Revista Deportes
Desde que Gerardo Tata Martino aterrizó en Can Barça, la sombra de la sospecha le ha ido persiguiendo. En primer lugar le persiguió la sospecha de su estilo a la hora de vestir, esas chaquetas eran más propias del siglo pasado que del presente y, posteriormente, tras un partido contra el Rayo Vallecano, se le recriminó [&hellip