magdalena.
Cuando tenía 12 años fui enviada a estudiar con una hermandad secreta de
Iniciados bajo las alas de Isis.
Fui instruida en los secretos de Egipto, las Alquimias de Horus y la Magia
Sexual del culto de Isis.
Cuando me encontré con el que llamáis Yeshua, había acabado todas mis
iniciaciones.
Estaba preparada para el encuentro con él en el pozo.
Los Evangelios se refieren a mi como una prostituta, porque todos los Iniciados de mi orden llevaban un
brazalete de oro que era una serpiente; y era sabido que practicábamos la magia sexual; y a los ojos de los Hebreos éramos putas.
Cuando vi a Yeshua y nuestros ojos se encontraron, supe que habíamos sido destinados el uno para el
otro.
Lo que voy a contaros no ha sido conocido, salvo por aquellos que estuvieron conmigo.
Existen muchas leyendas sobre lo que sucedió.
Pero para mi es una historia del más profundo amor.
Lo que Yeshua tenía como visión del mundo no me compete.
Mi historia es una historia de amor.
Mucha gente seguía a Yeshua.
Y las oportunidades que tuvimos para estar juntos en solitario fueron muy pocas.
No está escrito en los Evangelios porque nadie lo supo, sólo los más cercanos a nosotros.
Antes de que Yeshua fuera al jardín de Getsemaní, concebimos una hija, y su nombre fue Sarah
Dos
La historia que voy a contar parece fantástica.
Recuerdo los arrecifes de Maries de la Mer, aunque entonces, por supuesto, no se llamaba así.
Fue el lugar donde nuestro barco atracó. Sarah era muy pequeña.
No tenía un todavía un año.
Yo estaba rota de pena y desconcierto.
Estaba allí cuando Yeshua fue crucificado.
Le vi en la tumba y le amortajé con su madre a mi lado. Recordaré siempre el olor de la mirra.
Fue uno de los ungüentos que utilizamos.
Yeshua se me apareció en su luminosa claridad. No podía dar crédito a mis ojos y entonces toqué sus
heridas. Sus discípulos se sintieron celosos porque había venido a mi primero.
Me resultaba muy extraño tener a mi amado transportado a otra esfera, a otro mundo, mientras yo y
nuestra hija cruzábamos solas el Mediterráneo.
No estábamos seguras y tuvimos que abandonar Egipto porque allí es donde habíamos ido.
Cuando cruzamos hacia las costas de lo que iba a ser Francia era todo tierra desconocida.
Nos recibieron sacerdotisas del culto de Isis y nos dirigimos hacia el norte bajo la protección de los
druidas, Isis los había hablado y habían escuchado la llamada para proteger a su hija, Sarah.
De este modo fuimos hacia el norte a través de otra gran masa de agua hacia lo que iba a convertirse en
Inglaterra.
Y allí se nos llevó en secreto al corazón más sagrado de los Druidas, a Tor y Glastombury.
Aunque estábamos más seguras que en Israel o Egipto, la influencia romana se extendía también a
Inglaterra, y permanecimos escondidas.
Vivimos en esta zona durante muchos años, y Sarah se casó con un hombre cuyos descendientes se
convertirían en los Caballeros Templarios, y yo me fui al norte hacia Gales y viví junto al mar durante el
resto de mis días.
Os contaré, que en aquellos años cuando vivía sola junto al mar, Yeshua me visitaba a menudo.
Por supuesto, no era como antes, porque su cuerpo era más energía que carne, más luz; pero en cualquier
caso era extraordinario estar con él de nuevo.
Cuando morí él estaba allí y me llevó hacia lo que algunos llaman cielo, pero es sólo un lugar en el alma.
Tres
Comienzo mi historia en el pozo porque en muchos sentidos allí es cuando comienza verdaderamente mi
vida.. Todos los años previos fueron de preparación para este encuentro.
Aquella mañana notaba que algo se removía.
Una especie de excitación –un temblor en brazos y piernas- antes incluso de que me encontrara con él.
Yo estaba ya en el pozo cuando él llegó.
Había echado ya mi cubo al pozo y él me ayudo a subirlo.
Algunos de los apóstoles vieron mi brazalete de la serpiente de oro y suponiendo que era una puta
quedaron aterrados de que el Maestro pudiera ayudar a una persona así.
Pero eso no me importó. Estaba en otro mundo, transportada por los ojos de Yeshua. Cuando nuestros
ojos se encontraron fue como
si estuviera mirando hacia toda la eternidad y supe que era aquel para quien yo había sido preparada –y él
también.
Seguí al lado de aquellos quienes le seguían, y en los anocheceres salíamos juntos; no cada
anochecer porque él era constantemente buscado.
Yo, que estaba instruida en las Alquimias de Horus y en Magia Sexual de Isis, era considerada muy
avanzada por mis maestros, pero por primera vez en los brazos de Yeshua, era una mujer temblorosa, y
tuve que luchar hasta encontrar el sendero central a través de mi deseo hasta el trono más alto, porque
para ello era mi instrucción.
Yeshua y yo, utilizando las técnicas en las que había sido instruida junto con los métodos que él había
aprendido en Egipto, pudimos cargar su Ka, su cuerpo de energía, con mayor luz y fuerza, de modo que él
pudiera trabajar fácilmente con los que venían a él. Y así fue.
Y todavía me parece irónico que los Evangelios cuenten que yo estaba en el pozo cuando Yeshua llegó, sin
embargo todas aquellas noches cuando Yeshua y yo estuvimos solos, él vino a mi pozo, para tomar de mi
los poderes de Isis, para desarrollarse y fortalecerse él mismo.
Cuatro
Estoy ahora mirando todo esto como si fuera un sueño y sin embargo, aún, tan vitalmente claro. Mi
corazón palpita cuando vuelvo sobre la historia como si fuera ayer. Aquella primera noche con Yeshua
aparece en mi mente tan clara como los cielos sobre Jerusalén.
Después de que pude pasar a través de mis deseos propios como mujer y de ascender el camino hacia la
alquimia espiritual en la que había sido instruida, podía ver la forma del espíritu de Yeshua ya luminosa, ya
brillante de luz.
Una paloma estaba sobre su cabeza, rayos plateados de luz desbordaban de ella.
Los sellos de Salomón, de Hator, de Isis, de Anubis y Osiris estaban en su forma espiritual.
Eran señales de que había pasado a través de esas iniciaciones. Había otros símbolos que no comprendí
porque venían de culturas que no conocía o en las que no había sido instruida, pero de los sellos egipcios
que yo conocía, él estaba en el camino del Alto Dios Horus.
Pero él no había pasado aún a través de su Iniciación de muerte y supe en mi corazón tembloroso que eso
era por lo que yo había sido llevada a él en este momento –para fortificar su alma con los poderes de Isis y
la Madre Cósmica de modo que pudiera pasar por el portal oscuro y alcanzar el Horus.
Aquella noche, después que hicimos el amor y utilizamos y armonizamos juntos nuestros cuerpos
espirituales, habiendo comenzado entre nosotros la acción de la alquimia, Yeshua se echó a un lado para
dormir.
Cuando yo le tenía en mis brazos, sentí un cambio dentro de mi, un deseo de protegerle, un deseo de estar
siempre con él, y la intuición, como el filo de un frío cuchillo, de que seríamos separados por fuerzas más
grandes que mi deseo.
Cinco
La Iglesia os habría hecho creer que yo era una puta, pero ahora os digo que la Iglesia es la puta, porque
os habría hecho creer que la mujer está manchada y que las pasiones sexuales entre un hombre y una
mujer son malvadas. Sin embargo es aquí, en el magnetismo de la pasión, donde se crea el útero de la
ascensión.
Este secreto de los secretos era conocido por todos los iniciados de Isis y sin embargo yo nunca hubiera
imaginado que sería aquella que lo llevaría a su más completa expresión en unión con alguien como Yeshua.
Pero para aquellos que desean conocer el viaje físico….después de la crucifixión de Yeshua, yo y María, su
madre, José de Arimatea, su hijo de doce años llamado Aarón y otras dos mujeres jóvenes nos pusimos en
camino del norte de Egipto.
Irónicamente nuestro camino nos llevó al este antes que pudiéramos volver hacia el oeste y tuvimos que
parar para buscar provisiones a lo largo de la ruta ya que nuestro barco era muy pequeño. Nuestro camino
nos llevó a Malta y a la diminuta isla de Oudish, de aquí a Cerdeña y al extremo de lo que ahora es la
Cinque Terra, f inalmente atracamos en Saintes Maries de la Mer e hicimos nuestra caminata al norte a
través de Rennes-le-Chateau hacia el norte de Francia y cruzamos el canal hacia la actual Inglaterra. Nos
asentamos en Glastonbury durante algunos años, hasta que Sarah cumplió doce.
Tras su duodécimo cumpleaños nos pusimos en marcha hacia el sitio entre los arrecifes donde habíamos
tocado tierra. Allí, tan cerca de Egipto, como nos era posible ir de un modo seguro, inicié a mi hija en el
culto de Isis y la bañé en las aguas del Mediterráneo según las enseñanzas que había recibido.
Después volvimos a Glastonbury, hasta que Sarah, mi hija y la de Yeshua se casó a la edad de 16 años. Se
unió a una familia bien conocida cuyos herederos llegaron a ser los Templarios aunque en aquel tiempo los
Caballeros Templarios no existían.
La línea hereditaria de esta familia, a través de Sarah, fue llevada hacia los mismos Templarios. Cuando Sarah estuvo casada y segura en su nueva vida, me marché al norte de Gales y viví en una pequeña cabaña de piedra junto al mar durante el resto de mis días.
