La empresa francesa Novarka diseña un gigantesco arco de metal móvil con el cual quedará sepultado de manera permanente el reactor 4 de la planta de Chernobyl, que hace 25 años protagonizara el accidente nuclear más grave de la historia. Después de que el 26 de abril de 1986 estallara el reactor, las autoridades de la Unión Soviética colocaron encima un 'sarcófago' provisional, una estructura de acero y hormigón, para contener lo más pronto posible la radiactividad; sin embargo, ahora se encuentra en riesgo de colapso y aún contiene combustible nuclear. La estructura no estaba diseñada para ser permanente; fue elaborada con piezas de metal conectadas entre sí, no tiene juntas soldadas o atornilladas, incluso un sismo podría fracturarla.
El reemplazo, que sí será permanente (al menos tendrá una duración garantizada de un siglo), será un arco que su punto más alto alcanzará 108 metros (cabría la Estatua de la Libertad) y tendrá el tamaño de tres canchas de futbol (257 metros de largo y 150 de ancho). Se calcula que su fabricación esté terminada a mediados de 2014. Será móvil porque no se construirá sobre el sarcófago, pero segmentos prefabricados se ensamblarán a unos 300 metros. A través de gatos hidráulicos el arco se deslizará sobre rieles de teflón hasta cubrir el sarcófago. Una vez sellado el reactor con el arco, grúas robóticas desmantelarán en el interior el sarcófago de hormigón y el reactor para limpiar los restos de polvo radiactivo.