Un estudio publicado por la revista Science y realizado por Sofia Soares, del Centro de Investigación de Champalimaud (Portugal), sugiere que la percepción humana del tiempo se ve determinada por juicios de carácter subjetivo y por condiciones del entorno que influyen directamente en la duración que creemos experimentar o no de cada momento vivido.
Según el texto de la investigación, si bien la medida temporal es, al igual que la espacial, una dimensión fundamental que integra nuestra comprensión del universo, los organismos vivos no funcionamos exactamente como relojes perfectos, sino que el transcurso de los minutos y las horas tal y como lo percibimos varía según las circunstancias, entre ellas: si nos estamos divirtiendo o aburriéndonos.
“Nuestro sentido del tiempo está lejos de ser constante. El tiempo vuela cuando nos estamos divirtiendo y se reduce a un goteo cuando estamos aburridos”, explica la autora del estudio.
el transcurso de los minutos y las horas tal y como lo percibimos varía según las circunstancias, entre ellas: si nos estamos divirtiendo o aburriéndonos
“Hemos encontrado que la supresión farmacogenética de las neuronas dopaminérgicas disminuyó la sensibilidad de comportamiento al tiempo y que las neuronas de dopamina codifican información sobre la prueba y ensayo de variabilidad en las estimaciones de tiempo”.
También se encontró que la activación transitoria o la inhibición de las neuronas de dopamina es suficiente para disminuir o acelerar la estimación temporal, respectivamente. Estos hallazgos son trascendentales porque suponen una clara identificación del circuito neuronal que modula el juicio del transcurso del tiempo, al menos en los ratones.
La dopamina es una neurona involucrada en todas las respuestas emocionales del ser humano. Los resultados de la investigación de Soares indican que la actividad de la neurona dopamina refleja y puede controlar directamente el juicio del tiempo, o en otras palabras, que nuestro grado de disfrute influye directamente en nuestra percepción temporal. Como sugiere el dicho popular: que el tiempo vuela cuando la pasamos bien.
Fuente: Science