Detrás de mi cabaña pasaba un arroyo que bajaba de la colina y me sentaba allí muchos días.
Había veces que este arroyo se dividía en dos, y los dos arroyos seguían uno al otro y luego uno giraba a
la izquierda y otro a la derecha. Me sentaba allí entre ellos pensando sobre la corriente de mi vida y de la de
Yeshua – como, durante un tiempo, f luyeron juntas y luego se separaron.
Seis
Recordaré siempre la primera vez que Yeshua vino a mi después de su resurrección.
Había luna nueva y el cielo estaba claro. Una niebla luminosa colgaba del brezo y todo estaba plateado por
la luz de la luna y de las estrellas. Vi aproximarse a mi una figura sobre el sendero tortuoso que llevaba a
mi cabaña.
Irónicamente, había salido para sacar agua del pozo y allí estaba él. Era el mismo, aunque con un
resplandor inconfundible. Mis ojos se llenaron de lágrimas; mi corazón palpitaba.
Corrí hacia él y paré en seguida, recordé sus palabras justo después de su resurrección.
“No me toques aún”, había dicho entonces “porque no he ascendido al Padre”
¡Oh, como yo, una iniciada de Isis, había anhelado todos estos años mantener el recuerdo claro!
¿Qué significaban estas palabras? Los cristianos han heredado sólo una parte de la verdad. La mayor
parte de ella está oculta en los misterios de la Gran Madre; y dado que la Iglesia buscó privar de derechos
a las mujeres y a todo lo que es femenino, arrojó lejos esta verdad.
Y la verdad tiene que ver con el mismo cuerpo Ka –lo que nosotros aprendimos como iniciados a llamar el
Doble Etérico o Gemelo Espiritual- porque el cuerpo Ka cuando está cargado con energía suficiente y
vitalidad aparece como el cuerpo físico. Sin embargo no está hecho de carne sino de energía en sí misma –
energía y luz.
Y así cuando Yeshua vino a mi tras su resurrección estaba en su Ka pero no estabilizado todavía porque
no había ido al Padre, es decir hacia el Gran Espíritu de su propia alma.
Así, antes de que pudiera hacerlo, tenía que pasar a través del portal de la muerte y viajar a través del
inframundo de su propio ser.
Hizo esto por dos razones tal como yo conocí. La primera, como un maestro del alma, fue porque hacer tal
cosa trae un gran poder al Ka.
Y la segunda para abrir un paso a través de la misma muerte de modo que otros pudieran seguirle y pasar
más fácilmente a través del mundo oscuro siguiendo la estela de su luz.
Y así la primera noche que nos reencontramos –lo siento ahora todavía detenidamente claro y fuerte- mi
corazón se llenó de alegría estando con él de nuevo.
Vino a mi esa noche justo antes de la medianoche y se marchó justo antes de amanecer.
Durante aquellas horas estuvimos echados juntos, nuestros cuerpos Ka se interconectaron de nuevo, sin
necesidad de hablar.
Nuestra comunicación fue telepática.
Y sin el acto físico del sexo, el Poder de la Serpiente dentro de él se unió al poder de la serpiente dentro de
mi y ascendimos hacia arriba a través de los caminos sagrados de nuestras espinas dorsales hasta el
trono de las coronas de nuestras cabezas llevándome hasta un absoluto éxtasis y dicha.
Y así fue como sucedió durante muchos años.
Venía a mi de este modo varias veces cada año. A veces hablábamos.
La mayoría del tiempo permanecíamos en unión.
Le pregunté donde estaba cuando no estábamos juntos. Dijo que había ido a muchos lugares sagrados de
la tierra – que se había reunido con mucha gente diferente. Dijo que estaba dejando un camino de luz.
Durante una de sus visitas le pregunté que me explicara ese concepto tan extraño.
Dibujó un círculo en el piso de tierra de mi cabaña y entonces reconocí como dos triángulos en
intersección, para hacer el trono de Salomón convertirse en la estrella de David.
Dijo que había muchas tierras que nosotros, en esta parte del mundo, no conocíamos. Muchas de ellas
tenían puntos que correspondían a los del Sello de Salomón. Al ir a estas zonas se aseguraba que su tarea
tendría unas raíces más profundas en el suelo de este mundo.
Siete
De todas las veces que él me visitó, la que recuerdo más intensamente es la vez que vino cuando Sarah
había venido a visitarme.
Acababa de quedarse embarazada y deseaba verme para que la bendijera y yo estaba emocionada de verla
a ella y a sus compañeros de viaje.
Había enviado aviso de su llegada a través de los Druidas, pero me llegó solo un día antes de que llegara
ella. Estuvo conmigo tres días y Yeshua apareció la segunda noche.
No sé si os podéis dar cuenta de lo extraño que era. Porque Sarah no había visto nunca a su Padre ni
Yeshua a su hija ¡Y ahora se reunían por primera vez! Y el cuerpo de su padre había vuelto a los elementos
en un relámpago de luz en su resurrección por lo que ahora estaba en su cuerpo Ka que emitía un tipo de
luz inconfundible.
Ambos se emocionaron, Sarah hasta las lágrimas y Yeshua hasta un gran pathos.
Estuvieron juntos una hora, sólo ellos, caminando fuera. No se lo que hablaron pero desde que
comenzaron hasta que acabaron el cielo se llenó de estrellas fugaces.
Antes de que Yeshua se marchara aquella noche, justo antes del amanecer, como solía hacer, puso sus
manos sobre el estómago de Sarah y bendijo al niño. Sarah se marchó al día siguiente plena de un
inconfundible sentimiento de paz.
De este modo os he contado lo que deseaba deciros sobre mi vida como madre y ahora volveré de nuevo
hacia mi historia como una Iniciada, a las Alquimias de Horus, a los secretos de Isis.
Ocho
Me refiero ahora a mi hermana amada, mi hermana en el Espíritu, la madre de Yeshua, también conocida
como María.
María fue una alta Iniciada en el culto de Isis, y había sido instruida en Egipto.
Esa es la razón por la que José y ella huyeron de la ira del rey de Israel, se dirigieron a Egipto; ella se
sentía segura allí entre las Sacerdotisas y Sacerdotes de Isis.
Su instrucción fue diferente a la mía, pero ambas servimos a lo mismo. Para explicar mi visión de María,
debo referirme a uno de los más profundos secretos del culto Isis. Según se creía y mantengo que es
verdadero, bajo ciertas condiciones, la misma Diosa podría ella misma encarnar, bien al nacimiento o a
través de una Iniciación espiritual.
María, la madre de Yeshua, cuando era muy joven, fue reconocida por las grandes Sacerdotisas del templo
de Isis, por su pureza de espíritu.
Fue adiestrada como Iniciada y alcanzó los niveles más altos.
Pero más allá de convertirse en una Sacerdotisa, fue instruida para convertirse en lo que se llama una
Encarnada.
Ser una Encarnada es ser un alma altamente avanzada y requiere pasar por una disciplina y una instrucción
espiritual tremenda.
En una Iniciación final, María se convirtió en el recipiente de un f lujo de energía que provenía de la misma
Isis.
En este aspecto, era la corporeización de la Madre Cósmica.
Era como si hubiera dos-Marías, la humana, pura de espíritu y de corazón, albergando dentro de ella, una
entrada directa hacia la Gran Madre, la Creadora de toda materia, del tiempo y del espacio.
De este modo, digamos que la mesa estaba dispuesta, para la concepción de un ser de cualidades
remarcables que se convertiría en su hijo, Yeshua.
Cuando María pasó por lo que la Iglesia refiere como Inmaculada Concepción, ella era testigo de un
proceso de inseminación galáctico y Celestial, por el que el Principio del Padre, o Espíritu como nosotros
llamamos a esto en el culto de Isis, transfirió su esencia a Isis, la Madre que recibe la semilla del Padre-
Madre recibiendo el impulso del Espíritu.
Y esta potente y altamente refinada energía espiritual, se aposentó en el útero de María y dio nacimiento a
Yeshua.
Nueve
María estaba junto a los apóstoles cuando vinieron hacia mi en el pozo. Ella inmediatamente me reconoció
como una compañera Iniciada por el brazalete de la serpiente de oro que llevaba en mi brazo y por el Sello
de Isis que brillaba dentro de mi cuerpo Ka, porque María era bastante clarividente y psíquica.
La primera persona con la que mis ojos se encontraron fueron los de Yeshua, y como ya dije, me sentí
transportada a otros mundos en su inmensa presencia.
La segunda persona que vieron mis ojos fueron los de su madre. En ellos aparecían el reconocimiento y la
comprensión de mi estado como compañera Iniciadadel culto de Isis, y aunque su instrucción no había sido
en la Magia del Sexo, como lo fue el mío, se dio cuenta de que había sido preparada para Yeshua.
Entre ellos dos, me sentí elevada en las alas del amor trascendente. Sentí a mi espíritu volar muy alto.
Irónico entonces que los siguientes ojos que encontré fueron los de los discípulos de Jesús, que me
juzgaron como una puta e incontables generaciones me han considerado de este modo.
Sin embargo, a los ojos de Yeshua y a los de su madre, no era una puta sino un claro vehículo de los
poderes sanadores y sustentadores de la propia Isis.
Llega un momento en la vida de un hombre, sea humano o divino, en que su madre no puede darle la
esencia de lo que necesita.
Su amor continua, pero lo que se requiere es el alimento desde otra mujer. Yo era esa mujer.
