económica globalizada. Si para Europa el resultado del referéndum británico es gravísimo, para el Reino Unido, partido en dos, y para su primer ministro, al que no le ha quedado otro remedio que anunciar su dimisión, la situación resulta especialmente alarmante.”
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tratado Gran Bretaña (con su añadido de Irlanda del Norte) de cortejar a los Estados Unidos de América, una excolonia que se resistió a aceptar y que ahora es aliada, probablemente por mor de su potencial económico. Claro que para una mayoría de británicos, por lo que resulta de las urnas, la Unión Europea no es interesante. Sirve Europa a los británicos para hacer negocios, para gastarse sus pensiones en las cálidas playas de España e Italia, para hincharse de vino, para hacer negocios de todo tipo, incluyendo el contrabandismo en Gibraltar. Pero rechazan a Europa porque les acerca emigrantes y les fuerza a estilos económicos y de vida que ellos, los de la ...Albión, tan isleños, se niegan a aceptar, confiados tal vez en que ya hace muchos siglos vencieron a una Armada que envió Felipe II, llamada la Invencible, y que se derrotó por solamente intentar acercarse a las islas. Así las cosas, la Unión Europea, poco gobernable máquina de burocracia difícilmente operativa, se confió en sí misma, con aquel proverbial “¿Quién como yo?”, que nos viene de los tiempos bíblicos. Y así se ha llegado al llamado “brexit”. O sea, "salirse"...Europa ha perdido una estrella y el Reino Unido ha perdido la oportunidad de “civilizarse” a la europea. Las consecuencias de lo ocurrido resultan imposibles de vaticinar en estos momentos, pero no hay que ser clarividente para imaginar fuertes convulsiones económicas y graves crisis sociales en el Reino escindido y en la Europa abandonada. ¡Tantos años diciendo que se construía una gran Europa y ahora resulta que se desintegra!Todo ello mueve a pensar que la megalómana idea de una Europa Unida no deja de ser una entelequia, porque en su seno impera la desigualdad
entre países, culturas y civilizaciones. Mejor sería una asociación “ad hoc” entre cada grupo de naciones. Y, desde luego, lo mejor sería que los países de más reciente ingreso (Polonia, República Checa, Eslovaquia, Eslovenia, Croacia, Bulgaria, Rumanía, Chipre, Malta) dejaran de pensar que deben ser auxiliados de manera abundante, para salvar sus propias carencias. Las que ellos mismos no quieren o no pueden resolver.Y los países europeos dominantes deberían pensar que los “nuevos” no son sus “colonias”, brindándoles apoyo conforme a sus peculiaridades y carencias. Ardua labor la que espera a la Unión Europea; y ardua trayectoria la que espera al Reino Unido, en un camino contradicciones internas y defecciones de políticos, con dimisiones y tal vez nuevas elecciones.¿Quo vadis Europa?De momento, las estrellas se caen de la bandera… ¿y a dónde van a parar?
"La independencia siempre fue mi deseo; la dependencia siempre fue mi destino" Paul Verlaine (1844-1895) Poeta francésSALVADOR DE PEDRO BUENDÍA