La fidelidad puede ser un punto a favor o en contra según la persona que lo contemple y sus creencias, pero a partir de ahora, al menos en Vietnam será un punto más que negativo. Y no hablamos de honra, ni tampoco de ganarse una mala imagen de cara a la galería. Sino como en el carnet de conducir, ser infiel supondrá varios puntos negativos. Y es que para los vietnamitas, el adulterio se ha convertido en algo tan grave y cotidiano, que han decidido hacer una norma al respecto y, ahora la infidelidad conlleva multa, cuyo importe puede llegar hasta los 145 dólares.
Ser infiel en algunos países del mundo puede que sea algo tan fácil como común, sin embargo, en otros lugares la tarea puede resultar mucho más complicada y hasta penalizada.
Esta misma ley también establece otras penas relacionadas con asuntos conyugales, como el sancionar a aquellos que contraigan matrimonio con un menor o con el fin de obtener la nacionalidad vietnamita o extranjera.
Fuente: Elsolonline
No se trata de una norma impuesta por la iglesia ni por los religiosos, aunque a algún lector se lo pueda parecer. Tal vez en el fondo sí, pero la cuestión es que se trata de una norma legal, impuesta por las autoridades, la que dictamina que se le ponga una multa a las personas infieles. Y es que el adulterio no es tontería. Nuestra conducta irresponsable generar muchos problemas y, algunos de ellos, bastante complicados de resolver.
La infidelidad, aunque suponga una inyección de adrenalina, dado que su morbo puede poner a mil a quien la practica, lo cierto es que según diversos estudios científicos es mala para la salud. O al menos, no ha arrojado resultados que indiquen que sea tan buena como el matrimonio. Uff, sólo pensarlo, por Dios, qué estrés! La carne es débil pero, algunas personas débiles, salvo que tengan el corazón a prueba de bombas, se morirían de un infarto.
Ser infiel conlleva demasiado trabajo. Hay que estar contínuamente mintiendo, inventando excusas, mentiras. Darle bien al coco y tener que armarse de argumentos de sobra para no ser pillado en la mentira. Salvo que la infidelidad se trate como en algunos países, donde ni siquiera se oculta, sino que el varón, por ser macho, tiene su derecho a gozar de las infidelidades a plena luz del día, sin temor a ser criticado y sin tener que ocultarse en absoluto.
Hay una pregunta que siempre me hago con respecto al comportamiento de las personas que son infieles por naturaleza. Todos podemos caer en la tentación y enamorarnos de una segunda persona, aún estando casados o comprometidos. Somos humanos. Pero, ¿qué hay de esos infieles que no tienen bastante con la esposa y salen de cacería a picar de flor en flor, o creyéndose con el derecho propio a tener más de una mujer en su cama? No se trata de ponerse mojigatos, pero sí de hacer un llamamiento a la responsabilidad. Si no estás dispuesto a asumir y afrontar tu voto de fidelidad, no te cases. Tan sencillo como eso. Y aplicable tanto a hombres como a mujeres, porque entre ellas también se da la infidelidad.