Qué se necesita para casarse
Para casarse en Japón los requisitos varían de acuerdo a si la unión es entre ciudadanos japoneses, o entre un extranjero y un ciudadano japonés.
Si el matrimonio es entre un ciudadano japonés y un ciudadano no japonés, la forma de contraer matrimonio será según la legislación japonesa. Los interesados deberán acudir o entrar en contacto con la de la municipalidad ante la que deseen registras su unión, para así obtener toda la información necesaria.
Uno de los principales requisitos solicitados por parte de las autoridades japonesas es una certificación de soltería, expedido por las autoridades de los países de origen de cada una de las personas que desean casarse.
Los ciudadanos japoneses requieren de documentos tales como Koseki Tohon (registro familiar) y el Konin yoken gubi shomeisho (Certificado de Capacidad Legal para Contraer Matrimonio).
Para los por los ciudadanos no japoneses se recomienda contactar a la embajada de su país en Japón. Para validar esta unión en su país de origen, dependerá de los procedimientos legales de cada país. Pero el procedimiento en la mayoría de los casos suele ser la inscripción en el Consulado de Japón y el Registro Civil de su país.
Cómo va la fiesta
Al igual que en otros lugares, los preparativos de la boda son muy importantes. La elección del vestido perfecto tiene un valor especial en la tradición japonesa. Aunque para la novia se preparan de dos a cuatro cambios.
Tradicionalmente, la novia debe poder cambiarse por lo menos una vez al día. Por lo general, la boda se realiza durante la mañana con un kimono de color blanco llamado “shiromuku”.
Sin embargo, para la preparación de la novia se tiene en cuenta otra prenda de nombre “wataboshi”, que es similar a una capucha. Mientras que por debajo de esta capucha, la novia lleva un “tsunokakushi” (escondite de cuernos), que es un accesorio formado por una peluca y tela llamado tsunokakushi, que simboliza que se ocultan los celos y egoísmo para mostrarse pura y gentil al esposo.
Tras esto, la novia debe cambiarse y usar un kimono rojo, negro y dorado que se llama irouchikake. Por último, durante la recepción se usa un kimono más elegante llamado hikifurisode.
El novio también prepara su vestimenta para la boda. Aunque en su caso suele ser más sencilla. Sus cambios consisten en un kimono, unos pantalones de kimono y un abrigo largo, que es una prenda llamada “montsuki haori hakama”. Esta prenda suele ser de color blanco, gris y negro para que no destaque de la novia.
Durante el día de la boda el novio también puede cambiarse, pero casi siempre permanece con la misma vestimenta todo el día.
A pesar de que actualmente muchos jóvenes suelen optar por una celebración civil en la que compartan con amigos y familiares. La mayoría de las bodas japonesas suelen seguir siendo ceremonias shintoistas.
Los novios reciben a familiares y amigos en la recepción en una celebración llamada nijikai. Luego de esto los mayores se retiran a otro lugar, mientras que los jóvenes pasan a un espacio más relajado que no se incluye en el precio de la recepción, por lo que hay que pagar un extra si se desea asistir.
En muchos casos, si hay alguien que no pueda asistir, los novios los invitan para que puedan compartir. Pero el baile no suele formar parte de las bodas japonesas. En lugar de esto las personas suelen conversar durante la comida.
Se acostumbra además a que los invitados traigan a la celebración dinero para los novios, que es un presente conocido como “Shugi”. Y al finalizar la recepción, la tradición es que los novios hagan un discurso antes de cortar el pastel de boda.
Tradiciones matrimoniales japonesas
Las tradiciones matrimoniales japonesas están ligadas a una serie de ritos en el que la religión Shinto suelen estar muy presente.
El Shinto es una de las religiones más practicadas en Japón. Está basada en la mejora como ser humano y desarrollar la bondad interior. Se caracteriza por ser politeísta y no escritos religiosos ni esculturas sagradas, ya que sus dioses son más un concepto.
Sus deidades reciben el nombre de “kami” y son las entidades que forman el mundo, con la capacidad de controlar elementos como los mares, el aire, las montañas, entre otros. Una característica del Shinto es que en esta religión los ancestros pueden llegar a convertirse en “kami”.
Es por esta razón que el tipo de bodas más tradicionales es la ceremonia Shinto, que se llevan a cabo en un templo y solamente familiares cercanos pueden estar presentes.
Hoy en día muchos de los matrimonios son una mezcla entre bodas shintoístas y elementos occidentales.
Ceremonia “san-san Kudo”
La ceremonia “san-san kudo”, también llamada ceremonia de las tres veces es una tradición japonesa en la que la pareja intercambia una copa de sake y ambas partes beben de ella, posteriormente los familiares beben de la misma copa en señal de reconocimiento de la unión.
En este rito el sake es servido por las “miko” (sacerdotisas) y en la actualidad, suelen intercambiarse anillos.
El nakodo
Es un paso previo a la boda en el que las familias de los novios se reúnen antes de casarse, para discutir los términos de la unión. Es una formalidad en la que de cierta manera se negocia que la familia de la novia acepte que se lleven a su hija.
Para la mentalidad de occidente este rito al igual que el o-miai (matrimonio concertado) puede ser algo controversial. Sobre todo porque en el 90% de los casos, tras la unión la mujer abandona el trabajo.
Naga-Noshi
Es un arreglo ornamental que simboliza los sinceros deseos para la pareja que contraerá matrimonio.
Todas estas tradiciones demuestran que este es un país rico en tradiciones y lleno de historia, que cautiva a cada vez más personas deciden hacer vida en Japón o al menos, visitar sus hermosas tierras.
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