María me reconoció a mi y mi papel y mi status Y me entregó a su hijo en aquel momento del pozo.
María y yo pasamos mucho tiempo juntas, tiempo en el que dialogábamos sobre la tarea de Yeshua, sus
necesidades y mi lugar en su vida.
Estaba claro que yo era una servidora de un poder mucho mayor.
Había sido preparada para ello, pero debo deciros que la fuerza de ese reconocimiento aún me
estremece.,Todavía tiemblo al reconocerlo.
En todas aquellas noches y días juntas, María y yo atendíamos a las necesidades de Yeshua y de sus
discípulos y en aquel periodo nos hicimos muy cercanas, la amaba -y la amo todavía- por su belleza física,
la pureza de su corazón y de su espíritu y la amabilidad que dispensaba a todo el mundo.
Desde mi propia comprensión, puedo deciros que María, habiendo servido como vehículo de Isis como una
Encarnada, fue una Maestra muy avanzada, pero ahora tras haber servido en todo ello, su maestría y
perfección, -su perfección espiritual- es asombrosa.
Diez
Ella existe en el seno de los niveles celestiales, su compasión y amor f luyen de modo constante para
todos los humanos. Está disponible para todos, sin tener en cuenta sus creencias. Cuando alguien la
requiere, sabed que ellos son escuchados.
Ahora deseo clarificar mis conocimientos.
Quiero hablar sobre la Magia Sexual del Culto de Isis y las Alquimias de Horus.
Deseo revelar secretos que un Iniciado nunca hubiera revelado aún bajo amenaza de muerte. Pero los
tiempos son ahora diferentes.
Como sabéis, el tiempo está corriendo y he recibido el permiso de la misma Diosa –más aún, he sido
encargada por la misma Diosa- para revelaros algunos de los secretos más celosamente guardados de
todos los tiempos. Os son revelados en la esperanza de que os elevareis vosotros mismos a tiempo.
Once
Las Alquimias de Horus se refieren a un cuerpo de conocimiento y de métodos para la alteración del cuerpo
Ka. En esta visión, cuando Ka se corporeiza o adquiere mayor luz y energía, hay un incremento en el campo
magnético de uno mismo, y lo que el Iniciado desea se manifiesta más rápidamente.
Sin embargo, en la rendición de uno mismo a la propia Alma Celestial, o el Ba, la persecución de deseos
personales, aunque no abandonados, no es el principal foco de la entera existencia. En vez de ello, uno
mira hacia arriba, como si dijéramos, hacia las más altas capacidades de uno mismo, tal como son
percibidas a través de Ba, o del Alma Celestial.
El Alma Celestial, o Ba, existe dentro de un nivel de vibración mucho más alto que el cuerpo físico (el Khat)
o el Ka (el gemelo etérico o espiritual de la forma física). Dentro del cuerpo Ka hay vías que pueden ser
estimuladas y abiertas. La activación de estos pasajes secretos dentro del Ka trae un poder mucho mayor.
Las Alquimias de Horus están diseñadas para reforzarlos, para activar las habilidades y poderes latentes
del Iniciado mediante lo que se llama el Djed, o los siete sellos ascendentes, lo que los yogis y yoginis de la
India llaman los chakras.
Doce
En la Escuela en que fui instruida aprendimos como activar el Poder de la Serpiente, moviéndolo en
trayectorias específicas en la espina dorsal y abriendo circuitos dentro del cerebro. Así se crea lo que se
llama el Uraeus.
El Uraeus es con frecuencia un fuego azul que se extiende desde la espina hacia el cerebro, tanto lateral
como horizontalmente, y ondula con los cambios de energía dentro de estas vías.
La activación del Uraeus incrementa el potencial cerebral para la inteligencia, la creatividad y lo más
importante: – receptividad ya que la tarea del Iniciado es cambiar la calidad de su propio ser de modo que la
armonización a Ba o Alma Celestial sea clara y sin obstrucciones.
Trece
Cuando me reuní con Yeshua en el pozo la primera vez, la mera proximidad de su presencia activó mis
Alquimias internas. Un Poder de la Serpiente se movió por mi espina como si hubiera practicado las
disciplinas que había aprendido.
La primera noche que estuvimos juntos solos, cogidos del brazo, echados uno al lado del otro,
practicamos la Magia Sexual de Isis.
Esta forma específica de magia carga al cuerpo Ka con una tremenda fuerza magnética a través del poder
del orgasmo físico, porque cuando se tiene un orgasmo sexual hay una tremenda liberación de energía
magnética dentro de las células. Según esta energía se extiende da lugar a un potencial magnético listo
para ser utilizado.
Quiero compartir esto con más detalle, pero para hacerlo tengo que explicar más sobre las ideas básicas
del sexo y de la realización espiritual, porque este secreto fue robado por la Iglesia.
Catorce
Cuando yo, una iniciada de Isis, me uní a Yeshua, había vías específicas que tenía que abrir en mí misma.
Sin embargo, me quedé extrañada, al descubrir que muchas de estas vías se abrieron espontáneamente en
su presencia.
Al comienzo de esta historia mencioné como temblaba como una mujer teniendo que luchar con mis propias
pasiones y deseos; porque el camino del Iniciado es usar la energía de la pasión de un modo muy
específico y no ser simplemente arrastrado por ella; porque la Alquimia requiere que la energía sea
contenida de modo que pueda ser transformada.
Yeshua y yo conseguimos muy rápidamente el estado, -lo que es conocido como las Cuatro Serpientes.
Sucede cuando ambos han dominado las Alquimias internas de Horus a un nivel tal que pueden activar las
Serpientes Solar y Lunar en sus espinas dorsales.
De forma clarividente hay un canal central que asciende a través de la espina, y a la izquierda hay un
Circuito Lunar y a la derecha un Circuito Solar, llamados Ida y Pingala por los yogis y yoginis.
En las Alquimias de Horus se produce la activación de estos dos circuitos por campos magnéticos que son
de tipo serpiente.
En el lado izquierdo la Serpiente Lunar es negra como la brea, el color del Vacío, por tanto es la
corporeización del Vacío en sí mismo y encierra el potencial como Creadora de todas las cosas.
La Serpiente Solar es dorada. Un Iniciado hace a estas Dos Serpientes subir hacia arriba. En la medida en
que ascienden atraviesan los chakras y se cruzan una a la otra. En la Alquimia de Horus las Dos Serpientes
se cruzan por completo a través del quinto sello o garganta y en todos los sellos inferiores.
Entonces ellas quedan enfrentadas en el área donde aproximadamente está la glándula pineal, o el centro
de la cabeza. Aparece aquí como un cáliz con la glándula pineal en el extremo inferior del propio cáliz.
Estas Dos Serpientes están vivas, -es decir no son estáticas sino que vibran, relampaguean y se ondulan
con energía- y el retorcimiento de sus cuerpos dentro del Ka activa un incremento del potencial magnético.
Existen prácticas específicas que os compartiré más adelante, pero lo que deseo exponer ahora es la
práctica de las Cuatro Serpientes.
Quince
Cuando Yeshua y yo hicimos el amor, como vosotros decís, hicimos a nuestras Serpientes ascender por
nuestras espinas dorsales hasta nuestro Djed. Lo hicimos simultáneamente y en el momento del orgasmo
mutuo la carga liberada de los primeros sellos en las áreas pélvicas de nuestros cuerpos fue enviada hacia
arriba, hacia el Trono, que es la parte superior de la cabeza, estimulando los centros cerebrales más altos.
Al mismo tiempo, durante el momento del éxtasis sexual, situamos nuestra conciencia completamente
dentro de nuestros cuerpos Ka, pues el Ka es reforzado por el éxtasis. Los estados extáticos nutren y
refuerzan al cuerpo Ka y como ya dije antes, con cada reforzamiento el Ka se hace más magnético,
brindando al Iniciado todo lo que él o ella desea.
La Magia Sexual de Isis tiene que ver con la habilidad innata del ser femenino de utilizar las energías
magnéticas para abrir niveles más profundos de conciencia a través del acto de rendición a las energías
sexuales y caminos que son abiertos.
Cuando una mujer es profundamente amada y apreciada como lo fui yo por Yeshua, algo va a los niveles
más profundos de ella misma y en el momento del orgasmo aparece un estremecimiento incontrolable. Si
se siente segura y permite que la inunde este temblor, este estremecimiento, se abre un tremendo vórtice
magnético, el centro del cual está en su útero.
Dos iniciados comprometidos en la Magía Sexual de Isis pueden reforzarse ellos mismos y expandir
rápidamente sus conciencias a través del poder de este campo magnético.
En las prácticas avanzadas de la Magia Sexual de Isis, el Iniciado masculino puede hacer que sus Dos
Serpientes asciendan a través del cuerpo Ka de la hembra y la hembra hacer que sus Dos Serpientes
asciendan a través del cuerpo Ka masculino. La potencia explosiva de esta práctica es como la energía
liberada por una bomba atómica. Las ondas de marea masivas de magnetismo pueden reforzar al Ka más
allá de la imaginación, o destruirlo, si no se le maneja apropiadamente.
Esta fue la práctica avanzada del Ka que Yeshua llevó a cabo la noche antes del jardín de Getsemaní. A él,
este tremendo incremento de potencial magnético dentro de su Ka le reforzó para sus penalidades y para
la dura tarea que enfrentaba en su iniciación final a través del portal de la muerte; de este modo cuando su
cuerpo físico se disolvió en sus elementos constituyentes se hizo en un relámpago de luz y de calor, lo
que la Iglesia llama la Resurrección. Sin embargo fue sencillamente el efecto de algo que estaba ocurriendo
mucho más profundamente dentro de él. Fue causado por el magnetismo de su cuerpo Ka, porque fue a
través de su Ka reforzado mediante el que viajó a través de su inframundo, a través de la muerte misma.
