Pimientos morrones, de cornicabra o choriceros, del piquillo, del padrón (que dicen que unos pican y otros no), guindillas, chiles,... anda que no tenemos una gran variedad de pimientos y creo que me gustan todos los que hay :D
Sea cual sea la variedad de pimiento es bien sabido que son una fuente natural de vitaminas y además aportan calcio con lo que sí o sí es estupendo contar con él como ingrediente de nuestra dieta :D Desde aquí doy las gracias a Cristóbal Colon por traerlo desde México y América Central ;D
En ésta entrada nos centramos en los pimientos morrones, que son el protagonista de nuestra receta.
Aunque los pimientos morrones los tenemos disponibles durante todo el año, su temporada natural de recolección es el verano y otoño y como estamos con un producto de temporada lo encontramos a mejor precio que el resto del año.
Para saber si estamos comprando unos buenos pimientos morrones tenemos que fijarnos en su color y tersura. Son de un color rojo intenso (a veces violáceo) y brillante, tienen una piel lisa y sin manchas. Su carne es firme y carnosa y el tallo verde y rígido.
Se conservan perfectamente en el frigorífico envueltos en plástico o metidos en bolsa.
Para hacer los pimientos asados yo hago una "trampa" y es que mientras se calienta el horno los voy ablandando en el microondas, de ésta forma también acorto el tiempo de asado del pimiento.
Ingredientes:
4 pimientos morrones de gran tamaño;
Sal en escamas;
aceite de oliva virgen extra, variedad picual
Preparación:
Precalentamos el horno a 220º
1. Colocamos los pimientos en una fuente apta para el microondas y lo ponemos a máxima potencia durante 10 minutos.
2. Los colocamos en una fuente para el horno, uno al lado de otro, que no se monten y horneamos en torno a 30 minutos, dependerá un poco de lo grandes y carnosos que sean nuestros pimientos.
3. Sacamos del horno, pelamos* y cortamos en tiras
4. Dejamos templar y aliñamos con el aceite y la sal en escamas.
*Para pelar los pimientos con facilidad hay varias técnicas, os cuento las que yo conozco:
· Meter los pimientos en agua con hielo y sacarlos inmediatamente para que la capa de piel se enfríe y se pele más fácilmente. Hay que hacerlo con movimiento rápido: meter y sacar.
· Envolverlos en papel de aluminio tal cual los sacamos del horno y dejarlos reposar unos 15 minutos.
· Pelarlos inmediatamente después de salir del horno pero ojo! igual te quedas sin huellas dactilares :D
Nota: los pimientos asados se pueden tanto congelar como envasarlos en tarros de cristal.