Empecemos recordando que Arnold Swarzenegger es al menos a mi entender, sino el mejor actor de acción/ciencia ficción más importante de la historia de cine moderno, se le tiene que poner en el podium de los mejores, conjuntamente con Silvester Stallone, estando cerca de ellos gente como Bruce Willis, o Mel Gibson. Los demás yo los consideraría inferiores a estos, y alguno como Van Damme, antes lo pondría en la categoría de ventiladores para el verano(por el tema de las piernas) que en el de actor de acción.
Después de este inicio evocando mis preferencias en cuanto al género de acción, vamos a lo que toca, hablar y no demasiado bien de esta El Último Desafio. Os avisamos que como de costumbre, se trata de una crítica, por lo que los que no la hayáis visto - y quieran hacerlo, daros media vuelta, y mirad otras críticas sobre otras películas, porque esta, puede tener alguna particularidad que os moleste sobremanera. Los que en cambio si hayáis visto esta producción y os interese saber que opino, seguid adelante. De que este film??
Atormentado por la culpa tras una operación fallida, el sheriff Ray Owens (Arnold Schwarzenegger) deja su puesto en la división de narcóticos del Departamento de Policía de Los Ángeles para trasladarse a la tranquila localidad fronteriza de Sommerton Junction, donde el crimen no abunda precisamente. Pero esta existencia apacible se ve truncada cuando Gabriel Cortez (Eduardo Noriega), el más destacado capo del narcotráfico del hemisferio oeste, efectúa una espectacular y sanguinaria huida de un convoy penitenciario del FBI.
Cortez, respaldado por una banda de forajidos cuyo jefe es un frío mercenario llamado Burrell (Peter Stormare), emprende una endiablada carrera hacia la frontera mexicana a 400 km/h en un Corvette ZR1 modificado llevando consigo a una rehén. La ruta de huida pasa justo a través de Summerton Junction, donde un nutrido dispositivo policial, que incluye al agente John Bannister (Forest Whitaker), tiene una última oportunidad de interceptar al violento fugitivo antes de que se escabulla para siempre al otro lado de la frontera.
A pesar de su renuencia inicial a implicarse, y de la supuesta ineptitud del modesto efectivo policial de Sommerton Junction, Owens decide finalmente tomar cartas en el asunto y, con la ayuda de su equipo, prepararse para un desafío de proporciones épicas.
que viejo estoy coñooooo!!!!
Bueno, situación vista hasta la saciedad, en los westerns crepusculares, donde unos pocos, honrados, honorables, se hacen valer ante muchos, mezquinos, asesinos de pago, los cuales por un puñado de dolares son capaces de cualquier cosa. Problemas?
1. Swarzenegger. Tiene 65 años, y eso se nota, por lo que su actuación vive más bien de quien fue, que de quien es ahora mismo. En las escenas de acción ves las carencias de estar 10 años sin actuar, y queda en más de una de esas escenas al borde de la risa.
2. En toda película que se precie de acción, salvo raras excepciones, lo que importa incluso por encima del héroe es el bad guy del film. Aquí tenemos dos, Eduardo Noriega en el papel de un narco mejicano, que para mi zozobra de manera enorme, porque sale en cuatro trozos del film, y casi siempre lo ves conduciendo un coche, y que llega al máximo clímax chusquero con su confrontación final con el personaje de Swarzie, donde lo que menos te da (y debería) es miedo, por el personaje que representa en si. El otro capo siempre por debajo en cadena de mando del personaje de Noriega es el gran Peter Stormare, el cual sin despeinarse supera al actor de origen español, en actuación en el rol de malo, con lo poco que sale convence.
De los de la foto no se salva nadie leñe!!!
