Cada día la brecha entre la ciudadanía y la clase de política de este país es más y más grande. Podríamos decir que es casi insalvable. Nos gobiernan señoritos que no tienen ni puta idea de lo que sucede en la calle. Obviamente la culpa no es de ellos, la culpa es de nosotros, que los votamos.
Mirar lo que dijo ayer (mofándose de un diputado socialista) el impresentable de José Ignacio Echeverría, consejero de Transportes de la Comunidad de Madrid, y que en su vida ha viajado en transporte público: ”Lo primero que le quería preguntar ¿qué título utiliza usted para coger el transporte público? Creo que no lo coge nunca porque el Metrobús yo creo que no existe y entonces, si usted tiene el título del Metrobús… ¡Pues nos vamos todos! ¡qué no existe!”.
Esto ya es demasiado grave por sí mismo pero siempre puede ser peor. Y para mi lo peor es el jaleo que posteriormente sale de la zona de la bancada del PP. Aplauso cerrado, entre murmullos, al ‘inteligente’ comentario de su compañero. Es como el guión de una película de Esteso y Pajares, algo así como cuando tenías 10 años y veías ‘El liguero Mágico‘ y no sabías si te estaba haciendo gracia o pasabas miedo.
Personalmente creo que este personaje debería haber dimitido tal como salió de la Asamblea. Pero para más inri se reivindicó en sus palabras. No es que él desconozca por completo el área que dirige, no, es que los demás estamos anticuados. “Lo que le he querido decir a este señor es: no me hable usted del Metrobús, no me sea usted tan antiguo, y hábleme del billete de diez viajes que es el que utilizamos todo el mundo”. No sé si estas palabras son síntoma de estupidez o de cobardía. Y recordarle al señor Echeverría que para no existir subió un 22% en 2010, de 7,40 a 9 (que no los 9,30 actuales).
Total, yo que él, le hubiera consultado antes a Ana Botella, también conocida como la ‘Al Gore de la Moraleja de Enmedio’, que ella seguro que se conoce a la perfección todos los títulos de viajeros que tiene el Consorcio de Transportes de la Comunidad de Madrid a disposición de los usuarios. Porque si ella va a la peluquería en coche oficial y con cuatro guardaespaldas es para disminuir el paro, que así le da trabajo a cinco personas.
Y recordad, el Metrobús no existe, la crisis es algo pasajero, Elvis Presley no está muerto y Nueva Rumasa es una inversión de presente y futuro.