El verano de los padres. ¿qué hacer con los niños?

Llegaron las vacaciones de verano para millones de niños de España. Un momento que han estado esperando durante meses. Por fin se ha hecho realidad. A partir de ahora, sus obligaciones serán muy distintas a las de todo el año. Básicamente su trabajo consistirá en jugar, jugar y jugar. Eso lo tenemos muy claro, pero con las vacaciones de verano de los niños, vienen otros problemas. ¿Qué hacer con ellos mientras nosotros trabajamos? Son muchos los problemas que tienen muchos padres para poder cuidar a los niños durante estos 2 meses. Hoy vamos a ver algunos de estos problemas y soluciones para el verano de los niños.

¿Cuál es el problema?

Cuando a mediados del siglo XX se unifico la educación y se implanto un calendario general educativo. Evidentemente los que lo hicieron no pensaron en las familias del siglo XXI. Los tiempos han cambiado mucho, pero no la educación, como ya veíamos en un artículo anterior sobre la evolución de la educación en España.

Hace unos años la sociedad era diferente, las mujeres no trabajaban fuera de casa, con lo que su mayor labor era la de cuidar la casa y los niños. Con lo que no había ningún problema para que los niños tuvieran todas las vacaciones del mundo en cualquier momento. Pero, como decimos, las cosas han cambiado y mucho. La incorporación de la mujer al trabajo. Cambio el sistema de crianza en todo el país. Aunque hasta hace muy poco, no teníamos tampoco muchos problemas, ya que contábamos con las abuelas y abuelos, quienes se podían hacer cargo de los nietos en estos periodos. Pero, nos ha pasado lo mismo. Cada vez los niños se tienen más tarde, lo que hace que las abuelas de hoy en día sean mucho más mayores y tengan más dificultad para cuidar de los niños. Y las que son más jóvenes están trabajando. Todo un caos. Sin contar por supuesto que el desplazamiento entre ciudades ha aumentando, siendo cada vez más los jóvenes con hijos que no cuentan con sus familias en donde ellos viven.

¿Son muchas vacaciones para los niños?

Son muchos los que se plantean como solucionar el problema. Y lo primero es analizar las vacaciones de los niños. ¿Son muchas?, ¿están mal repartidas? Está claro que el problema es que los padres cuentan con 1 mes de vacaciones y los niños con 2 (sin contar el resto del año). Lo que hace totalmente imposible solucionarlo. Hay padres que se turnan en verano cogiéndose cada uno las vacaciones un mes diferente. Lo que hace que no puedan tener unas vacaciones en familia, un problema igual de grave que el otro.

En otros problemas nos encontramos que las vacaciones están repartidas mucho más en el tiempo. En vez de tener los dos meses seguidos en verano. Aunque no quiere decir que no tengan las mismas vacaciones. Lo único que conseguiríamos desplazar el problema a otro momento del año.

¿Entonces que hacemos?

Es muy complicado, ya que cada familia tiene unas condiciones particulares. Y es muy difícil adaptarse a todas. Lo que deberíamos buscar son soluciones para el número mayoritario. En los últimos años, ha crecido la oferta de actividades entre lúdicas y educativas en los centros durante los meses de julio y agosto. Una buena solución que ayuda a muchas familias. Y que se ha convertido en un alivio para muchos padres. Aunque aun en las escuelas publicas cuentan con plazas muy limitadas y no en todos los centros. Con lo que depende mucho de la suerte o la ciudad o colegio al que asista nuestro niño.

Si no tenemos las posibilidad de dejarlo en su colegio, tenemos centros privados que organizan muchas actividades con carga educativa, como inglés para que además de disfrutar los niños aprovechen el tiempo lo máximo posible.

Otra opción muy antigua pero que nos puede solucionar una gran parte del verano y que recomiendo a partir de los 6 años de edad. Son los campamentos de verano, una actividad que a los niños les encantará y que enseñará muchas cosas muy útiles en la vida. Así por ejemplo la responsabilidad, independencia y a la vez integración con los demás.

Recientemente en las ciudades han aparecido los campamentos urbanos. Los cuales intentan simular en una parte a los campamentos pero se hace por unas horas al día. Y se vuelve a dormir a casa, con lo que los padres pueden disfrutar de ellos durante el verano al salir de trabajar.

Conclusión.

La verdad es que nos encontramos con un gran problema. Y muy dificil de solucionar ya que cada familia tendrá unas necesidades muy particulares. Yo no creo que los niños necesiten más colegio. Ya que ellos se cansan más en el cole que nosotros en el trabajo aunque no nos lo parezca. Podrían ampliar un mes todos los colegios pero todo con actividades lúdicas. Aunque ya el hecho de ir al mismo sitio que durante todo el año, conseguirá que el niño no consiga desconectar del entorno de trabajo.

Debes buscar la opción que más se adapte a tus necesidades. Y que mejor permita descansar a tu pequeño. Ya que las vacaciones son un periodo imprescindible en la vida de todos los niños. Y un año sin vacaciones, puede suponer un estrés adicional en el año venidero.