“No encontramos vestigios de un principio, ni perspectivas de un final”, escribió el geólogo James Hutton en uno de sus trascendentales artículos científicos sobre la geología de la Tierra. El significado estaba claro: el planeta llevaba aquí muchísimo tiempo, y puede que siga estando más tiempo aún. Era una teoría radical pero correcta que dio un vuelco a las ideas anteriores, que atribuían a la Tierra una edad de solo unos miles de años. Estos descubrimientos convirtieron a Hutton en el padre de la ciencia de la geología.
Hasta finales del siglo XVIII, la creencia general era que la Tierra no tenía más que unos miles de años de edad. Esta era la visión del origen del planeta propuesta por la tradición religiosa judeocristiana.
Pero en 1875, esta escuela de pensamiento establecida se sacudió hasta los cimientos debido a la obra de un geólogo escocés llamado James Hutton. Nacido en 1726, Hutton cursó estudios clásicos en la Universidad de Edimburgo y empezó a prepararse para la abogacía antes de darse cuenta de que su verdadero interés era la ciencia. Volvió a la universidad para estudiar medicina y obtuvo su doctorado por la Universidad de Leiden en 1749.
En la década de 1750, Hutton y un amigo idearon un método para producir sales de amonio a partir del hollín. Resultó ser un negocio provechoso y esto, junto con el dinero que ganó alquilando sus propiedades en Edimburgo, le proporcionó unos ingresos que le permitieron dedicar más tiempo a sus intereses científicos.
Poco después, Hutton heredó la granja de su padre en la frontera escocesa y se instaló en ella. Aplicó un enfoque científico a la agricultura. Se cree que trabajar la tierra fue lo que disparó su interés por la geología, y empezó a formular ideas acerca de las formaciones rocosas y cómo se crearon. Pero la geología no era un tema que se tomara con urgencia. Hutton pasó 25 años estudiando y puliendo sus ideas acerca de la historia geológica de la Tierra antes de hacer públicos sus hallazgos.
La tesis central de Hutton era una idea que después se conoció como “uniformismo” (la palabra no se utilizó hasta 1830, por el científico William Whewell). Básicamente, dice que los mismos procesos que dieron forma al planeta en el pasado geológico están actuando hoy. Esta idea contradice la del “catastrofismo”, que era popular en la época y sostenía que la Tierra no cambia lentamente sino que es sacudida por acontecimientos repentinos.
Disconformidad geológica
La teoría de Hutton sobre el cambio geológico lento, combinada con las ricas estructuras geológicas que examinó, le llevó a concebir la idea del tiempo geológico. Argumentó que para que se formaran semejantes estructuras, la Tierra tenía que ser mucho más antigua que los pocos miles de años que el texto de la Bíblia quería hacernos creer.
Este concepto del tiempo geológico estaba respaldado por las formaciones geológicas que descubrió, llamadas “disconformidades”. Los afloramientos y las paredes de los acantilados muestran estratos de rocas sedimentarias que Hutton creía (correctamente) que se habían formado bajo el mar por acumulación gradual de sedimentos después se compactaron formando roca.
Formaciones graníticas de rocas volcánicas.
Los sedimentos habían venido de tierra firme, arrastrados al mar por los ríos. Las disconformidades de Hutton parecían estar formadas por dos secciones: una sección inferior de estratos de roca sedimentaria en la que las capas forman franjas casi verticales, y una sección superior de roca sedimentaria más joven cuyas capas son horizontales.
Para Hutton, estas formaciones eran pruebas que apoyaban su concepto del cambio geológico lento, que no tienen lugar en miles, sino en millones de años. Las marcas de ondulaciones en las capas de roca más antiguas y verticales confirmaban que se habían depositado como sedimentos marinos y después se transformaron en roca a lo largo de muchos millones de años.
El movimiento gradual de la tierra había inclinado este lecho de roca y formado las capas verticales antes de qe se depositaran nuevos sedimentos para formar encima las capas horizontes, más modernas. El proceso tuvo que durar eras.
Hutton denfendía también una idea conocida como “plutonismo”: que gran parte de la roca que forma la superficie de la Tierra se originó como magma fundido, salido de las profundidades. A esta conclusión le llevaron sus estudios de las formaciones graníticas, que dejaban claro que el granito había estado fundido cuando se formó. Esto era contrario a otra idea en boga en aquella época, la del “neptunismo”, que sostenía que toda la tierra había cristalizado a partir del mar.
Para Hutton, el plutonismo era la causa de la formación de nuevos fondos rocosos en el mar, que después crecían por sedimentación. Los nuevos lechos rocosos pueden experimentar nuevas ondulaciones que los empujen hacia arriba para formar nuevos continentes, e incluso que los levanten sobre un extremo como se veía en las disconformidades.
La visión de Hutton es más o menos la que adoptan los geólogos actuales. Se sabe que se forma nueva roca desde las dorsales oceánicas submarinas, por donde sale magma que se solidifica formando nueva corteza. De manera similar, en otros puntos -las fosas marinas- la corteza vieja se mete bajo la superficie del planeta en un proceso conocido como subducción.
Fuente: CIENCIA 100 Descubrimientos que cambiaron el curso de la historia (Paul Parsons)