Puto infierno.
Eso está siendo vivir en Sevilla de 10:00 a 22:00h. 12 horas de calor que te hacen renegar de la capa de ozono y del color maravilloso de esta ciudad. Hace calor hasta respirando, para sudar solo hace falta agitar los brazos.
Vivo en un sinvivir.
Por las noches da algo de tregua, el termómetro baja de los 40, aunque dormir sigue estando jodido si no tienes ventilador o duermes acompañada.
Y luego levantarse a las 7 de la mañana, eso es vida. Te quedas dormida tarde y te despiertas cuando aún no están las calles puestas. En julio, en agosto...mientras ves fotos de amigos y conocidos en la playa remojándose los pinreles, tú estás en la oficina aguantando como una campeona.
"Y la fiesta comenzó, comenzó"
Aguanta el tráfico sevillano, donde cada sevillanito impaciente se cree que es el único que tiene ganas de llegar a casa. A los demás nos encanta la s-30 y los 200 semáforos que te encuentras en una avenida. Y ahora quiero mandar un mensaje al conductor sevillano típico:
Pita un poquito más, yo creo que deberías pitar cuando el semáforo de peatones empiece a parpadear. No esperes al segundo 0.1 después de que se ponga en verde para pitar, hazlo antes. En serio, no vaya a ser que se nos olvide que cuando se pone en verde hay que arrancar. Y después metete el claxon por el...hasta la mañana siguiente. Gracias.
Llega la hora del almuerzo, cocinar en esa habitación que desprende más calor que el propio horno y que te hace preguntarte por qué no cocinarías la noche anterior para el día siguiente.
Si eres tan afortunada como yo, tendras que ir a otro trabajo por la tarde. Para ello deberás cruzar una río de lava, montar en tranvía y otro río de lava. Llegas al trabajo sudando como poco. Hay días que rozarás el golpe de calor, pero para eso ya hay que ser muy afortunada y tener tiempo libre para enfermar. No es el caso.
Para rematar la jornada, se vuelve en bici a casa. Por el carril bici. CARRIL BICI. PARA GENTE QUE VA EN BICI. No es para gente que va con carritos de bebé, no es para gente que quiere dar un paseo andando, no es para gente que va mirando el móvil y no te escuchan cuando les pitas. Así que no, no y no. El carril bici es para las bicis. No es tan complicado de entender. Incluso hay dibujitos en el suelo.
Luego solo queda la ansiada ducha (que fácilmente puede ser la tercera del día), hacer la cena e irte a la cama a las 23:00h.
Pedazo de verano que me voy a tirar, ¿eh? Me cago en la mar.
Y ya de paso os comunico que hasta septiembre no habrá más entrada. Lo siento, pero me hace ilusión tomarme vacaciones de algo.
Besos!