Revista Salud y Bienestar
El hígado graso no
alcohólico (NAFLD) se debe principalmente a un estilo de vida poco saludable
con poca actividad física y una dieta alta en grasas saturadas, azúcar y
fructosa. Sin embargo, NAFLD también se puede encontrar en personas delgadas
que tienen lipodistrofia genéticamente
determinada, síndromes de lipodistrofia adquirida o lipodistrofia por el VIH,
que se caracterizan por una reducción dramática de la masa grasa debajo de la
piel y un aumento de grasa dentro del abdomen y el hígado. El Departamento de
Dermatología del Hospital Universitario de Tübingen, Alemania, el Departamento de Medicina Interna IV del
Hospital Universitario de Tübingen, y el Centro Alemán para la Diabetes han
detectado una nueva causa de lipodistrofia adquirida, producida por el inhibidor
de la proteína de muerte celular 1 (PD-1) Nivolumab. La terapia con estos
inhibidores se asocia con eventos adversos que comúnmente afectan la piel, el
tracto gastrointestinal, los pulmones y el sistema endocrino. Es importante que
los médicos que tratan a pacientes con estos inhibidores estén al tanto de este
evento adverso que puede producirse inflamación del tejido adiposo, resultando
en un hígado graso severo. En tales condiciones, se debe usar una
farmacoterapia específica, para aumentar la cantidad de masa grasa subcutánea
y, por lo tanto, mantener los lípidos en un espacio de almacenamiento seguro, muy
útil en estos pacientes