Cuando Yeshua y yo llevamos a cabo las Prácticas Sexuales de Isis, conocíamos que éste era el propósito.
Para él, cada unión conmigo, era una forma de reforzar su Ka. Es por lo qué yo dije al principio que él vino
a mi pozo, porque el pozo que la mujer Iniciada ofrece al hombre es un pozo infinito de potencial
magnético. Pero sólo se abre cuando la mujer se siente segura y amada. Sólo entonces la práctica
funciona. Porque las prácticas sin el alimento del amor se convierten sólo en técnicas y no darán el
resultado requerido o deseado.
En cuanto a mí, yo era a la vez mujer e Iniciada, había sido adiestrada durante años y sabía que hacer con
los caminos, pero quedé sorprendida al encontrarme a mi misma barrida sobrepasada como mujer.
Me encontraba esperando en profunda anticipación una mirada o una caricia de Yeshua, y nuestros
momentos juntos en solitario, fueron los más preciosos momentos que he experimentado nunca. Algo en
relación con su contacto o sus ojos –el sentir de él- hacía que se abriera algo dentro de mi y a veces me
hallaba casi riéndome de mi misma.
Yo, que había sido instruida en las prácticas más secretas de la Magia Sexual de Isis y había sido
considerada como muy avanzada por mis Sacerdotisas, -esta Iniciada- se encontró a si misma como una
mera principiante en la presencia de la mujer.
Porque ahora os digo que dentro del corazón y de la mente y de la sabiduría corporal de lo f emenino se
encuentran algunos de los mayores secretos y mayores poderes –y esperan a ser revelados.
¡Y todo ello está dispuesto a abrirse por la caricia de otro!
Y así, cuando hablo de Yeshua estoy colmada por mi amor y los sentimientos que yo mantengo para él a
través de todo el tiempo.
Dieciséis
La Magía del Sexo de Isis está basado en la comprensión de que el principio femenino contiene dentro de
su naturaleza, específicamente de su naturaleza sexual, una llave alquímica. Esta llave alquímica se revela
en el acto de lo que llamáis amor, -amor sexual. Cuando éste se activa de un modo suficientemente fuerte,
las Alquimias de Horus se presentan espontáneamente por sí mismas.
En mi instrucción se asumía que había dos caminos, alquímicamente hablando, hacia el mismo objetivo.
Las Alquimias de Horus eran el fundamento de ambas alquimias, o prácticas, ya que se utilizaban los
mismos caminos básicos. Para aquellos que no deseaban desarrollarlo en pareja, las Alquimias de Horus
proporcionaban un método para activar y reforzar el cuerpo Ka hasta los niveles de la Alta Iniciación.
Para aquellos en pareja, la Magia Sexual de Isis proporcionaría las alas con las que ascenderían al Djed y
entrar en el trono de la más Alta Conciencia.
Desde mi punto de vista avanzado considero una gran tragedia que los secretos y la sacralidad de
nuestras naturalezas sexuales se hayan considerado diabólicas por la Iglesia, por los Padres de la Iglesia.
Y desde hace casi dos mil años la más dinámica y una de las más rápidas vías a la realización en Dios se
ha considerado errónea. Y encuentro además irónico que la Iglesia la haya convertido en pecado y por
tanto haya aterrorizado a aquellos que podrían haber ascendido sobre ella.
Diecisiete
Aunque los milagros de Yeshua son considerados extraordinarios por muchos, desde el punto de vista del
Iniciado son sencillamente las expresiones, -las expresiones naturales-, del potencial de la conciencia. Son
un signo. Existen razones para los milagros y quiero hablar de esto desde el punto de vista del saber
Iniciático que Yeshua y yo poseímos.
Cuando yo conocí a Jesús, el ya demostraba los signos. Su nivel de creación era muy alto.
Mi cometido era ayudarle a reforzar su cuerpo Ka para su Iniciación final a través del portal de la muerte
hacia el Alto Dios Horus. Ello fue llevado a cabo, como os he dicho, mediante la Magia Sexual de Isis y las
Alquimias de Horus.
De todos los milagros que hizo Jesús y yo fui testigo, el que es más querido para mi es el de los panes y
los peces.
Fue un día caluroso y muy largo. Los discípulos, María y yo misma seguíamos al Maestro como de
costumbre. Se formó una multitud muy grande que escuchaba atentamente cada palabra de la boca de
Jesús. Todos estábamos cautivados por su visión y su forma de expresarla. Fue como si, durante algunas
horas, fuéramos llevados al mismo cielo y sentíamos que el cuerpo Ka de Yeshua se había expandido
hasta incluir a cada uno –otro signo.
Cuando finalizó su discurso era ya al final de la tarde y lleno de compasión por ellos, dándose cuenta de
que su camino de regreso a casa les llevaría varios días a muchos de ellos, pidió comida para ser reunida y
compartida.
Entonces los discípulos, María y yo, y unos pocos mas que se unieron a nosotros desde la multitud
comenzamos a reunir comida.
Pero cuando estuvo toda reunida, sólo había unos pocos peces y unos pocos panes pequeños.
Difícilmente suficiente.
Fue entonces cuando contemplé un suceso verdaderamente extraordinario. Yeshua se retiró internamente
y cerró sus ojos. Pude sentir la intención de su oración aunque no pude oír las palabras. Recorriendo la
extensión completa de su Djed desde la base de su espina dorsal hasta el extremo de su cabeza, vi de
forma clarividente un relámpago de luz hacia arriba a través de su coronilla, hacia su Ba, su Alma Celestial.
Entonces descendió una energía, como si fuera en respuesta a su petición; y él puso sus manos sobre los
dos pequeños cestos y comenzó a repartir los panes y los peces, partiéndolos en trozos y dándoselos él
mismo a cada persona.
Fue realmente extraordinario, más de mil personas recibieron alimento y los panes y los peces no llegaron
a acabarse. Después que la multitud fue alimentada, Yeshua repartió trozos a sus discípulos, a María y a
mi, y el pan tenía el gusto más dulce y el pescado el aroma más extraordinario que yo nunca he vuelto a
probar.
Tales milagros son naturales para un Maestro del calibre de Yeshua, y desde el punto de vista Iniciático,
son el potencial de cualquier persona si se practica lo que se requiere.
Dieciocho
Jesús a menudo usaba la f rase “Yo y el Padre somos uno”. Esto ha conducido a una profunda mala
interpretación. Desde el punto de vista Iniciático es solamente otra palabra para el Espíritu. Y en aquellas
palabras Yeshua indicaba que se había fundido con su Espíritu y que era por lo que acontecían los
milagros.
Y así, él iría y vendría entre dos ideas que los evangelios cuentan en su propia forma limitada.
Por una parte, Yeshua decía a veces “Yo y el Padre somos uno”. Otras veces decía “Sin mi Padre no puedo
nada”. Esta es la oscilación que sucede con el proceso Iniciático en el que el Iniciado oscila entre la fuerza
y la convicción de su conexión con la Fuente del Espíritu y a continuación a otro estado mental en el que
piensan que no son nada y no pueden nada sin el Espíritu.
De este modo un estado mental tiene un sentimiento de omnipotencia. Y el otro estado tiene el de
impotencia. Y el Iniciado debe pasar entre ellos dos. Que Yeshua utilizara esas f rases algunas veces me
indicaba, como compañera Iniciada, que él se encontraba en medio de esta paradoja.
Y él vivió con esta paradoja en conciencia hasta el jardín de Getsemaní. Porque fue antes de su estancia en
el Jardín, como contaron sus Discípulos, cuando él vino a mi y practicamos las Cuatro Serpientes por última
vez.Hubo intensidad en nuestro rato juntos porque ambos sabíamos que el tiempo estaba a punto de
finalizar.
Con la fuerza explosiva liberada con la práctica, el cuerpo Ka de Yeshua resplandecía con el poder y la
convicción que él llevó consigo hasta las horas finales de su vida, fortificándole para su travesía a través
de la muerte. Pero los momentos anteriores fueron a menudo empleados, -busco las palabras correctas en
una especie de autocuestionamiento.
Aquellos quienes siguieron a Yeshua, que se llaman ellos mismos cristianos, les gusta pensar que él
estaba muy seguro y siempre claro en relación a su propósito y misión y que nunca dudaba. Pero quien
pasó las noches con él os dice otra cosa.
Sólo porque un ser haya alcanzado el nivel de maestría no significa que sea capaz de pasar a través de la
incertidumbre –intocado.
Yeshua sintió la presión de su Alma Celestial, pero es algo extraño siendo un Iniciado. Porque uno es
humano con todo lo que (esto implica) ello lleva –y uno está (ampliamente) conectado (ampliamente)
crecientemente y como parte de, su propia Alma Celestial.
Es Ba, el Alma Celestial, que es la voz de Dios hablando. El alto Iniciado actúa como un reflejo de la boca
de Dios, pero sólo porque el Alma Celestial esté clara no significa que el humano también lo esté.
Yeshua vió en otros el potencial para la realización en Dios y habló de esto algunas veces. Una de ellas es
mencionada en los Evangelios cuando dijo “vosotros haréis mayores cosas que yo”. Porque él sabía que
los milagros son una expresión natural de la conciencia, y que en la medida en que la conciencia de la
humanidad se expandiera los milagros serían corrientes.
