Antes de seguir con la reseña, querido lector, he de confesar dos cosas, primero la admiración y amistad que me une a Blanca Miosi, la autora, y segundo que esta novela ha conseguido algo muy difícil a estas alturas de la vida, sorprenderme.
Hace algún tiempo leí El Manuscrito I – El secreto, de la misma autora, y ya entonces me convenció su forma de escribir. Fue mi primer acercamiento a la obra de esta prolífica escritora y salí encantado con la experiencia. A esa primera lectura siguieron El cóndor de la pluma dorada y Amanda antes de enfrentarme a este nuevo reto de Blanca.
Por mi condición de amistad con ella he seguido, desde la distancia, la fase de escritura de la novela, sus miedos por la calidad de la misma, por la dificultad de crear una historia original, los problemas de enfrentarse a una novela cuando su carrera está en lo más alto, el vértigo de sacar algo que sus acólitos no aceptasen y, por qué no decirlo, el pánico escénico que produce la presentación en sociedad de una nueva novela. Bien, he de decir que todos estos temores estaban absolutamente injustificados porque El Manuscrito II – el coleccionista es la mejor obra que he leído hasta la fecha de Blanca.
A pesar de lo que pareciera indicar su título ordinal, en absoluto este II es la continuación de El Manuscrito I, sino que es una nueva historia independiente que tiene en común con el primero únicamente la base de carpintería de la novela, pero nada más. Al contrario, creo que es mucho mejor que su antecesor. En la sinopsis se explica bastante bien de qué se trata la novela, y yo no soy de hacer resúmenes de las obras, sino de explicar, como haría con un amigo, qué he sentido al leerla, y esta experiencia he de definirla con emoción, impaciencia por avanzar en la historia, sorprendido por los acontecimientos y, he de reconocerlo, preso de una profunda envidia por la capacidad que tiene esta autora para narrar historias.
Como decía, durante la creación de la novela hablamos alguna que otra vez y me planteaba sus temores, y otras cosas que no he de desvelar a nadie, y en esos miedos yo pensaba “Blanca te vas a meter en un lío narrativo de difícil salida”, pero no, querido lector, eran ardides de escritora porque Blanca ha construido una novela impecable, narrada desde múltiples bocas, en diferentes espacios, tiempos y escenarios que se van enlazando en un caudal de emociones extraordinario.
Con tres personajes principales en los que se asienta la novela coral, Blanca consigue transmutarnos del presente al pasado, de las costas de Finisterre al Caribe de los colonizadores con maestría.
Voy a decir algo que creo que molestará particularmente a la autora, pero que no puedo evitar, y es que su novela sólo me duró dos vuelos, uno de ida y otro de vuelta, entre los que no tuve opción de leer más y cuyas letras quedaron flotando en mi cerebro hasta que agarré la butaca de la nave de regreso, por desgracia no un Gulfstream, me até el cinturón y pude disfrutar de la imaginación desbordada de Blanca, así como de su buen hacer como escritora.
Dicen que nadie regala nada, y es del todo cierto, por eso si esta autora es número uno de ventas en plataformas como Amazon, disputando el espacio a monstruos de la narrativa mundial, no es en vano, así que si se me permite, si te gustan los thrillers de acción, recomendarte que no te pierdas El Manuscrito II – el coleccionista.
Resumen del libro (autora)
"En el siglo XVI el tráfico de oro y plata proveniente de América hacia España era frecuente. Los cargamentos cruzaban el Mar del Norte desde Nueva España (México) y también desde el virreinato del Perú. Muchas de las embarcaciones naufragaron en los mares tenebrosos de lo que ahora se conoce como Atlántico. Sus cargamentos quedaron esparcidos por algunas islas y en las profundidades del océano, producto de los huracanes y tormentas, pero también de los enfrentamientos con corsarios y piratas.Uno de esos enormes tesoros yace en una isla camino a las Bahamas, el sitio y lo que allí se encuentra está en un diminuto pergamino que escondió Giulio Clovio, el pintor miniaturista más famoso de la historia. Permaneció oculto por casi quinientos años dentro de un microscópico reloj que fue a parar a manos de un coleccionista.
EL MANUSCRITO se encargará de guiar a todos los involucrados, quienes entrarán en la historia y formarán parte de ella.
Como en el libro anterior, EL MANUSCRITO I El secreto, Blanca Miosi utiliza una técnica original, en la que el lector podrá visualizar lo que ocurre desde diferentes puntos de vista, incluyendo el del manuscrito y, así como en el primer libro, es una novela que tiene principio y fin".