¿Enamorada yo?

¿Amor?
En este blog no se habla de amor. Se habla de desamor, de lo agridulce de las experiencias románticas de una bloggera feminista. Hasta aquí todo perfecto...Resulta que en medio de mis choco-aventuras, una tarde de jueves el karma me escupió en la cara. Mil veces me negué a salir con un chico porque a mi los intensos no me gustan y el fue tan, pero tan insistido que terminó hastiandome y me sacó corriendo.Los días y meses pasaron y ante mis negativas el chico se cansó de insistir. Ambos tranquilos, aquí ni se ganó ni se perdió.Volvimos a vernos esa tarde, en un hospital al cual asistía a una cita. Nos saludamos, hablamos, nos reímos y nos miramos... fue entonces que todo cambió.
Como dice la canción CAMILA:

"Todo cambió cuando te vide blanco y negro a colorme convertí"
Las miradas son un lenguaje ilimitado y muy diciente. Muchas veces sobran las palabras cuando te miran con intensidad.
Esa mirada me hizo clic. Me conectó con una parte olvidada del romanticismo.
Yo que aprendí a controlar mis sentimentalismos e impulsos amorosos, pues me vi perdida luego de experimentar esa conexión con aquel chico.
Mi cabeza enseguida maquinó toda una historia de amor y un ever after
Si, si hasta bonito fue sentirme desubicada y esperanzada.
Pero...
Lo que la cabeza imaginaba
el corazón no lo sentía.
Triste pero cierto.
¿Que pasó luego?
Nada, cada uno sigue su vida y en un mes volveremos a vernos en el mismo lugar para el control médico.
¿Enamorada yo?
No, falsa alarma.

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¡Gracias por leer!