Y así, era al mismo tiempo él muy consciente de las limitaciones de los que iban con él –o de su adicción al
odio, ignorancia e intolerancia- y esto le apenaba profundamente. Pasamos muchas noches hablando
sobre esto. Y hasta unos pocos días antes de Getsemaní, no estaba seguro de si podría alcanzar lo que
se requería para pasar a través de la Iniciación final.
No conozco la razón para el cambio en él pero unos pocos días antes del Jardín y de nuestro acto
Iniciático final juntos mediante las Cuatro Serpientes vino sobre él un profundo sentimiento de paz y
estuvo seguro de una forma que nunca le había visto.
Diecinueve
Permanezco en el tiempo casi dos mil años después de la crucifixión de Yeshua y todavía tiemblo al pensar
en ello. Era muy extraño para mi ser a la vez la Iniciada y la Mujer.
Como la Iniciada, permanecí en alerta por Yeshua durante la crucifixión manteniendo mi Ka en oración
ferviente –que es otra forma de decir que me mantuve constante en mi intención de estar allí por él
mientras iba hacia la muerte. Era por mi parte una acción Iniciática que requería desapego.
Como una Iniciada experta era una tarea fácil, pero como la Mujer enamorada de Yeshua, el Hombre,
estaba destrozada. Y así permanecí en el Gólgota, oscilando entre mi esfuerzo como una Iniciada, y mi
pesar como la Mujer enamorada cuyo amado estaba sufriendo.
En aquel momento no me preocupaba la Iniciación. No me preocupaba que Yeshua estuviera dejando un
camino de luz a través de los niveles de la muerte para todos aquellos que le seguían.
Ni siquiera clamé a Isis.
¡“Como desafiarte”, dije!
En el mayor momento de mi tormento, María se acercó y tomó mi mano. Sólo estaba en mi dolor y no había
reparado en ella. Nuestros ojos se encontraron, llenos de lágrimas, y sollozamos una en los brazos de la
otra. Ella por su hijo y yo por mi amado.
Los Evangelios cuentan que hubo un terremoto inmediatamente después del fallecimiento de Yeshua y os
digo que es verdad. Fue como si toda la naturaleza entrase en la tribulación, y la tierra tembló con angustia
y rabia, de que tal Maestro, que tal ser, pudiera sufrir a manos de sus compañeros los hombres.
Pero tal es la paradoja de la vida en la tierra.
Una gran tormenta se abatió también sobre la ciudad, -vientos como nunca se habían sentido. El cielo se
cubrió con nubes negras y relámpagos –el sonido del trueno hacía temblar todo. Este escenario terrorífico
parecía que fuera a durar para siempre pero sospecho que fue solo una hora más o menos.
En el sepulcro María y yo lavamos su cuerpo de acuerdo con la tradición y el ritual judío, le amortajamos y
nos fuimos del sepulcro. Lo hicimos en silencio. El único sonido era el sonido de nuestras lágrimas
contenidas.
Me parecía raro que hubiera podido arrancar a Lázaro de la muerte pero que no hubiera podido ayudarse él
mismo.
No comprendía lo que él estaba haciendo.
Pero después de su resurrección, y viéndole en su Ka, radiante y hermoso como nunca, lo entendí.
Desde el punto de vista Iniciático, hacerse el Alto Dios Horus significa que uno ha activado los más altos
potenciales de conciencia dentro de la forma humana. Pero tradicionalmente esto se hacía solo para uno
mismo. Sin embargo Yeshua lo había hecho en representación de toda la Humanidad.
¡Pero os digo que ello no tiene nada que ver con la religión!
Tiene que ver con física y alquimia.
La sencilla enseñanza de Yeshua era que todos somos Dioses –que todos tenemos dentro de nosotros el
poder para amar y para sanar- y él lo demostró lo mejor que pudo.
En los primeros días de la Iglesia –entendiendo la comunidad de aquellos quienes se agruparon alrededor
de las enseñanzas de Yeshua- surgió el más hermoso ritual.
Aquellos quienes deseaban continuar estando en su energía o presencia compartirían pan y vino. A veces
los hombres compartirían el ritual y a veces las mujeres. El simple hecho de compartir unos con otros
mantenía la intención de Yeshua, y luego, según fueron pasando los años la sencillez de este logro se
perdió y solo aquellos ordenados por la Iglesia podrían dar la Comunión, algo que a Yeshua le hubiera
resultado muy desagradable (os puedo decir esto habiéndole conocido tanto como le conocía).
La verdad y el poder de la enseñanza de Yeshua han sido pervertidos por la Iglesia.
Y los secretos de la elevación de conciencia a través del Sexo Sagrado, tal como fue practicado por
Yeshua y yo, han sido robados por la Iglesia.
Me doy cuenta al compartir mi historia que solo unos pocos la entenderán –pero es suficiente.
Veinte
Quiero ahora revelar algunos de los secretos de la Magia Sexual de Isis.
Como dije anteriormente, es posible ascender las alturas de la conciencia solo, sin pareja, y en esto las
Alquimias de Horus fueron diseñadas para asistir al Iniciado.
Sin embargo, para aquellos en pareja –Relación Sagrada- se reveló la Magia Sexual de Isis. Hay algunos
aspectos de ella que quiero comentar.
El primero de ellos es conocer que en el momento del orgasmo, se generan campos magnéticos. En verdad
estos campos se crean mediante lo que llamaríais excitación preliminar –la estimulación de los sentidos
mediante el tacto. Esta estimulación sensorial inicia el proceso de construcción de los campos magnéticos
y es crucial para la práctica alquímica de la Magia Sexual.
Hay algunos métodos disponibles para Iniciados y comentaré algunos de ellos –pero es esencial a la
práctica comprender la naturaleza de la interacción de los dos elementos alquímicos dentro del hombre y
de la mujer.
A un nivel mundano el semen del hombre lleva la información de su linaje genético, que es transferido al
niño. Cuando el esperma dentro de su semen se une con el huevo de la mujer, se crea la vida y la vida es
una compleja interconexión de campos magnéticos. El niño en crecimiento dentro del útero desarrolla
órganos y sistemas, pero en el nivel magnético puede verse como se interconexionan campos magnéticos
y vibracionales complejos. Y de este modo en el nivel mundano, el acto del sexo crea nuevas estructuras
magnéticas.
Los Iniciados adiestrados en la alquimia usan la energía sexual para también crear campos magnéticos
complejos –pero estos campos no se convierten en un nuevo ser, ellos se incorporan en los cuerpos Ka
de los dos Iniciados reforzándolos y elevándolos. Este es el primer punto esencial a comprender. Todo lo
demás gira alrededor de esto.
La tarea del Iniciado dentro de este sistema en el que Yeshua y yo fuimos adiestrados es reforzar el
cuerpo Ka más allá de los confines de la f orma física, o Khat
El siguiente nivel a conocer tiene que ver con la sintonía emocional de la Iniciada femenina –para la Iniciada
femenina la receptividad es dependiente de su estado emocional. Forma parte de su naturaleza y no puede
ser dejado de lado si se quiere que estas técnicas funcionen.
Esencial para la Iniciada femenina es el sentimiento auténtico de seguridad y de amor o al menos, de
apreciación. Cuando está presente algo se pone en marcha dentro de su ser y permite que la alquimia
tenga lugar.
La alquimia se crea por la unión del Ka del Iniciado masculino y del Ka de la iniciada femenina. Cuando hacen
el amor, los cuerpos Ka se interconectan y ello da lugar a que el ser femenino abra su “suelo magnético”.
Este es un término extraño. Proviene del lenguaje usado en los Templos de Isis.
El suelo es el fundamento sobre el que uno se mantiene. Cuando ponemos algo a seguro, lo colocamos
sobre el suelo. Por tanto, suelo se usaba como una jerga dentro de los Templos, en referencia a la
componente totalmente básica que se requiere. Así, cuando digo “El suelo magnético de la mujer” me
refiero a que es la componente fundamental para lo que tiene que suceder.
En la medida en que los dos Iniciados continúan haciendo el amor y se incrementa la pasión de su
interconexión, se liberan en el cuerpo y en el cerebro poderosas sustancias químicas. Ello transporta a los
Iniciados a otro espacio distinto al de su normales formas de ser. Esto abre a continuación los campos
magnéticos y genera un incremento en magnetismo.
Existen dos opciones para el Iniciado masculino en el momento del orgasmo. Puede eyacular o mantener
sus semillas. Si eyacula y se han cumplido las condiciones previas hay una reacción instantánea que
sucede en el útero de la mujer. Cuando la esencia energética de su esperma golpea las paredes de su
santuario interior hay una explosión de energía magnética –mundos girando dentro de mundos. Y en la
extensión en que el Iniciado masculino ha alcanzado un alto estado, tanto como la mujer, el magnetismo
liberado del contacto entre tales f luidos sexuales puede ser enorme. Así, es importante comprender que
esto crea un complejo magnetismo que tanto el hombre como la mujer pueden asumir en sus cuerpos.
Ocurre un segundo fenómeno en el que la Iniciada femenina puede comenzar a temblar incontroladamente.
Cuando tiembla, el centro de ello es normalmente el mismo útero, que pone en marcha una cascada, un
efecto de mecido en la pelvis. Esto crea también campos magnéticos muy complejos, de nuevo, que los
Iniciados masculino y femenino pueden llevar hacia sus cuerpos Ka. Este es el fundamento o conocimiento
básico.
