Revista Espiritualidad
YO amo a mi país. Pero me da pena como nuestros dirigentes, en su mayoría, por hecho u omisión lo llevan; y como el pueblo común, por ignorancia, prebenda o lealtad mal enfocada deja que lo lleven. Lamentablemente vivimos en la cultura mediática de que todo está bien. Que muchos pobres salieron de ese estado; que estamos en la revolución educativa más grande de todos los tiempos (aunque coincidencialmente eso mismo dijeron del “Plan Decenal” y la “Misión 1000 por 1000”), que el Plan de Seguridad Ciudadana marcha bien, que nuestra justicia ha progresado, que la democracia esta fortalecida. Sinceramente me gustaría que las cosas fuesen como lo pintan los medios; pero la realidad es otra. ¡No todo está bien! Y no porque no se pueda, sino porque a muchos no les conviene. Danilo Medina, lo he dicho y lo mantengo, tiene buenas intenciones y está realizando ejecutorias que han marcado la diferencia. Pero, también, siempre he dicho que las mismas serian “si lo dejan”. Muchos no me entendieron con eso. Cuando me refería que el presidente Medina sería un buen mandatario si lo dejaban serlo, lo hacía pensando en los verdaderos poderes que gobiernan nuestro país: las ONG’s internacionales, la Iglesia, los empresarios y los banqueros (¿pensaba que me refería a Leonel?).
Comencemos con el rosario. El problema de la electricidad no se ha resuelto pues afecta el bolsillo de los señores de la energía que poseen el control de las EDE (nuestro país se hiso esclavo de ellos al privatizar la CDEEE). ¿Quién dice que no podemos tener la misma calidad energética que otros países? Y el problema es que tenemos un mal servicio y pese al mismo seguimos pagando la energía más cara de América (y lo malo es que lo sabemos y no hacemos nada). Y si el Gobierno quiere imponer su derecho, los jerarcas del sector eléctrico mandar apagar las plantas para chantajearlo. ¡Y nuestro gobierno tiene miedo pues esos señores son a la vez protegidos por magnates internacionales que saben hacer valer los acuerdos internacionales a su conveniencia!
Siguiendo con la energía, caemos en la gasolina. ¡La única cosa que viola la ley de la gravedad! Somos un país dependiente de los carburos de traída externa y eso nos hace “sirvientes” de los dueños de las mismas. Únale a eso la ambición desmedida de los dueños de gasolineras que no tienen problemas en crear “crisis de abastecimiento” para aumentar el galón. ¡Y todo anda bien!
Pasemos a otro renglón. Las compañías de comunicaciones, en mayor o menor grado, abusan con nosotros. Nos venden una idea de mejores servicios, pero a cada rato o se cae la señal o se dañan los equipos, relativamente nuevos. ¡Pero en los medios de comunicación todo anda bien! ¡Claro! Si nos fijamos esas compañías solo son medios para hacer más ricos a sus dueños y socios, sin importarles en verdad la calidad y satisfacción de los clientes; pero manejándonos de tal forma, gracias a la magia de la mercadotecnia, que nos creamos complacidos y satisfechos.
¿Menos pobres? Bueno, cuando viajo a Santo Domingo sigo viendo las barriadas de “La Surza”, “Las Canitas” y las que están en las orillas del Rio Higuamo. Aquí mismo en San Pedro de Macorís contemplo barrios como “Villa Faro”, “Barrio Blanco”, por solo mencionar, que parecen que tendrán que esperar la próxima evaluación para ver si salieron de la pobreza. Bueno, un grupo salió de la pobreza… usted sabe quiénes. Lo que me da pena es que no soy de ese grupo de nuevos acomodados.
Hablemos un poco sobre la justicia. Se han hecho avances: modernización de la policía, dinamización de los fiscales, agilización de los procesos judiciales. Pero todavía faltan detalles, que de por si dañan todo. Pese al plan de seguridad ciudadana los atracos y asesinatos aumentaron. Y la constante queja de la misma policía de que hoy apresan a un criminal y días después lo encuentran en la calle nos dice que, o el código procesal penal es un disparate o son disparatosos quienes tienen que aplicarlo. Los menores delinquen y por ser menores piensan que el peso de la ley no les caerá… y en muchos casos tienen razón. Pienso que si como menor matas, como menor debes estar preso. También la violencia domestica sigue igual. A cada momento leo de como un azaroso mato a una mujer. ¡Y todos los años nos la pasamos con la propaganda “no violencia contra la mujer”! ¿Sera que tendremos que ser más drásticos con los femenicidas?