3. Los secundarios aparte de Johnny Knoxville(Jackass), son poco conocidos, por no decir que son un cero a la izquierda. Lo realmente jodido es que Knoxville se supone que es el gancho humorístico, es quien tiene que hacerte sonreír en algunas de las escenas, al final la verdad es que no te ríes con sus ocurrencias, o por lo que hace en pantalla, sino más bien te mofas de como puede alguien actuar con tan poca gracia. En algún que otro momento me recordó a Dwight Schultz en su papel de loco maravilloso de nombre Murdoch en la serie El Equipo A, pero claro, sin poder llegar a ese nivel ni por asomo.
Es típico de las películas de acción el poner a un gancho humorístico para relajar al personal entre escena y escena de tiroteo, el problema viene cuando ese personaje tiene menos gracia que un grano en el culo, y ese grano se llama Knoxville.
4. Dirección-montaje. Jee-Woon Kim es quien firma esta cinta centrada en que el retorno del actor antes austriaco ahora norteamericano, sea lo más exitoso posible, y la verdad es que su trabajo solo puede calificarse de desangelado, por no decir defraudador. Entiendo que su labor debería haber sido esconder de manera sibilina lo mal que a mi entender está Swarzie físicamente, en eso fracasa de manera estrepitosa, y también lo hace en la forma de contar la historia que se desarrolla en el film.
Apañados vamos, uno viejete y el otro tarado. El viejete es el de las gafas(de sol)
Entiendo que a Arnold no se le pueden pedir grandes esfuerzos, pero de eso, a tener que pasar vergüenza ajena, en más de una escena, va un buen trecho. Por poner un ejemplo, en una escena, Swarzie está dentro de un bus, y les pide a sus colegas que le cubran, porque va a salir y los bad guys están disparando sin parar, pues bien, salta del bus, llega al suelo(de pie se entiende), y tiene un tío a pocos metros detrás, y otro arriba enfrente que le disparan, y nada ni le tocan, viendo la escena entenderéis a que me refiero, un ciego con una cervatana le hubiera acertado viendo lo lento que se movía en esa escena, pero no, aquí el nombre sirve para taparlo todo, incluso cuando ya no sirves para lo que has hecho toda tu vida.
Otra escena en la que se ve lo mal dirigida que está este film, es una nocturna en que dos policías descubren a los malechores preparando la llegada del narco fugado, uno de los agentes es herido, otra permanece casi rodeada detrás de su coche patrulla por al menos cuatro asesinos con aparatos de visión nocturna, y llega mister Terminator con su patrol, con las luces puestas(no se ve como llega y la gracia es que es un descampado de narices), y se carga a los de las metralladoras, con una escopeta-carabina, a lo John Wayne, como si nada. Inverosímil a todas luces.
Hay quien de manera realmente desafortunada compara esta producción con las películas de John Wayne en su ocaso como actor, o también busca pararelismos con un clásico como Río Bravo(?????), supongo que debe ser porque en el refresco que compraron en el cine, no solo pusieron Coca-Cola. Es de risa que ni un solo elemento del gran film de Howard Hawks, sea comparado con este pastiche que se nos presenta.
5. No es mejor que cualquier film de acción visto anteriormente. Yo como fan de Swarzenegger espero que si él decide regresar, lo haga de manera adecuada, y eso es con un director de cierto prestigio, uno de los que le dirigió anteriormente, John McTiernan por decir uno, aunque desde el 2003 no dirige, también estaría bien haber encontrado realmente un actor que interpretara al bad guy, ejemplo? Mark Strong, que quizás no sirva como narco mejicano, pues oye se cambia el guión.
Este Mixman es un cabrón de cuidado, me lo cargaba con gusto.
Con estos pequeños detalles, seguro que mi opinión sobre este film mejoraría igual que seguramente la calidad del mismo también ganaría un plus.
Tiene algo positivo este film o a quien puede gustar? De positivo tiene poco, no supera otros films del mismo estilo vistos hace nada, y puede gustar a quien sea poco exigente con el global del producto, o quien viva de la nostalgia de lo que fue Swarzenegger antaño. Los demás ahorraros la pasta y buscad títulos en la cartelera mejores los hay. Saludos.
Nota Final: 3,5 de 10.
Trailer de La Última Misión.
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