En profundidad: Verdades verdaderas

FICHA TÉCNICA:

Dirección: Nicolás Gil Lavedra

Guión: Jorge Maestro y María Laura Gargarella

Producción: Inés Vera

Montaje: Alberto Ponce

FICHA ARTÍSTICA:

Estela Carlotto: Susú Pecoraro

Guido Carlotto: Alejandro Awada

Laura Carlotto: Inés Efrón

Claudia Carlotto: Laura Novoa

Abel: Carlos Portaluppi

Argumento:

“Verdades Verdaderas. La vida de Estela” es la película que narra la vida de la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo Estela de Carlotto, desde la desaparición de su hija hasta la actualidad. Su lucha incansable pone de manifiesto su historia y la de su familia que no deja de ser el reflejo de miles de historias que vivieron esa realidad y luchan desde hace más de 30 años por el derecho a la identidad.

La Asociación Abuelas de Plaza de Mayo es una organización no gubernamental con una historia de más de 30 años de lucha y de trabajo en defensa de los derechos humanos. Desde 1977, su objetivo es encontrar a las familias legítimas de todos los niños secuestrados a causa de la represión política que tuvo lugar en la Argentina durante la dictadura militar, así como crear condiciones para que no se repita nunca más una violación tan terrible de los derechos del niño, exigiendo al mismo tiempo el castigo de todos los responsables de esta tragedia.

Hay historias que necesitan ser contadas para no ser olvidadas, y este es el caso de la de Estela Carlotto y las Abuelas de Plaza de Mayo. Las dictaduras sudamericanas son algo relativamente familiar para los españoles de la generación de nuestros padres, pero tremendamente distante y desconocido para nosotros. Aunque conocía cosas sobre la dictadura argentina – muchas gracias al cine -, lo cierto es que nunca había oído hablar de esta organización. Y, una vez más, gracias a una película, he podido descubrir hechos históricos y personas que intentaron cambiar el rumbo de las cosas y luchar por la justicia. Aunque entiendo las reticencias que puede producir la visión sesgada de la Historia que nos da el cine en muchas ocasiones, lo cierto es que hay que reconocer el papel que juega este arte como medio de divulgación de la misma.

Como película Verdades verdaderas pued tirar un poco de espaldas durante los primeros minutos, y es que la falta de presupuesto se hace notar y mucho en ciertos aspectos técnicos como la fotografía o la dirección artística. Sin embargo, a medida que la historia va cogiendo cuerpo y los personajes se definen, el interés va en aumento y el saber hacer del director para sacar el máximo partido posible a los pocos medios con los que contaba, se agradece y da sus resultados desde el punto de vista narrativo.

Como ya he dicho, Verdades verdaderas no es la película más espectacular que he visto desde el punto de vista cinematográfico, pero desde luego es un esfuerzo valioso en cuanto a narración y reivindicación histórica.