Revista Opinión
El paripé de la Conferencia de Paz
Publicado el 18 octubre 2011 por Carlosrodriguez @CarlosRguezPrez“Conferencia de Paz”. Con este nombre se ha presentado el foro en el que los terroristas de ETA se han reunido con los partidos políticos vascos, (a excepción de PP y UPyD), asociaciones y colectivos vascos y un Grupo Internacional de Contacto donde se encuentran Brian Currin o Kofi Annan. Las “dudas” sobre esta reunión son más que evidentes, más si cabe cuando se ha convocado a un grupo de personas ajenas al conflicto y cuando los asesinos todavía no han renegado de sus intenciones terroristas. Siguen con las armas y las bombas en sus manos y con la posibilidad de matar. Para Rosa Díez, este foro es una “conferencia de la claudicación” donde “sus participantes abogan por un final sin vencedores ni vencidos y que tanto el gobierno de España como el gobierno vasco le han dado a ETA una de sus victorias más ansiadas: la internacionalización del conflicto”. No existe en Euskadi ni en España un conflicto entre dos bandos enfrentados ni, por tanto, `la última confrontación armada en Europa` como afirma el comunicado, sino un grupo terrorista que no acepta otras opiniones. La ONU define el concepto de terrorismo como: “Todo acto destinado a causar la muerte o lesiones corporales graves a un civil o a un no combatiente, cuando el propósito de dicho acto, por su naturaleza o contexto, sea intimidar a una población y obligar a un gobierno o a una organización internacional a realizar un acto o a abstenerse de hacerlo”.El Grupo Internacional de Contacto le ha pedido a ETA su fin definitivo pero ya el año pasado les exigió un alto el fuego verificable. ¿Por qué se reúnen con ellos cuando todavía no han depuesto las armas? ¿No debe ser el acto de deponer las armas lo que verifique sus intenciones de paz, de aceptar las reglas democráticas y políticas? La palabrería se la lleva el viento y confiar en los que ya muchas veces nos han engañado es algo inconcebible. El lehendakari Patxi López esperaba que de la conferencia saliera “la exigencia a ETA para que abandone las armas” y que “si a ETA y su entorno les hace falta esa conferencia para escenificar su final pues que aprovechen la oportunidad”; pero solo ha salido una “llamada para una declaración pública del cese armado”. Sin embargo, esta exigencia lleva ya muchos años en las calles de Euskadi y de España. El paso definitivo lo tienen que dar ellos solos, motivados de su auto-convencimiento de disolución y desaparición de la banda, de su renuncia a las armas y a sus planteamientos totalitarios. Cuando esto suceda, ya podríamos empezar a dialogar.