Revista Psicología

El transtorno bipolar

Por Lizardo


Más gente cree padecer trastorno bipolar
Los psiquiatras británicos D Chan y L Sireling, reportan en reciente número de The Psychiatrist (que antes fue el Psychiatric Bulletin), el incremento de personas que acuden a consulta con el autodiagnóstico -y la preocupación- de padecer trastorno bipolar.
Refieren asimismo ellos que, en ocasiones, no es una consulta a iniciativa del paciente sino de los familiares quienes, convencidos de haber hallado al fin la explicación a cierta conducta peculiar del alegado paciente, lo llevan a consulta con la presunción de bipolaridad.
Los autores del reporte atribuyen este fenómeno a la masiva difusión de testimonios de algunas estrellas mediáticas acerca de su padecimiento (el trastorno bipolar) -en que se asocia el mal a una cierta imagen de status- y, además, a que el común de personas está actualmente más consciente del curso de su estado de ánimo. Aquí se cita a los  mood swings, expresión coloquial empleada para designar las fluctuaciones normales del humor durante el día y que no constituyen trastorno bipolar. (NB: S Nassir Ghaemi, uno de los más proficuos estudiosos del espectro bipolar administra un recomendabilísmo blog precisamente así denominado: Mood Swings).
El asunto -y aquí el  exiguo comentario es nuestro- puede ser visto desde varias perspectivas: por una parte, ciertamente parece haber beneficio en la disminución del estigma, en el hecho de que una persona se sienta motivada a buscar orientación especializada y que este hecho no sea visto como sinónimo de humillación o vergüenza. Por otro lado, es imprescindible que no se caiga en la medicalización de fenómenos que son parte de la existencia común y corriente, pasto a veces de algunos profesionales o instituciones de poco escrupulosas  -o poco sustentadas- conductas -como grafica esta caricatura de Martha Rosenberg-.
Más gente cree padecer trastorno bipolar
Hace poco leíamos en el folleto de un cercano congreso internacional de Neuropsicofarmacología el slogan que presidirá el evento: 'Trastorno Bipolar: la enfermedad del Siglo XXI'. Muchas lecturas pueden darse de esta escueta frase, desde la más inocente a la más suspicaz. Pero era sólo un folleto publicitario y por tanto no había obligación de declarar conflictos de intereses, obviamente.
Desde un plano más profundo, esto es: en qué medida realmente ha aumentado la prevalencia de trastorno bipolar; si existe un subdiagnóstico o un sobrediagnóstico; si la ampliación del constructo de espectro bipolar es justificada y sobre qué bases, podemos informarnos en el siempre autorizado blog Nietos de Kraepelin, que ha dedicado varias entradas al respecto: Under or overdiagnosing bipolar disorder?; Mistreating residents, Law 180 and overdiagnosing Bipolar Disorder;  Pediatric bipolar disorder in Amish childrenGhaemi vs. HealyPediatric Bipolar? Say it aint so!, entre otros de obligada lectura.
Observaciones no sistematizadas en nuestro medio también reportan a pacientes preocupados por haber entendido que podrían padecer psicosis maniaco-depresiva -el nombre antiguo del trastorno bipolar- pues consideraban que tenían 'la manía de deprimirse' -esto es, fácil variabilidad anímica aunque ello de ningún modo es ya patognomónico de dicho trastorno-. Otras veces, el diagnóstico de psicosis afectiva ha sido usado como subterfugio de psiquiatras cautelosos del estigma conllevado por las psicosis esquizofrénicas pero que, hasta cierto punto, también sirve para así propagar el estigma. De hecho, aquí el punto vital sería discutir abiertamente con la familia y con el paciente el uso del diagnóstico como mero etiquetaje y lo trivial de ello, pues una escueta etiqueta diagnóstica usualmente soslaya toda la complejidad humana del fenómeno y de la persona afectada.
Ahora no queda sino aguardar los estudios sobre este  tal vez no tan nuevo fenómeno y confiar en que no será considerado parte del espectro en forma de Trastorno Bipolar VII.
ENLACE:
- Psychiatrists identify new phenomenon: 'I want to be bipolar...' , en WebMD.com.
Otras entradas relacionadas en el blog:
- Kay Redfield Jamison habla sobre su trastorno bipolar
- Sherwin Nuland M.D. habla sobre el momento más grave de su vida
- Schumann
- Psiquiatras & 'Big Pharma': ¿somos parte del problema o parte de la solución?


Volver a la Portada de Logo Paperblog

LOS COMENTARIOS (1)

Por  Siria
publicado el 22 julio a las 17:01
Denunciar

Qué buen artículo, es realmente preocupante que la popularidad del término nos lleve a un sobrediagnóstico o a tratamientos irresponsables. Apunto muy bien las referencias bibliográficas y paso a los interesados un enlace en que un buen número de psiquiatras dan información veraz y buenos consejos a quienes sospechen que tienen trastorno bipolar: http://puedoser.es/tu-psiquiatra-te-ayuda Un saludo!