Encuentro con luis montero manglano - la mesa del rey salomón

Hace unas semanas nos convocaron a varios blogs a un encuentro con Luis Montero Manglano, autor de La mesa del Rey Salomón en la sede del Grupo Editorial Penguin Random House, cita a la que aceptamos acudir encantadas. Los que nos seguís ya sabéis lo que nos gustan estos encuentros.
Así que llegado el día y hora del encuentro, con el libro leído en un tiempo record, ya que es de esas historias que no puedes dejar, acudimos a la cita.
Una vez todos los allí congregados nos hubimos saludado (algunos ya nos conocíamos de otras convocatorias) y ocupado nuestro lugar empezó el encuentro.
El primero en tomar la palabra fue Alberto Marcos, editor de la sección de autores españoles de Plaza & Janés, comentándonos que en Plaza & Janés además de tener unos "autores marca" de los que llevan varios años y novelas publicando, como es el caso de Julia Navarro, y que son autores en los que confían mucho, también dan mucha importancia a buscar nuevos autores, publicar novelas nuevas, pero la situación por la que está pasando el mundo editorial cada vez lo hace más difícil, así que, en las pocas oportunidades que tienen para apostar por esos autores nuevos y novelas desconocidas lo tienen que tener muy claro y. cuando sacan uno de estos libros tienen que utilizar las mejores bazas para darlo a conocer. Uno de esos instrumentos es internet y la labor de los blogs para dar a conocer autores nuevos, por lo que nos dio las gracias por asistir al encuentro.
Alberto nos dijo que una de las cosas por las que apostaron por Luis Montero fue porque cuando leyó el manuscrito, se dio cuenta de que allí había una voz literaria que merecía la pena publicar porque la facilidad que tiene el autor para construir tramas y crear personajes, unido a todo su bagaje y conocimientos históricos, que es mucho, a la hora de construir una historia que atrapara al lector, en pocas ocasiones se encuentra, es difícil encontrar alguien con su talento y con su capacidad para que se le ocurran ideas.
Esto último quedó claro cuando después de haber leído el primer manuscrito, que no es esta novela, le dijo que querían publicarle algo pero que no sería esa novela, porque creían que podía hacer algo mucho más ambicioso y que llegase a más público. Así que le pidió alguna otra idea y al día siguiente le mandó quince y las quince podrían dar lugar cada una a una novela distinta, algo totalmente insólito.
Cuando se decidieron por una de las ideas y viendo el primer manuscrito que existía se dio cuenta que había posibilidades de hacer algo todavía más ambicioso porque además, los personajes podrían dar más de sí, tenían un equipo de buscadores con habilidades y personalidades muy diferentes, que podía dar para más y así se les ocurrió la idea de una trilogía. Una trilogía de la que ya se tienen las próximas fechas de publicación de las siguientes novelas (junio 2015 y enero 2016), porque no quieren que transcurra mucho tiempo entre unas y otras, pensando en el lector.
Quiso señalar la capacidad de Luis para escribir, para crear esos toques de humor que están presentes en la novela y la capacidad de que lo histórico no abrume, que sorprenda, sea atrayente, adictivo, que pueda resultar peligroso e interesante.
También señaló que están muy contentos con esta obra ya que sus derechos se han vendido a Francia cuyo mercado es tan difícil, a Rumanía y Bulgaria.
Pasó la palabra a Luis Montero, aunque entre risas comentó que ya le había dejado poco que añadir.
Luis agradeció todas las "cosas bonitas" que Alberto había dicho de su novela y nos comentó que el lo que pretendía con La mesa de Salomón era crear una novela adictiva, que se leyera rápido y tuviera algo de enjundia, en definitiva un libro que no se pudiera dejar.
Nos comentó que cada novela requiere su personaje y Tirso es un protagonista de características concretas que tuvo que adaptar al relato. Nos habló de la dificultad de narrar en primera persona y nos confesó que es algo que no le gusta nada porque es muy difícil, además de que parece que al lector siempre le faltan datos y porque no sabes como expresar  lo que siente otro personaje que no es el protagonista.