Aprovechemos y tratemos sobre la doble moral dominicana. Traigo esto a colación por la prohibición del concierto de la cantante estadounidense Miley Cyrus. Que conste que ni soy fan ni me interesa que se presente o no. El argumento de que dicha prohibición es para “evitar perjuicios contra la moral y mala influencia” me da risa. ¿Perjuicio contra la moral? ¡En un país que las “Chapas que vibran” suena en todas partes! ¡En un país donde se canta de plomo, tigueraje, droga, uso de la mujer (en bikinis ensenando el culo) en la mayoría de los dembows! ¡En un país donde se premia con el Casandra (en ese entonces) a un artista famoso por violencia doméstica! ¡En un país donde muchos padres y madres se comportan inmoralmente frente a sus hijos y los venden a famosos para obtener ganancias! ¿Mala influencia? En un país que los funcionarios todos los días ensenan que la corrupción es el camino para hacerse rico… un país en que sus representantes de justicia se quedaron callados y no pidieron la extradición del nuncio pedófilo que huyo con ayuda de muchos dirigentes políticos y de la iglesia… ¿mala influencia? En un país donde la falta de oportunidades de trabajo tiene que llevarte a lo malo…. En un país donde se discrimina cuando se conviene… En un país donde un grupo de sin oficios en un programa de televisión acaban con todos… en un país donde un funcionario entra con una sandalia y sale con una colección de zapatos de piel… ¡Por favor! Dejémonos de doblemoralidades. Si se prohíbe una cosa, deben prohibirse otras. Muchos en nuestro país son tan doblemoralistas que critican y piden la cabeza del embajador de Estados Unidos por cumplir algo que su presidente, por cierto cristiano, ordeno. ¡Pero buscan todavía visa de pastor en el consulado! ¿Por qué no protestar evitando buscar visa para ese país que apoya la corrupción moral? Yo no estoy a favor de lo malo y lo degradante, pero estoy en contra de la doble moral. Lo malo es malo aunque políticamente sea o no conveniente.
Sobre la Revolución Educativa puedo reconocer lo siguiente: se ha realizado el programa de inauguración de escuelas más ambicioso hasta el momento; se lleva a cabo un programa de alfabetización que esta ensenando a muchos dominicanos y dominicanas a leer y escribir y el cual está integrado por voluntarios y estrategas de gran calibre. Un Pacto Educativo que con sus cortas y largas tiene la intención de una mejoría de la calidad educativa. ¡Eso hay que reconocerlo! Pero (no falta) pienso que la Revolución Educativa todavía está incompleta. La misma debe enfocarse en un MINERD que tome su rol de regulador del sistema educativo y cree estrategias para lo que tiene que ver con los textos escolares. ¡Este ano tengo que comprar otros libros por el solo hecho de que las editoras han cambiado el formato! ¡Y caros por cierto, más que el año pasado! ¿Cuáles editoras? Bueno, puedo mencionar entre las mismas las administradas por unos socios habituales del Ministerio, Corripio. ¿No podría el ministro pedirles que no abusen con uno? Muchos padres no han enviado a sus hijos esta primera semana, sacando a los irresponsables, por no tener ni mochilas, cuadernos, ni uniformes para enviarlos a las escuelas. ¿Cuándo será el día que MINERD realice un operativo de mochilas y uniformes antes del inicio del año escolar? Por cierto, cuando termino el año escolar 2013 – 2014, se llenaron unas fichas para “armar” a los estudiantes de escasos recursos. Todavía no he visto llegar eso. También la Revolución Educativa debe cambiar la costumbre de que los libros de texto lleguen en Noviembre. Pienso que dichos libros deben estar en las escuelas antes del inicio del periodo escolar. ¡Por cierto, al menos que los hayan cambiado, la edición de los mismos cae en manos de los Corripio! La Revolución Educativa, estimado ministro, debe también abarcar lo que tiene que ver con la humanización de la carrera. Si una persona que se dice director trata como animal a los profesores a su cargo, debería o ser orientado o destituido. También la salud del personal y las finanzas del mismo. ¿Difícil? ¿Cree que es justo que técnicos, muchos de los cuales no están ubicados oficialmente, tengan que pagar el motoconcho de sus bolsillos para ir a escuelas lejanas? Que profesores con una sola tanda por muchos años, no se les complete por el simple hecho de que ahora hay que concursar… ¿Y dónde queda la experiencia de los mismos? La Revolución Educativa será completa, también, cuando a nuestros maestros y maestras se les den facilidades para seguir preparándose. Parece que muchos en el MINERD piensan que con talleres, cursillos y diplomados basta (por cierto todavía espero el diploma del curso que nos vendieron como diplomado de lenguaje y matemática patrocinado por la OIE… aunque seguro, común en nuestro país, dirán que eso era cosa de la anterior administración). Yo mismo deseo hacer una maestría, pero el dinero no me da (y conste que no soy de los que se ahogan en préstamos) y cuando llegan pocas becas a las regionales, no alcanzo aunque me haya apuntado en la lista. ¿Cómo quiere que sea un profesional educativo cabalmente preparado? Lo que he aprendido del área que me apasiona, innovación educativa, ha sido porque me he fajado a investigar en el internet. Pienso que este nuevo periodo puede ser la oportunidad para que la Revolución Educativa se complete. Muchos dicen que los maestros son quejumbrosos y solo piensan en dinero más que en vocación (la Biblia dice que el obrero es digno de su salario… y la misma iglesia católica ha ensenado que con solo vocación no se come); es verdad, de la misma forma que muchos administradores son faltos de criticidad y viven tan bien que se les olvida la crujía que pasaron cuando fueron profesores en el campo de acción. ¡Me canse de una educación que importantiza más al sistema que al ser humano!
