Cada vez que se estrena un film de cuidadosamente planeados robos, como Ahora me ves... (Louis Leterrier, 2013), es imposible no acordarse de uno de los ejemplos por excelencia de este género de películas llamadas heist movies. Estamos hablando de El golpe (George Roy Hill, 1973), ganadora de 7 Oscar de la Academia y protagonizada por una de las grandes parejas de la historia del cine: Paul Newman y Robert Redford. Sin utilizar ni una pistola ni hacer daño -físico- a nadie, los protagonistas de estas cintas trazan complejos planes para robar a alguien o a alguna institución que casi siempre, ética o moralmente, se lo merece. Es el caso del estreno de esta semana Ahora me ves... y el de otros films tan conocidos como la trilogía Ocean's Eleven, Ocean's Twelve y Ocean's Thriteen o The Italian Job, así como algunos fragmentos de cintas de acción como Misión imposible o La búsqueda, entre muchas otras. Es también el caso de este fantástico clásico del cine que es El golpe, cinta que mezcla suspense, comedia y uno de los elementos claves de este tipo de películas: el factor sorpresa. Por eso hoy queremos dedicar nuestra escena de la semana a dos de los mejores momentos del robo que Paul Newman y Robert Redford orquestraron en 1973. El primer, lo tenéis arriba, es la partida de póquer que juega el personaje de Newman con el malo de la función, protagonizado por Robert Shaw. "Aparentemente" borracho, Newman consigue cabrear de la manera más divertida posible al personaje de Shaw, encendiendo así una mecha que ayudará a tirar adelante todo el plan/robo.
La segunda escena que os proponemos, y que no queríamos olvidar, es la última. Antes de ver este mítico final, sin embargo, aviso a los que no han visto aún el film: PELIGRO SPOILER. Dicho esto, y sin avanzar nada más, os dejamos con este brillante momento, que nos engaña utilizando el final de otra de las cintas más conocidas de la pareja protagonista:
P.D. Por supuesto, ¡¿quién no recuerda la pegadiza y genial banda sonora de la película, con ese tema de Entertainer?!