Revista Cine

El tenis, metáfora de la vida – Crítica de “Borg/McEnroe” (2017)

Publicado el 23 mayo 2018 por Manuzapata @vivazapatanet
El tenis, metáfora de la vida – Crítica de “Borg/McEnroe” (2017)

Borg, el caballero de la raqueta, la elegancia personificada, el hombre de hielo, la ausencia de sentimientos, la técnica depurada, la perfección hecha tenis. McEnroe, el enfant terrible, el bocazas irredento, el talento insolente, la improvisación, el atrevimiento, la creatividad, los puntos imposibles, la efectividad a partir del caos. Nadie podría haber imaginado un par de carácteres tan antagónicos ni dos estilos de entender el juego así de contrapuestos, sin embargo, ambos estaban ungidos de genialidad y tenían mucho más en común de lo que pudiéramos imaginar.

1980. El apabullante prólogo nos sitúa en la pista central del All England Tennis Club. La final más esperada del torneo sobre hierba más prestigioso del mundo. En la catedral, el señor de Wimbledon, el número uno, ganador de las cuatro últimas ediciones, frente al advenedizo, la estrella emergente, el llamado a sustituirle al frente del ranking de la ATP. Todo se detiene. A partir de ahí, a través de flashbacks, la cinta realiza una introspección en las controvertidas personalidades detrás de los mitos, con revelaciones especialmente sorprendentes en el caso de Borg, del que apenas conocíamos nada y sobre el que pivota en mayor medida el guión.

El tenis, metáfora de la vida – Crítica de “Borg/McEnroe” (2017)

Una radiografía del peso de la responsabilidad y de la fama y la constatación de que lo realmente complicado no es llegar a la cima sino mantenerse en ella. Un tratado de psicología del deporte no exento de la emoción y espectacularidad que ofrece la recreación de uno de los partidos míticos de la historia del tenis, rodado y montado como un thriller de suspense para ser disfrutado exactamente igual que si hubiésemos asistido al evento en directo. Si no lo vieron en su día o no lo recuerdan, no busquen información, lo agradecerán.

El tenis, metáfora de la vida – Crítica de “Borg/McEnroe” (2017)

Borg/McEnroe trata, indirectamente, de la dificultad de regresar a lo más alto después de haber caído. Alude, por comparación, a un tipo como Rafael Nadal cuya capacidad, pundonor, voluntad, concentración, fuerza mental y confianza en sí mismo hacen de él un tipo que nunca se rinde a pesar de que, aparentemente, tenga todo perdido. Un fulano capaz de volver a ser el mejor cuando ya nadie daba un duro por él.

El tenis, metáfora de la vida – Crítica de “Borg/McEnroe” (2017)

El largometraje que mejor ha sabido abordar el universo tenístico habría de estar, por fuerza, entre los más destacados filmes deportivos ya que trasciende su ámbito para hablar de competición pero también de amistad, de presión psicológica, de estrés, de autocontrol, de brillantez y excelencia, de controlar situaciones límite, de superarse a uno mismo, de ser perfecto por mandato, de estar obligado a ganar, de la dificultad de mantenerse en la cúspide, de la gestión de la popularidad, de perder el oremus, de bajarse del caballo del propio ego para dejarse aconsejar, de la rivalidad mal entendida y del respeto profesional, de fastidiarla y arrepentirse, de no saber pedir perdón a tiempo, de rectificar, de apreciar y elegir lo auténtico y desechar el oropel. Habla de que lo que sucede entre esas cuatro líneas de cal tiene mucho que ver con la vida.

El tenis, metáfora de la vida – Crítica de “Borg/McEnroe” (2017)

Copyright del artículo © Manu Zapata Flamarique. Reservados todos los derechos. 

Copyright imágenes  ©  SF Studios Production AB, Danish Film Institute, Nordisk Film, SVT. Cortesía de A Contracorriente Films. Reservados todos los derechos.

Borg/McEnroe

Dirección: Janus Metz

Guion: Ronnie Sandahl

Intérpretes: Sverrir Gudnason, Shia Laboeuf, Stellan Skarsgård

Fotografía: Niels Thastum

Montaje: Per K. Kirkegaard, Per Sandholt

Duración: 107 min.

Suecia, Dinamarca, Finlandia, 2017

Anuncios

Volver a la Portada de Logo Paperblog