El yugo caudino

Hoy he recibido varias llamadas telefónicas de aficionados y veteranos abonados de la plaza de toros de la Malagueta, transmitiéndome su malestar por la información ofrecida por A.M.Romero en el diario SUR de Málaga en la que se dice textualmente:

“La empresa explicó que los abonos de temporada tendrán carácter preferente y sobre la pérdida de la localidad cara al ciclo de agosto y septiembre si no adquieren el abono de la Feria de Primavera añadieron que si no está ocupado se les respetará y si no se les buscará uno lo más cercano posible”

Después de leer la noticia, me vino a la mente el recuerdo de la derrota de las legiones romanas durante la segunda guerra samnita. En el año 321 a.c, el ejercito romano sufrió la mayor humillación de su historia. Tras ser derrotado por el ejercito samnita al mando del caudillo Herencio, éste propuso que la vida de los romanos sería respetada si se despojaban de sus armas y armaduras y pasaban entre dos lanzas clavadas en la tierra atravesadas por otra de forma horizontal. Temiendo la muerte, los dos cónsules al mando de las legiones aceptaron el trato, obligando a sus hombres a realizar tan vergonzoso paso. Esto se recuerda aún en la tradición de muchos pueblos mediterráneos, como el paso "por debajo del yugo caudino", o "el paso de las horcas caudinas".

Pues al aficionado no le queda más remedio que pasar por el “yugo caudino” de la compra obligada del abono de temporada, del que solo se conocen los carteles de tres festejos, si no quieren arriesgarse a perder su localidad para la feria de agosto y los festejos de septiembre. Eso es lo que hará uno de esos aficionados que, lamentándose de las cosas que están sucediendo con la nueva empresa, comprará el abono porque “temo perder el asiento tan bueno que tengo ”. Otro buen y veterano aficionado al que ya ha fidelizado la empresa.