Energías Telúricas y Radiestesia

La Tierra está sometida a constantes ondas electromagnéticas que provienen del espacio exterior, la mayor parte es absorbida por la atmósfera y una gran parte de esas ondas consiguen penetrar en la superficie terrestre. 
La contaminación electromagnética producida como consecuencia de los avances tecnológicos  y la electro-conductividad del terreno producen campos eléctricos que también son absorbidos por la Tierra. Sumadas a las radiaciones propias que genera de forma natural el interior de nuestro planeta es lo que se conoce como “Energías telúricas”.
La Tierra nos remite a la superficie todo exceso de radiación a través de canales o redes que nuestro cuerpo recoge en mayor o menor medida, pudiendo ocasionar trastornos tanto biológicos como psíquicos.
El poder energético de la Tierra influye en los ritmos vitales del cuerpo, de ahí que dependemos de los lugares en que nuestro organismo se nutre de dicha energía, lo que demuestra hasta qué punto el hombre y su salud dependen del lugar en que viva, duerma o ejerza sus actividades.
LINEAS HARTMANN: Deben su nombre al investigador alemán Ernst Hartmann que descubrió una serie de líneas electromagnéticas  que cubren  la superficie terrestre procedentes del interior de la Tierra formando una red o malla. Los puntos de intersección o cruce de esa red son llamados nudos geopatógenos  que  producen todo tipo de alteración molecular y efectos agresivos. Existen otras redes globales del planeta con otras orientaciones como la red diagonal de Manfred Curry, las  líneas Ley o vórtices magnéticos, la red Peyré o solar.
CORRIENTES SUBTERRÁNEAS Y FALLAS: La presencia de agua en el subsuelo aumenta la radiación Gamma así como la presencia de fallas. Cuando coinciden agua y cruces Hartmann  su combinación es peligrosa.
Los lugares que emiten radiaciones electromagnéticas que pueden afectar a la salud se denominan zonas geopatológicas. Afecta tanto al hombre, como los animales y plantas. Los ejemplos más comunes que se pueden observar a simple vista son:

• Los animales en general evitan estas zonas. El perro huye de los puntos de intensidad patógena y rechaza el sitio que le asignan si está situado sobre un nudo, falla o cualquier problema del subsuelo eligiendo lugares neutros. El gato, al contrario, elegirá sitios cargados de vibraciones telúricas.

• Según investigaciones, las abejas instaladas en una vertical de una zona de intensas radiaciones pueden doblar o triplicar su producción de miel. También necesitan regularmente desplazar la colonia hacia una zona neutra para mantener el equilibrio.

• A las hormigas les gustan los cruces telúricos y las intersecciones de la red de Hartmannsituando en ellos, por lo general, sus hormigueros.

• Un árbol que crezca sobre una geopatía mostrará irregularidades como el tronco vacío, podrido, corteza con tumores o crecimiento abultado. Los árboles frutales suelen reaccionar tratando de escapar de las influencias malsanas  torciendo sus ramas o doblando el tronco hacia el lado opuesto a la zona patógenapara que le afecte lo menos posible
• Hay plantas que se desenvuelven bien en zonas patógenas como el caso de las ortigas. Los musgos y líquenes crecen cuando hay agua estancada o venas subterráneas. El musgo adquiere una tonalidad ocre y grisácea cuando el suelo es salubre.
• El perejil y el helecho macho son excepcionales receptivos de estas energías. Pervive una vieja tradición de los jardineros con el carácter del perejil: en vez de sembrarlo hay que dejar que se dispersen sus semillas al azar para que germine y crezca.  

• Los bebés se sabe que tienen la capacidad de detectar geopatías. Si su cuna se sitúa sobre una geopatía amanecerá en posturas no habituales intentando apartarse de la misma.

RADIESTESIAEtimológicamente se compone de dos términos: el latino “radium” que significa radiación, y el griego “aesthesia” que significa percepción de los sentidos o capacidad de sentir. Este término fue usado por primera vez  en 1929 de la mano de abad francés Bouly pero su práctica se remonta a los albores de los tiempos.Se puede definir radiestesia como el estudio de los fenómenos de los campos de fuerza de origen eléctrico y magnético de la naturaleza que el organismo humano percibe y amplía mediante instrumentos como el péndulo o varillas. Resumiendo, radiestesia es el arte y la ciencia que capta los fenómenos de la materia y de la energía. Arte porque no solamente está basada en técnicas y métodos sino que juega un papel importante la percepción instintiva e intuitiva de quien la practica. Todos nacemos con la capacidad de percibir estas energías, es una capacidad propia del ser humano y existen personas que son especialmente sensitivas, pero no todos las desarrollan. Las referencias históricas que se poseen son antiguas y abundantes, egipcios, etruscos, árabes, chinos, romanos, celtas, cátaros, templarios, todas las culturas a través de geomantes, rabdomantes, zahoríes, varilleros han tenido conocimientos de estas energías de la Madre Tierra, bien para construir lugares de culto, búsqueda de aguas subterráneas, localización de minerales, método de adivinación, etc.… Fue a comienzos del siglo XX cuando se comenzó a estudiar la radiestesia desde el punto de vista científico y en 1922 el doctor Albert Abrams quien abrió el camino de su uso médico.

• Péndulo: cualquier masa que pende de un hilo. El objeto puede ser de una extensa gama de materiales y colores. Los más usados son los neutros tanto en su material como color.  A veces se usa un testigo como muestra de lo que se está buscando en la mano contraria a la que usa el péndulo o usando un péndulo testigo hecho del mismo material de lo que se quiere buscar.  

• Varillas: rama de árbol en forma de “Y” o “L”. También pueden ser metálicas o de plástico. Es el instrumento más usado por los zahorís (también llamados rabdomantes) para captar emanaciones de agua o búsqueda de minerales.