Como Iniciados también es posible hacer que los Poderes de la Serpiente asciendan dentro de la espina
dorsal durante el acto sexual y en cualquier parte donde las dos Serpientes se encuentren tenderán a
magnetizar ese chakra y sus correspondientes habilidades o poderes.
No me está permitido decir más de esto ya que el logro de esta práctica puede conducir a un incremento
significativo en los propios poderes. Dejo a los que lo leen ver entre líneas. Si estáis disponibles para esta
práctica sabréis como se hace.
Veintiuno
En el aprendizaje de la Magia Sexual de Isis y de las Alquimias de Horus, los Iniciados se adiestraban en los
ejercicios básicos de las Dos Serpientes.
En esta práctica, el iniciado solo genera energía a través del poder de RA, o el fuego interior, para crear
una elevación en la conciencia –para crear campos magnéticos complejos dentro de su propio cuerpo –y
entonces los lleva hacia su Ka.
Deseo compartir este método. Es la práctica central para todos aquellos que desean hacer solos este
trabajo, y para aquellos que desean hacerlo en pareja.
La práctica fundamental requiere que el Iniciado se siente derecho, respirando de un modo tranquilo y
rítmico.
Entonces el Iniciado toma conciencia de la base de la espina dorsal y sobre sus respiraciones imagina la
Serpiente Negra ascendiendo desde la izquierda y la Serpiente Dorada ascendiendo desde la derecha,
arriba por la espina.
Cuando las Dos Serpientes entran en cada chakra, se cruzan, siguiendo su camino hacia la coronilla. Pero
en esta práctica, las Dos Serpientes son llevadas hasta el centro de la cabeza, a la vecindad de la glándula
pineal.
Entonces el Iniciado, usando el poder de la respiración envía la energía de la inhalación hacia las Serpientes
y después, cuando exhala, envía la energía de la respiración más profundamente hacia los cuerpos
serpentinos, llevándolas, digamos, a hacerlas “vivas”.
Eventualmente ellas se retorcerán, o moverán, desde el poder de la respiración y la intención del Iniciado.
En este punto se imagina un Cáliz dentro de la cabeza con las dos serpientes enfrente una de otra por el
borde, quedando la glándula pineal en el fondo del Cáliz.
La fase siguiente lleva hacia arriba la energía de RA. El iniciado imagina una pelota viva de fuego, como el
sol, en el plexo solar, y con cada exhalación el Iniciado repite en silencio o entona el sonido RA. Esto da
lugar a que se active la luz, el fuego interno de RA y espontáneamente comienza a subir.
Cuando esta luz y calor se mueven hacia arriba pasan a través del centro del Cáliz entre las Dos
Serpientes, hasta la coronilla de la cabeza. A partir de aquí se produce el fenómeno más extraordinario.
Desde el lado izquierdo de la coronilla desciende una energía que es como líquida en su naturaleza. Este
líquido se llama las Gotas Serpentinas Rojas. Desde el lado derecho de la coronilla otro liquido de tipo
energía se mueve hacia el Cáliz, se llama las Gotas Serpentinas Blancas. Es el calor y la luz del RA interno
lo que da lugar a que la coronilla secrete estas sustancias.
Las Gotas Serpentinas Rojas están en relación con la madre biológica del Iniciado. Las Gotas Serpentinas
Blancas están relacionadas con el padre del Iniciado. Cuando ambas se mezclan pueden ocurrir algunas
cosas. Puede ser la sensación de un sabor dulce en la parte de atrás de la garganta –lo que los yoghis y
yoginis llaman Amrita- pero que nosotros en el culto de Isis llamamos Aguas del Manantial, porque parecen
venir del manantial dentro de la cabeza.
A veces esto es la primera presentación; y si el Iniciado se focaliza en la sensación de las Aguas del
Manantial, aparece un tipo de éxtasis. A veces el Iniciado siente luz en su cabeza. De nuevo, si focalizan en
esta luz aparece una especie de éxtasis.
A veces, cuando las Gotas Serpentinas Blanca y Roja se mezclan, hay un surgimiento espontáneo de
éxtasis. Este éxtasis, no importa lo que sea que lo cause, es crucial en esta alquimia. Porque el éxtasis es
nutrición y alimento para el cuerpo Ka.
Hay una tendencia para que este éxtasis permanezca en los centros más altos ya que es allí donde en esta
práctica han nacido. Pero en esta práctica, a partir de la primera aparición del éxtasis, el Iniciado debe llevar
su conciencia al cuerpo Ka entero. Esto da lugar a que el éxtasis se expanda a través de todo el cuerpo
físico, Khat, y es entonces absorbido por Ka, reforzándolo y revitalizándolo.
Ésta es la práctica fundamental, básica.
Para aquellos que practican la Magia Sexual de Isis en pareja, los estados extáticos aparecen naturalmente.
Para aquellos en la práctica solitaria, el éxtasis debe ser auto-generado.
Ambas prácticas, sin embargo, requieren que el Iniciado tome conciencia del Ka durante los momentos de
éxtasis, de modo que el cuerpo Ka pueda participar de los ricos campos magnéticos creados por tal dicha.
Veintidós
En un sentido muy real, el iniciado masculino enfrenta los mayores retos en la práctica de la Magia Sexual
de Isis porque requiere que él parezca ir en contra de su propia naturaleza. Por naturaleza, el hombre es
eléctrico desde un punto de vista alquímico, mientras que la mujer es magnética.
La naturaleza de la electricidad es moverse y actuar mientras que la naturaleza del magnetismo es
anidarse-envolverse.
En la práctica el foco pasa a ser el reforzamiento del cuerpo Ka mediante la incorporación de los campos
magnéticos liberados por el acto sexual. Inmediatamente después del orgasmo los campos magnéticos
generados por la Iniciada femenina continúan moviéndose en espiral y circulando. Es el momento de
descansar y permanecer con el magnetismo, pero los hombres, por naturaleza, tienden o bien a levantarse
y hacer algo o dormirse.
Por tanto, el Iniciado masculino tiene que adiestrarse a sí mismo en anidarse, a permanecer en el
magnetismo que ha sido creado para ir en espiral hacia su Ka y hacia su cuerpo.
Esto es diferente de lo que ocurre normalmente, para el hombre, el orgasmo queda confinado al área
pélvica y en algunos casos se extiende. Pero en la Iniciada femenina, especialmente en aquella que ha
podido permanecer relajada en la experiencia, el orgasmo se extiende por todo el cuerpo y puede continuar
en varios niveles de intensidad durante algunas horas.
Algunos Iniciados masculinos podrían preocuparse porque al cambiar ellos mismos, anidándose, se harían
menos masculinos pero puedo aseguraros que nada podría estar más lejos de la verdad.
Porque la verdad es, que cuando el Iniciado Masculino se anida en el magnetismo, su cuerpo Ka se hace
más fuerte y su energía sexual más potente. Una de las tareas para el Iniciado masculino es hacerse más
sensible a nuevos niveles de sentimiento, de modo que pueda incorporar a su Ka y a su cuerpo los campos
magnéticos liberados mediante el sexo.
Para clarificar el término anidarse, no significa que el miembro masculino permanezca necesariamente
dentro de la mujer. Significa que el hombre permanece junto a la mujer, tocando, acariciando,
permaneciendo con las sensaciones físicas y sentimientos tras el orgasmo. A través del portal del
anidamiento es como el Iniciado masculino puede entrar a los misterios femeninos de la creación.
Otro aspecto del que el Iniciado masculino tiene que hacerse consciente es lo que se llama la Adoración del
Amado.
Cuando la Alquimia de la Magia Sexual se hace más fuerte, ocurren ciertos signos. Uno de ellos es que el
Amado es adorado o abrazado.
Sucede tanto para el Iniciado masculino como femenino. Cuando se produce la Adoración del Amado por
ambas partes, la Alquimia de la Magia Sexual se intensifica en gran medida porque las armonías y
magnetismos creadas por una emoción tal son muy beneficiosas para la magia.
Veintitrés
Querría hablar ahora del término magia.
El sentido en que se usa el término magia se refiere a la transformación del individuo humano en un Dios.
Esto es por supuesto magia. Está simbolizado por el Dios Horus, parte hombre, parte halcón, y que a
través de las prácticas de la alquimia es llevado al estado del Alto Dios Horus, lo que significa que se ha
alcanzado el estado más elevado de conciencia.
Por tanto, la Magia Sexual de Isis es precisamente un método para la elevación de la conciencia, que es en
sí mismo, mágico –y esto se lleva a cabo mediante la energía y el éxtasis creados a través del sexo.
El otro sentido en que se usa el término magia es porque hay métodos, una vez que el cuerpo Ka es
potenciado, que uno puede usar para inf luir en una realidad en formas muy directas en métodos que
parecen mágicos. Tomad, por ejemplo, la práctica central básica de la Alquimia de Horus –el ascenso de las
Serpiente Dorada y Negra a través de la espina dorsal, la creación del Cáliz, la activación del fuego interno
de RA y el encuentro de las Gotas Serpentinas Blanca y Roja- todas son actos de magia, actos de
propósito y voluntad espirituales y personales. Esto es por lo que lo denominamos como magia.
Volviendo a la paradoja que afronta el Iniciado masculino, vemos que su naturaleza trabaja contra él en
estas prácticas en una cierta extensión, especialmente la Magia Sexual. Porque una vez que el Ka de un
iniciado masculino se carga, él por naturaleza, quiere actuar, hacer algo. Pero si el puede disciplinarse,
adiestrarse para continuar reposando con su Amada, puede anidarse a sí mismo en el rico magnetismo
creado a través de su amor, su sexo, y ref orzar el Ka a un mayor nivel.