Hablemos un poco sobre los libros de texto. Es de consenso común que los libros actuales están vacíos de contenido. Y la mayoría necesita más “criollización”. Una cosa que me gusto del proyecto de Texto integrado fue que se acercaba más a nuestra realidad. Pena que no se aprovechó y se formularon esos libros con la calidad informativa y formativa que merecían. ¿No se puede patrocinar escritores de textos educativos dominicanos? Solo pregunto.
Qué bueno que el presidente reconoció que es tiempo de una mejora salariar. Si lo dicen los sindicalistas o los trabajadores, hubiese caído en oídos sordos; pero lo dijo el hombre. Es verdad que con RD$10,000 no se puede vivir… ¡Ni con RD$ 15, 18! Claro, los funcionarios no les interesa pues ganan mucho más que eso, sumándole “los regalitos” por apoyar concesiones y más. Un diputado, no todos, gana más que un profesor, médico o ni se diga trabajador de zona franca, juntos; por ir cuando le da la voluntad a una reunión (¿A ellos no les ponen el aparato ese de la asistencia?) ¡Y esos son los que tienen que deliberar mucho cuando se trata de aumento de sueldo a los hijos e hijas de machepa! Pero para aprobarse aumentos a ellos mismos y dinerito a sus ONG no tardan… ¡Todo mal aunque lo pinten de bien!
Por ultimo hablare de la democracia. Hace unos días escuche a un señor decir con convicción que eso no existe. Si pensamos bien en el concepto de democracia: “gobierno del pueblo por el pueblo y para el pueblo”, creo que él tiene razón. Los dominicanos no tenemos verdadera cultura democrática. Más que ver a los funcionarios como trabajadores para el pueblo, los vemos como los “jefes”. Eso tiene que ver con un espíritu de lambonismo mezclado con complejo social. Eso de democracia se puede definir como “lo que tu jefe te deja hacer y decir mientras no le afecte directamente”. ¿Muestra? Critique al presidente y lo acusaran de “opositor”, “recalcitrante”; etc. ¡Todavía vemos la figura del presidente como inmaculada! Nos han pintado que criticar es malo. ¡No! Criticar y objetar es malo si a las mismas no se aportan soluciones. Hay que aprender atacar el problema sin destruir al causante. Recuerdo cuando el asunto del 4% muchos trabajadores del Palacio Nacional se abstenían de usar algo de color amarillo por miedo a ofender al entonces presidente. ¿Democracia? Se ha vendido la idea de que las huelgas hacen daño al desarrollo del País… jajajaja… si lo analiza a quienes solo le hacen daño es a los empresarios y ricos. ¡Y la huelga es un derecho que tiene el pueblo trabajador cuando está convencido de que sus dirigentes no hacen lo que tienen que hacer! Muchos trabajadores públicos tienen miedo de apoyar huelgas pues piensan, y tienen en muchos caso razón, serán cancelados o sus sueldos descontados (en educación siempre se ha planteado eso) ¿Democracia? ¡No!
Nuestro país no es libre. Estamos encadenados por acuerdos y patrocinios que nos han puesto a merced de los antojos de los poderosos internacionales. La cosa se resume en: “No sometimiento; no money”. Eso lleva a que se tenga que cedular a los haitianos nacidos, venidos, traídos, contrabandeados nacidos aquí. Soy de los que pienso que la nacionalidad no se le niega a quien la pida; pero la forma como se está haciendo me indica que hay algo turbio. Pero si el presidente se opone, los poderosos que financian y prestan dinero a nuestro país dejarían de hacerlo y el estilo de vida de muchos caería, sin mencionar que el gobierno también. ¿Libertad? ¡Solo en sueños!
Bueno, pienso que escribí mucho. Los dominicanos tenemos que cambiar nuestro pensar. Se nos ha inculcado ciertos patrones de pensamiento y creencia erróneos: “nada se va arreglar”, “yo sigo a este porque me resuelve”, “esto no lo arregla nadie”; etc. Debemos empoderarnos de nuestro destino. Escribir cartas a nuestros congresistas, pues ellos trabajan parta nosotros quienes le dimos nuestro voto; en las redes sociales hacer muestra a nuestros gobernantes que no somos pendejos; pensar que, aunque sea difícil, nuestra realidad puede cambiar. Nuestros funcionarios deben ser más humildes y reconocer sus limitaciones. Debemos ser más dueños de nuestro país, pese a que lo han vendido mediante préstamos y acuerdos que solo benefician a los magnates extranjeros y a los guacaganarix criollos. Decir que todo está bien es una gran MENTIRA. Es mejor se honestos y reconocer que aunque no todo está bien, se puede hacer más. Claro, quizás esto también sea una utopía mía.