En algún lugar de la memoria (Reign over me, Mike Binder, 2007. EEUU)

Reign over me (Mike Binder, 2007. EEUU): un dentista (Don Cheadle), quemado de su rutinaria y responsabilizada existencia, retomará la relación con su mejor amigo de la universidad (Adam Sandler), con quien se encuentra de casualidad en el trasiego de la gran ciudad y quien está mentalmente lisiado por haber perdido a su mujer e hijas en el fatídico 11-S. Buen y emotivo drama, sorpresa “de” y con el normalmente bobalicón Sandler, quien solo chirría cuando chilla, y cuyo conjunto únicamente también chirría en su insultante defensa a ultranza del matrimonio de la ultimísima escena, cuando Cheadle llama a su mujer (Jada Pinkett Smith). El momento en el que Sandler al fin se abre a hablar de su familia… delante de su amigo y no de un especialista, resulta sublime. Lo de los pequeños roles en rostros conocidos (Tyler, Sutherland, Burrows) es un verdadero regalo. A descubrir en el mercado doméstico, pues pasó sin hacer ruido por las taquillas españolas.