Nos han sorprendió las declaraciones realizadas por María José Català, Consellera de Educació de la Comunidad Valenciana, ha anunciado que el uso de las fiambreras será gratuito, a diferencia de lo que se planeaba inicialmente. Los niños podrán llevar la fiambrera, utilizar los frigoríficos, los microondas y se realizará la limpieza y la oportuna vigilancia sin que los centros cobren un solo euro. Se trata de una decisión que se desmarca claramente de la adoptada en Catalunya o en la Comunidad de Madrid, recordemos que en el primer caso se barajaba cobrar un máximo de tres euros por los servicios, y en el segundo caso según se publicó en el BOCM (Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid) que los centros escolares determinarían cuál sería el importe a pagar.
A pesar de la crisis y de los graves problemas económicos que particularmente debe afrontar la Comunidad Valenciana, parece que la conciencia sobre las necesidades de las familias es mayor, es una medida que sí va a permitir ahorrar a las familias con recursos más limitados. Como ya indicamos en su momento, en lo que respecta a Catalunya, nos parecía excesivo pretender cobrar tres euros por llevar la comida al colegio, el ahorro desaparecía, daba la impresión de que se forzaba a los padres a dejar a los niños en el comedor escolar.
Una solución más coherente y satisfactoria planteaba la Comunidad Valenciana antes de realizar esta declaración, se indicaba que el precio máximo que se podría cobrar por el servicio de fiambrera sería de 1’45 euros, sin embargo va a ser gratis. Lo contrario ocurría en Madrid, primero se planteó un servicio gratuito, Esperanza Aguirre declaraba que no se debería cobrar nada a los niños que acuden con la fiambrera, pero ya vemos que ha dejado la decisión en manos de los centros escolares.
Claro, que hay algo que no entendemos, la Consellera indica que cada centro será responsable de permitir a los niños el acceso con fiambrera, si se concede será gratuito, pero ¿y si se niegan y obligan a utilizar el servicio de comedor escolar? En este caso ya no nos parece acertada la decisión, quizá algún centro se oponga al uso gratuito de las instalaciones que, según María José Català, tienen todo el derecho. Si esto ocurre, o bien es un modo de obligar a usar el comedor escolar y pagar el menú, o bien algunos padres se encontrarán con un problema, no creemos que haya sido acertada esta segunda parte de la decisión.
Parece ser que en los colegios públicos, uno de cada dos niños contará con beca para el comedor, algo que no ocurre en las escuelas concertadas, los niños de familias con problemas económicos que acuden a estos centros no cuentan con ayuda alguna. Algo que nos ha parecido acertado es la declaración de la Consellera en lo que respecta a la calidad de los alimentos que llevarán los niños en las fiambreras, “si se confía en la capacidad de los padres para decidir en la alimentación de sus hijos se confía de lunes a domingo”. Evidentemente son decisiones y opiniones que no comparte todo el mundo y ya se ha criticado a la Consellera, pero creemos que le es indiferente y la impresión que ofrece es la de pensar en las familias y sus problemas económicos.
Ahora será cuestión de esperar a ver cómo responden los centros escolares de la Comunidad Valenciana y si secundan el uso gratuito de las fiambreras escolares. A través del artículo de la publicación digital Levante, podréis conocer más detalles de la noticia.
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El uso de fiambreras escolares en la Comunidad Valenciana es gratuito