Veinticuatro
Hay otro proceso que el Iniciado masculino encara en este proceso y tiene que ver con los que en los
templos se entiende como Obstáculos para Volar, pero que en vuestro lenguaje se entiende mejor como
dificultades psicológicas. El término Obstáculos para Volar se refiere a dificultades para desarrollar la
naturaleza de Horus, específicamente al aspecto que puede volar hacia arriba a los estados elevados de
conciencia.
Existen actitudes, creencias y hábitos emocionales que son contraproducentes para el vuelo o elevación
de la conciencia, que es a lo que nos referimos cuando hablamos de Obstáculos para el Vuelo. Es aquí
cuando se presenta para el Iniciado masculino uno de los pasajes más intrincados que requiere una gran
destreza.
Como niño, el hombre fue llevado por su madre en su útero y protegido y alimentado por su madre durante
la infancia, hasta el momento en que el tuvo autonomía y pudo actuar por sí mismo. En este punto el niño
abandona, como si dijéramos, a su madre para encarar el mundo.
Es en esta encrucijada de su desarrollo cuando él puede sentirse limitado o confinado por su madre y
puede darse una batalla de voluntades. Como un hombre, como un Iniciado masculino, puede aun llevar
dentro de él estos hábitos emocionales. Si este es el caso encontrará difícil relajarse en el anidamiento de
los campos magnéticos, ya que a nivel psicológico, se experimenta como una rendición a lo femenino.
Si el Iniciado masculino tiene problemas de infancia con su madre, puede arrastrarlos consciente o
inconscientemente con su pareja.
Veinticinco
Es importante para ambos Iniciados cuando emprenden la Magia Sexual de Isis darse cuenta que se están
embarcando en un largo viaje y que el proceso es esencialmente de tipo alquímico. El propósito de la
alquimia es transformar una sustancia en otra. Esto se lleva a cabo quemando la basura, o la negatividad
de una sustancia, de modo que la sustancia pura permanece o se crea.
En el proceso de la Magia Sexual de Isis las sustancias transformadas son literalmente los f luidos
sexuales, hormonas, neurotransmisores y otras sustancias no descubiertas todavía por vuestra ciencia.
Pero también se lleva a cabo una transformación de la propia psicología.
Por naturaleza, la Magia Sexual de Isis aumenta el proceso alquímico. El calor, como si dijéramos, se
levanta, la basura se clarifica, lo que necesita ser purificado se muestra penosamente delante.
Si no se comprende que ésto es uno de los subproductos de la alquimia, uno podría perturbarse por la
aparición de material psicológico dificultoso. Pero realmente este es uno de los resultados, porque la
presión interna creada mediante la intensa alquimia generada a través de la Magia Sexual de Isis, da lugar a
que el cuerpo Ka expulse o presione fuera de sí mismo todas las impurezas y se clarifique a sí mismo de
todos los Obstáculos al Vuelo.
En aquellos que practican solos, sin una pareja, la Alquimia de Horus también crea presión interna,
expulsando impurezas, pero la tarea es más difícil ya que la energía requerida proviene de los propios
esfuerzos personales y no existe el beneficio del reflejo del otro. Sin embargo, puede hacerse.
Veintiséis
Este es el conocimiento básico que se requiere para la práctica de la Magia Sexual de Isis. En las
páginas anteriores os he revelado el secreto de los tiempos, uno de los secretos mas
profundamente guardados de los Templos de Isis.
El conocimiento de estas prácticas estaba reservado para los estudiantes más avanzados.
Si uno practica el camino solitario mediante las Alquimias de Horus o el camino de la Relación Sagrada
mediante la Magia Sexual de Isis, se va andando en el camino a la Divinidad.
La clave central en este viaje es el reforzamiento del Ka mediante los estados extáticos de conciencia. Si
es autogenerado o creado a través del éxtasis no es inheremente importante; el Ka es alimentado y
potenciado por los estados extáticos sin tener en cuenta su fuente.
Por el contrario, la vergüenza es un veneno para el cuerpo Ka, un elemento tóxico que decrece su vitalidad
y potencia.
Yo, una iniciada de Isis, encuentro trágico que la Iglesia haya avergonzado a mujeres y hombres en cuanto
a sus naturalezas sexuales y cerrado la puerta a uno de los caminos mas directos a la realización en Dios.
Independientemente de que sigáis este camino, mi consejo es que os liberéis a vosotros mismos de toda
vergüenza.
Investigad las catacumbas de vuestra propia mente y corazón, buscad los sitios oscuros en vosotros
mismos donde habita la vergüenza y quitadla.
Encontrad cada oportunidad para crear éxtasis, porque ello os refuerza y potencia el Ka.
Que los obstáculos a vuestro vuelo sean pocos y que las bendiciones a lo largo de vuestro camino sean
muchas.
Veintisiete
Deseo dirigir mi atención ahora a algunos puntos críticos en relación con la práctica de la Alquimia y la a
Magia Sexual de Isis.
Para el Iniciado masculino es esencial comprender que son los campos magnéticos creados al principio
tocando y acariciando a la Iniciada femenina, su amada, lo que arranca la cascada de campos magnéticos,
que desarrollan una intensidad hasta el punto del orgasmo.
Es importante que el Iniciado masculino se adiestre el mismo en anidarse en los campos magnéticos.
Es extremadamente importante para ambos Iniciados poner su atención sobre el cuerpo Ka durante los
estados extáticos de conciencia que se generan haciendo el amor, porque esto refuerza y potencia al
cuerpo Ka y es esencial para este tipo de alquimia tal como la practicamos Yeshua y yo.
En el momento del orgasmo físico hay una tendencia para la fuente magnética a moverse bien hacia arriba
a través del extremo de la cabeza o hacia abajo a través de los pies –pero en ambos casos, este campo
magnético sale del cuerpo y se disipa. Es importante durante el momento del orgasmo contener el campo o
fuente magnética. Idealmente, el Iniciado debería poner su consciencia en el Trono superior o centros
cerebrales superiores. Esto daría lugar a ascender la fuente del orgasmo hacia la cabeza, enviando su
energía hacia el mismo cerebro y hacia el cuerpo Ka.
Veintiocho
Hay veces en que el Iniciado masculino puede desear retener su semilla. En la Magia Sexual de Isis los
Iniciados masculinos fueron adiestrados en una técnica específica llamada Detener el Nilo Inferior.
Desde el Conocimiento Iniciático del antiguo Egipto, existió el Nilo tanto externa como internamente,
siendo el Nilo externo el río físico y el Nilo interno el Djed y su f lujo a través de los siete sellos o chakras.
En el momento del orgasmo físico, cuando un hombre eyacula, los poderes creativos que han descendido
desde el Nilo superior al Nilo Inferior se liberan.
Este semen transporta gran potencial para la creación de campos magnéticos en forma de nueva vida o de
una reacción alquímica en el útero de la Iniciada femenina, como expusimos antes.
Sin embargo, a veces, un Iniciado masculino puede desear mantener su semen, principalmente porque,
dependiendo de su vitalidad, la eyaculación puede realmente decrecer su energía, y fue para estas
ocasiones para lo que se desarrolló la técnica de Detener el Nilo inferior.
El hombre pone un dedo sobre la próstata, justo enfrente, de modo que en el momento de la eyaculación,
el semen va hacia atrás en vez de hacia delante y los campos magnéticos de su esencia sexual recirculan a
través de su cuerpo y de su Ka. Pero aún en estos momentos hay campos magnéticos generados por su
Ka que interaccionan con los de la Iniciada femenina y ambos pueden anidarse dentro de estas
interacciones.
Veintinueve
Y ahora quiero referirme a una forma relativamente rara de pareja pero que ocurre a veces dentro de los
Iniciados de Isis.
Vosotros lo llamaríais parejas del mismo sexo.
Mientras que el desarrollo de los campos magnéticos y el anidamiento en estos campos y el arranque de
los estados extáticos pueden crearse a través de una pareja del mismo sexo, no tiene lugar la interacción
del semen y el útero y por tanto no está presente este aspecto de la alquimia.
Sin embargo todos los otros aspectos de la Alquimia y de la Magia Sexual son relevantes.
Treinta
Finalmente, quiero dirigir mi atención al término Iniciado porque he usado este término de f orma extensiva
en todo este material.
El término Iniciado se refiere a quien ha decidido vivir creciendo en conciencia. Aquel que ha decidido dejar
atrás la vida mundana y entrar en la aventura de la conciencia.
Generalmente hablando, el cruce del umbral de la vida mundana a la sagrada viene marcada por un ritual de
Iniciación. En las antiguas prácticas un candidato sería Iniciado por un Sacerdote o Sacerdotisa, y este
Sacerdote o Sacerdotisa tendría el poder de conferir a aquel individuo el poder relativo al linaje al que ellos
pertenecen.
En ciertos tipos de transiciones se requiere o necesita un Iniciador externo. Sin embargo para las f ases
iniciales es posible para una persona Iniciarse a ellos mismos, porque la verdadera esencia de la Iniciación
significa marcar un umbral, el cruce de la vida mundana hacia la vida sagrada.
Para aquellos que se sienten llamados a practicar las Alquimias de Horus y quienes desean marcar su
compromiso a vivir la vida sagrada, ofrezco este sencillo ritual. Doy esta instrucción por la escasez de
personas cualificadas para conducir Iniciaciones hacia los antiguos linajes de Egipto.
Para este ritual se necesitaría una vela y dos vasos o copas.