Se decidió a narrar en primera persona porque necesitaba crear más empatía con Tirso, ya que una novela de aventuras exige pacto tácito entre el escritor y el lector, porque el lector va a hacer todo lo posible por tomarse en serio la historia aunque en algunos casos sea difícil, y a cambio el escritor se lo tiene que poner fácil y darle entretenimiento.
Sobre la posibilidad de que Tirso fuera su alter ego, comentó que no y que si ha sido así ha sido de forma totalmente inconsciente, pero que indudablemente siempre se cuela algo de uno en lo que escribe, pero no sólo en el protagonista, sino en cualquiera de los personajes, 
También nos comentó que la escritura es lo que menos tiempo le lleva en la novela porque se pone a escribir cuando lo tiene todo claro: lo que va a contar, por donde va a ir la historia, y esto que es lo que más le cuesta. 
En cuanto a la labor de documentación nos dijo que no ha tenido que documentarse específicamente ya que según va leyendo libros de historia, que le apasiona, o recopilando datos por el trabajo que desarrolla, lo va almacenando y creando un archivo mental que piensa que quizás pueda utilizar en un relato de ficción. Además le fascina, le gusta buscar, investigar, disfruta mucho con ello.
Luis dijo que hacía suya la frase de "no me gusta escribir, me gusta haber escrito", que el proceso de la escritura tiene muchos sinsabores, pero cuando acabas es cuando ves lo que has logrado. También comentó que es imprescindible tener un buen editor y la labor que realiza. Nos mencionó que tiene que agradecer mucho a su editor la ayuda que le prestó a la hora de coger el tono de la novela.
Asimismo expresó que estaba encantado de la propuesta que le había hecho Alberto cuando le llegó el primer manuscrito, de hacer una trilogía, ya que le había dado la posibilidad de desarrollar mucho más los personajes y la idea.
A mi pregunta de ¿cómo se le ocurrió la idea de la idea de repetir al comienzo  de la novela y varias veces a lo largo de  la misma "¿Quieres conocer la historia? Podría contártela, desde luego, pero conozco una mejor" que hace que Tirso se enamore de la HISTORIA y conmigo surtió el efecto de querer adentrarme en las páginas de esta novela?, nos confesó, entre risas, que fue fregando los platos, que a veces las mejores ideas se le ocurren cuando está realizando un trabajo mecánico. También nos refirió que esta frase es la "culpable" de que la novela esté narrada en primera persona.
Como no podía ser de otra manera salió el tema del expolio, queriendo conocer la opinión de Luis Montero como historiador y experto y enseguida surgió una animada conversación, e intercambio de pareceres. Luis es de la opinión de que el arte viaja muy mal, por lo cual debe conservarse en su entorno, pero cuando ya se encuentra en otro lugar, quizás lo mejor es que se quede donde está.
Luis nos comentó que la historia es muy divertida y que tiene muchas cosas atrayentes, y que no hace falta cambiar para que funcionen en una novela de ficción y que resulte una narración atractiva. Otra vez hubo un intercambio de impresiones sobre la forma de enseñar historia y como no tiene porque ser algo aburrido, y como algunos historiadores ven mal la novela histórica.
Pese a lo rápido que se nos había pasado el tiempo, llegó el momento de dar por finalizado el encuentro, nos hicimos las fotos de rigor y la firma de ejemplares, que por falta de tiempo tuvimos que terminar en la calle.
Por cierto, cuando estábamos intentando colocarnos para la foto comenté con Alberto el mucho juego que podría dar la historia de Los Buscadores para una película, a lo que el añadió que: "o para una serie de televisión", señalando que estarían encantados. Ojalá.
Muchas gracias a la editorial, a Luis, a Aberto y a Isabel Blasco por todo el esfuerzo y hacer posible este encuentro