Enjaulados

Penal de El Dueso (Santoña) Este domingo me invitaron a realizar un paseo ornitológico por el interior del penal de El Dueso, enseñando a un grupo de reclusos a descubrir las maravillas de esta afición tan sencilla y asequible, como gratificante.
Acompañado de Juanjo Aja y Jorge Bengoechea, la mañana resultó de lo más agradable e interesante, y los reclusos, 9 hombres y 7 mujeres, colaboraron mostrando gran interés por las aves y nuestras explicaciones desde el principio.
Este penal tiene varias peculiaridades que le hacen especial, como es el hecho de ser uno de los más antiguos, con 107 años a sus espaldas, así como por su ubicación, en un alto dentro del P.N. de las Marismas de Santoña, que hace posible que sus internos puedan divisar algo más allá de sus muros...
... hasta el punto de ver la línea del horizonte en el mismísimo mar Cantábrico.
Petirrojo europeo (Erithacus rubecula) Ahí va un listado de las aves vistas durante el paseo:
Alcatraz, alca, gaviota patiamarilla, cormorán grande, busardo ratonero, cernícalo vulgar, agachadiza común, ánade real, cerceta común, garcilla bueyera, estornino pinto, tarabilla común, bisbita pratense, lavandera blanca, verderón común, mosquitero común, jilguero, curruca capirotada, colirrojo tizón, petirrojo, gorrión común, pinzón vulgar, corneja negra, escribano soteño...
24 especies, aunque  seguro que me olvido de alguna.
Cernícalo vulgar (Falco tinnunculus) Resulta chocante comprobar como ciertas aves han elegido esta "jaula" para vivir durante todo el año.      Cernícalo vulgar (Falco tinnunculus)  Los internos del centro penitenciario no tienen la opción de entrar y salir a su libre albedrío pero me sorprendió gratamente, dentro de lo penoso que resulta siempre estar preso, las posibilidades que tienen de estudio y aprendizaje, con numerosas actividades, trabajos y talleres muy interesantes.
 Especialmente me llamó la atención el trato tan personal y especializado que reciben, dedicado a ayudarles y orientarles para su futura reinserción en la sociedad.
El programa NACAR (Naturaleza y Cárcel) es un buen ejemplo de este trabajo bien hecho que ha recibido numerosos reconocimientos a nivel nacional.
Ánade azulón (Anas platyrhynchos)
Los problemas vienen en muchos casos cuando salen tras cumplir su pena y se encuentran con la realidad de su entorno (familias desestructuradas, ambientes delictivos...) que les hace recaer al poco tiempo en sus problemas casi olvidados.
 Y es que sería importante que, una vez fuera de la prisión, no fuesen abandonados a su suerte y se continuara con la labor de reinserción hasta que se considerase necesario.
En estos tiempos de recortes ésto parece una utopía pero creo que habría que planteárselo seriamente ya que, mirándolo egoístamente, esto supondría un beneficio para la sociedad en general, reduciendo de manera drástica la delincuencia común y, por supuesto, dándoles una segunda oportunidad a estos ciudadanos caídos en desgracia.
Estos problemas no alteran el devenir de las aves, que entran y salen de la cárcel preocupadas únicamente de sus quehaceres diarios:
 ¡¡Sobrevivir!!