Una copa se llena con agua y la otra está vacía. Si lo deseáis podéis añadir f lores e incienso, haciendo el
ritual tan estéticamente placentero como deseéis, pero fundamentalmente la Auto-Iniciación es un acto de
intención y de voluntad espiritual y personal.
El ritual es sencillamente el reflejo externo de algo que está ocurriendo profundamente dentro de uno
mismo. Y por supuesto, esta elección interna puede ser hecha sin la necesidad de un ritual externo en
absoluto, porque el ritual sin elección interna no tiene valor.
Para este ritual debéis encender la vela y decir estas palabras…
“Espíritu de toda vida, se aquí mi testigo. Por el bien de mi elevación y la elevación de toda la vida,
me esforzaré en ser inofensivo para mí mismo y para los demás”
Entonces, manteniendo el vaso o recipiente de agua en la mano derecha, echaríais el agua en el recipiente
o vaso en la mano izquierda, y mediante estas palabras sellaríais esta acción…
“Mediante el f lujo de esta agua, simbolizo la transferencia de mis sagradas aguas de vida De lo mundano a
lo sagrado. Espíritu de toda vida, se aquí mi testigo Amen. Amén. Amén.”
Treinta y uno
Quiero acabar mi historia con pensamientos sobre mi amado, Yeshua. Como una Iniciada de Isis había
sido instruida para el momento en que me reuní con él. Y desde el momento en que nuestros ojos se
encontraron, fui transportada a otros mundos.
Comprendí las enseñanzas que habían estado oscuras. Comprendí los secretos más profundos de Isis,
tal como ella me los reveló no a través de los escritos sagrados, sino a través de la presencia viva de mi
amor por Yeshua.
Cuando se intensificó la Alquimia entre nosotros, le adoré a él y él a mí. Fue una gran dificultad para él
alejarse de mí.
Hubo conmociones dentro de él que le hicieron añorar estar conmigo mejor que enfrentar la mortal
Iniciación de Horus; pero como un maestro del alma había venido a dejar un sendero de luz a través de
los niveles oscuros de la muerte. Lo hizo por su propio bien y el bien de toda la humanidad.
Hay muchos quienes confundieron lo que él hizo y por qué lo hizo. Hay aquellos que creen que todo lo
que necesitan es creer en él y no esforzarse en la parte que les corresponde. Esta no fue nunca la
creencia o visión de Yeshua. Vino como un aguacero de luz, un f aro de amor en un tiempo en que el
mundo estaba aún en la sombra de un dios celoso. Yeshua, como un maestro del alma, demostró un
inmenso coraje y fuerza para enseñar amor en tal momento.
Fue extraño para mi, siendo a la vez iniciada y mujer enamorada, porque comprendí que mi tarea era
ayudarle a construir su Ka, de modo que pudiera enfrentar los niveles de la muerte con el mayor poder.
Como una Iniciada, comprendí mi tarea, y en alguna medida comprendí lo que era la visión de Yeshua.
Pero como mujer enamorada, fui arrastrada por los sentimientos hacia mi Amado.
Y así, permanezco en el tiempo, mirando atrás, como fue, sobre nuestra vida juntos; y tiene un gusto
agridulce
La dulzura de la presencia de Yeshua, me llenará y me sostendrá siempre, pero la amargura de nuestra
separación también permanecerá siempre.
En mis últimos días en esta tierra, Yeshua vino a mi de nuevo en su cuerpo Ka, como había hecho
durante muchos años. Estuvo conmigo hasta que exhalé mi último suspiro y llevó a mi Ka a través de los
niveles de la muerte, a través del sendero de luz que él había dejado mediante el poder de su intención y
me llevó a lo que llamaríais cielo, pero que es un lugar en el alma.
Yo permanezco en este lugar con su presencia a través de todo espacio y tiempo.
Treinta y dos
Estaba feliz permaneciendo aquí con su esencia que llevo en mi corazón y en mi mente. Pero la misma
Isis vino y me dijo que ahora tenía que contar mi historia…que las mentiras de los dos mil últimos años
tienen que acabar….que lo femenino vuelve a equilibrar a lo masculino….que la Madre Cósmica está
revelándose a sí misma al comienzo del f in del tiempo.
Y así es por lo que revelo uno de los secretos perdidos de las edades –que el Espíritu, el principio
masculino, para retornar a sí mismo a través de su viaje a la Materia, requiere la asistencia del principio
femenino, la inteligencia de la Materia misma.
Pero desde la perspectiva iluminada solar del principio masculino, el principio femenino lleva dentro un
abismo peligroso, húmedo y oscuro. El principio solar se siente amenazado por la oscuridad del aspecto
lunar. Sin embargo, en la unión del Sol y de la Luna, la unión de los principios masculino y femenino, en
equilibrio, en balance energético, donde se alcanza la verdadera iluminación.
Cuando Jesús se preparó a sí mismo conmigo para su terrible experiencia antes del Jardín de Getsemaní,
yo era la corporeización de Isis. Yo era ella. No había diferencia entre ella y yo misma. Había sido
adiestrada en las prácticas que lo aseguraban. Y de este modo, Yeshua como el Sol, el principio solar
manifestado en los niveles de la materia, se unió conmigo, la Luna; y él estaba unido con Isis misma y sin
ella no podría haber ocurrido su elevación. Ella es la Madre Cósmica. Otras culturas la llaman por otros
nombres pero es la misma.
En la medida en que el Iniciado masculino es capaz de anidar en los campos magnéticos con su Amada y
traer hacia sí mismo las energías vibratorias de estos magnetismos –en esta medida él está entrando en
contacto con la propia Isis, la Madre Cósmica, la Creadora de todo tiempo y espacio.
En la medida en que el Iniciado masculino es capaz de rendirse al magnetismo y de soltarse hacia su
propia naturaleza, ella se convierte en la misma Isis. Cuando estas dos cosas ocurren al nivel
cosmológico, el Iniciado masculino queda energéticamente sintonizado a Osiris y la Iniciada f emenina
queda asociada a Isis y de la mezcla conjunta de sus campos magnéticos, nace Horus –excepto que
Horus no toma la forma de un niño. Horus toma forma y Horus vuela dentro de los cuerpos Ka de los
Horus no toma la forma de un niño. Horus toma forma y Horus vuela dentro de los cuerpos Ka de los
mismos Iniciados. Son elevados de una forma muy real. Pueden volar dentro de los niveles celestiales de
su propio ser.
La verdad es que Osiris no puede ascender sin Isis, ni Isis sin Osiris. El Alto Dios Horus nace del
magnetismo de su unión.
El Iniciado masculino, siendo eléctrico por naturaleza, piensa que lo puede conseguir por sí mismo, pero
no puede.
Isis le espera al saber esto, pero él no.
Ella ha esperado por centurias y ahora estamos al comienzo del final de los tiempos, y la presión es
fuerte. Esta es una de las razones por las que me he presentado.
A aquellos Iniciados masculinos capaces de hallar los caminos en ellos mismos para rendirse a los
poderes de Isis llevados dentro de las naturalezas de sus Amadas, o llevadas dentro de sus propias
naturalezas si practican el camino solitario, sabed que hacéis esto no sólo por vosotros sino para toda
la humanidad.
Cuando se emprende la Magia Sexual de Isis, no es posible hacerlo solo para uno mismo, porque las
prácticas elevan rápidamente al Iniciado hacia el nivel del mito viviente, porque en sus más altas
expresiones, como hemos indicado antes, el Iniciado masculino se convierte en el mismo Osiris, y la
Iniciada femenina se convierte en Isis….y Horus nace de sus magnetismos.
Para aquellos involucrados en la práctica solitaria de la alquimia, ello se lleva a cabo a través del
magnetismo de los Circuitos Solar y Lunar. Cuando se domina la práctica básica compartida
anteriormente, la Serpiente Negra de la Luna, manteniendo la esencia del Vacío, se estremece y tiembla
dentro del cuerpo Ka del Iniciado, de la misma forma que la Iniciada femenina se estremece y tiembla en
los brazos del masculino cuando practican la Magia Sexual.
Dentro del Iniciado que practica la vía solitaria la Serpiente de Oro del Sol, se reúne con la Serpiente
Negra de la Luna en el centro de la cabeza y los campos magnéticos creados por su mezcla conjunta y
las reacciones energéticas creadas por sus intersecciones a través de los Chakras o sellos, crean el
Horus.
Por tanto, si es practicado en solitario o con otro no importa intrínsecamente, pero lo que debe ocurrir
en ambos casos es lo mismo.
El Sol y la Luna deben estar en equilibrio y entonces, la Iluminación, que nosotros llamamos Horus, tiene
lugar.
Treinta y tres
Os he ofrecido mi historia y las enseñanzas que os han sido dadas con las más profundas esperanzas
de que encontréis un camino hacia vuestra propia grandeza, porque eso es lo que ahora necesita el
mundo más que nunca.
Espero que seáis elevados por mis ideas y que seáis inspirados como yo lo fui por el ser magnificente
que llamáis Yeshua, pero que yo llamo mi Amado.
A aquellos quienes tienen el coraje para practicar las Alquimias de Horus y para aquellos que escogen
vivir la Relación Sagrada con ellos mismos o con otros, les doy mi bendición.
Que las bendiciones de la Madre Cósmica os acompañen en vuestro viaje hacia vosotros mismos. Que el
camino entre el Sol y la Luna sea revelado.
Espíritu de toda vida, se testigo. Amén.
Web: http://www.lainterconexionarcoiris.com
– El manuscrito de María Magdalena, por Chamuel Arcangel