Las necesidades de nutrición de los niños pequeños son altas. Para criar un niño vegetariano es necesario asegurarse de incluir en la dieta gran cantidad de nutrientes de primera calidad, buenas fuentes de calcio, vitaminas B12 y D, proteínas y hierro.
En cuanto a la leche, no debería ser desnatada, pues elimina las vitaminas A y D. En caso de utilizar leche de soja, hay que asegurarse de que ésta está recomendada para bebés.
Nutrientes fundamentales de la dieta vegetariana infantil a partir del primer año:
Hierro
A partir de los seis meses la dieta debe incluir fuentes vegetarianas de hierro, ya que la leche por sí sola no cubre las necesidades.
La vitamina C es importante para la absorción de hierro, por lo que hay que combinar vegetales de hoja verde oscuro, cereales y legumbres, con cítricos, kiwi, coles, pimientos, patatas y tomates.
Calcio
La leche materna contiene el calcio necesario durante los primeros meses
En el destete, se pueden utilizar leches de soja enriquecida, queso, yogur, verduras verdes, pan integral y legumbres.
Proteínas
Al comenzar la ingesta de alimentos sólidos, debe procurarse que haya variedad para conseguir un equilibrio proteínico.
La combinación de distintas fuentes vegetales es ideal. Por ejemplo, cereales combinados con legumbres o verduras.
Vitamina B12
Tras el destete, se obtiene de huevos y lácteos.
Para un bebé vegetariano estricto están recomendadas la leche de soja, levadura de cerveza y algas.
vitamina D
Sus fuentes están en la margarina y alimentos enriquecidos como cereales.
El efecto de la luz solar sobre la piel también es fuente de vitamina D, por supuesto, con moderación y evitando las altas temperaturas.
Ácidos grasos omega 3 y 6
Sus fuentes vegetales se encuentran en las semillas de lino, la calabaza, las pipas de girasol y las semillas de śesamo.
Lo ideal es moler las semillas y añadir el polvo a los platos.
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