Ya de por si para todo seriefilo sentarse a ver una serie es un placer único, disfrutar de un nuevo episodio sin saber que va a pasar, esperando la sorpresa, lo nuevo, es magnífico. Pero si usted tuvo la suerte de compartir eso que ve, llámese House, Dexter, CSI, Lost o cualquier serie, con la persona que AMAS, acostados o reposados en un sillón, sabrán lo que estoy afirmando: Ver y compartir una serie con aquella persona que amas es increíble, es hermoso y hoy lo quiero compartir con ustedes.
Spartacus nos unió en el mundo seriefilo, nos abrazamos, pusimos play y nos sumergimos en la antigua Roma para ver la historia de esos gladiadores, para verla juntos, en la cama y casi siempre acompañados de algo dulce (helados, chocolates o tortas). Todo es muy divertido, sus comentarios, sus elocuencias, sus sueños, sus gritos, sus abrazos y sus gestos, todo suma a Spartacus que a partir de hoy es otra serie para mi, para nosotros.
Se que la elección de la serie tiene su tinte sexual, que por debajo de las sabanas su cuerpo se mojará ya que disfruta ver esos cuerpos filamentosos y eróticos de los gladiadores, lo se, me importa y lo aguanto, por que todo es hermoso a su lado, por que ver una serie, lo reitero, junto a la persona que amas es sublime, es genial y hasta deja de importar la calidad de la misma. Ver una serie con vos, hermosa, es celestial.
Recomiendo ver series así, obviamente que no todas, cada uno debe mantener su espacio pero aliento a que las parejas se unan bajo este bicho que es la televisión y que mejor que mediante una serie de calidad y que este sea un nuevo momento único entre los dos, que compartan este espacio de entretenimiento en la tranquilidad de su hogar.
Se que muchos de ustedes ya practican esto y los felicito, se también que hay muchos solteros (no pierdan las esperanzas) y se, MI AMOR, QUE TE AMO.