Entourage – El Juego de Hollywood

A todos a los que nos gusta el cine y las películas nos interesa siempre conocer ese lado oculto del negocio, el que no sale en los carteles y que, a la mayoría del público, le resulta muy atractivo. El mundo de las estrellas, del lujo, de los rodajes, especialistas, presentaciones, agencias y modelos, actores y guionistas. No solo el lado de los cotilleos, sino también ver cómo se trabaja para llevar a cabo un rodaje y cómo un chico surge de la nada para convertirse en actor del momento. Muchas películas han tratado de acercarnos un poco a ese mundillo y darnos su particular visión, como por ejemplo “El Aviador”, de Martin Scorsese, donde relataba la vida del productor Howard Hughes, o la serie “Extras”, donde en cada capítulo, hay un famoso que se deja caer.

Pero más que eso, al público le encantan los chascarrillos sobre famosos y ver cómo los tratan como a personas normales y corrientes, cansados de que se les ensalce y se les convierta en los nuevos pilares de la sociedad. Porque no hay nada más gracioso que, por ejemplo, cuando en la película Zombieland deciden buscar pasteles en las mansiones de los famosos y al no encontrarlos, el personaje de Emma Stone dice: “¿Veis? Dije que teníamos que haber ido a la casa de Russell Crowe, pero nadie me hace caso.”

Para todos los amantes del cine nace Entourage, de la HBO y producida por Mark Wahlberg, una de las mejores series que he visto en mucho tiempo y que rompe con todos los esquemas, puesto que tras siete temporadas nadie sabe exactamente dónde englobarla, porque contiene humor, drama, estrellas invitadas, drogas, sexo casi explícito y quizá, los personajes más humanos y carismáticos que ha dado la pequeña pantalla en la última década. 

Pero pongámonos en situación. Entourage se centra en un chico joven, Vincent Chase, y en su inesperado salto hacia la cima. De anunciar ‘Mentos’ se convierte en un actor y el dinero entra de golpe, descubriéndole como una estrella y poniendo a disposición de él todo lo que siempre ha querido y no ha podido permitirse. Pero no está solo. En España esta serie se conoció con el nombre de “El séquito” ya que Vince tiene que cargar con su hermano mayor, Johnny “Drama” Chase, un actor fracasado que participó en Melrose Place y una serie al estilo Xena llamada “Saqueo Vikingo”. Actualmente vive de apariciones esporádicas y revive sus viejas glorias en las ferias al estilo “Comic-Con”, firmando autógrafos sobre su personaje.

Además está Eric, el amigo de la infancia de Vince y que hace las veces de su representante, y Tortuga, otro amigo que trabaja como su chófer. Todo esto nos da a entender que Vince no ha dejado atrás a sus conocidos de la infancia y que decide llevarles a todos sitios, y éstos se aprovechan de la situación gastando enormes cantidades de dinero y disfrutando del momento.

Es un pequeño grupo de amigos criados en Queens Boulevard, sacado de su sitio y arrojados al infierno de caníbales que es Hollywood, y donde veremos cómo tratan de abrirse camino en un negocio competitivo y agobiante en busca de los mejores guiones,directores, pruebas de casting y negociaciones, pero también cómo afectan a sus vidas. En Entourage, como es lógico, aparecen estrellas invitadas casi en todos los capítulos, pero al contrario que en la serie “Extras” de Ricky Gervais, no se notan insertados. Están ahí, interpretando a personajes o haciendo de sí mismos, con una soltura y una integración que realmente te da la sensación de que Vince Chase es un actor en ascensión.

De hecho no se andan con tonterías, y Vince es elegido por James Cameron para protagonizar la adaptación al cine de ‘Aquaman’. Y se ve a James Cameron en varios capítulos, dirigiendo, hablando con Vince y preparándolo todo, pero no por ello dejan de pintártelo como un megalómano que viaja en un helicóptero descomunal, o decir que “su película podría ser la mayor mierda de la historia y aun así recaudaría un montón de millones”.

Ser el protagonista de la película más taquillera de todos los tiempos le abre las puertas de las mansiones, como las de Johnny Depp y Marlon Brando, donde vive rodeado de lujo y manteniendo a sus amigos. Esa actitud le traerá no pocos problemas, porque ellos no tienen ninguna responsabilidad sobre la reciente fama adquirida por su amigo. Así, Johnny “Drama” (llamado así por su tendencia a sobreactuar y ser excesivamente… dramático) siempre busca un papel en los trabajos de su hermano, algo a lo que poder agarrarse, hablando cada dos por tres de sus encuentros con grandes actores o personajes de la talla de Hugh Hefner o Brandon Lee.

¿Se queda esto entonces en un viaje luminoso por Hollywood? Pues sí y no. A pesar de que se la ha llamado “El Sexo en Nueva York para hombres”, por la cantidad de chicas y escenas de sexo que puede llegar a haber en un capítulo, toca todos los temas posibles en la vida de un actor. El éxito inesperado, las malas críticas, los flashes o, por ejemplo, los anuncios japoneses, algo a lo que muchas estrellas se agarran cuando no tienen ningún trabajo porque cobran más de un millón de dólares por un solo día de trabajo. Los anuncios en general son horribles, como podéis comprobar en los de Tarantino o Arnold Schwarzenegger. Y aquí podéis ver el anuncio de Vince… con una aparición espectacular del trepa de Drama, por supuesto.

O más adelante, cómo esa fama se vuelve contra él. Porque a lo largo de las demás temporadas, vemos cómo intenta salir adelante con proyectos extraños, como Medellín, una versión actualizada de ‘Scarface’ que tras generar expectación se hunde en el festival de Cannes y que afecta a su carrera. Así, tras una película mala, nadie querrá contratarle y verá cada vez más difícil mantener no sólo su estilo de vida, sino su cordura intacta. Ni siquiera cuando Vincent Chase se convierta en el protagonista de lo nuevo de Martin Scorsese (en un cameo, como casi todos), podrá evitar verse superado por todo lo que sucede a su alrededor, llegando a algo de sobra conocido por todos: las drogas.Porque a partir de la séptima temporada nuestro chico amable y simpático se hunde en el más profundo de los infiernos, manteniendo un comportamiento errático y tomando decisiones estúpidas para su carrera: peleas con Eminen, heroína y un romance con la actriz porno Sasha Grey (que se incorpora al reparto de la serie interpretándose a sí misma), están a punto de destruirle.

Absolutamente todos los miembros del reparto cumplen sobradamente con su trabajo, evitando caer en la sobreactuación propia de las series de televisión. Nada es forzado, nada está estirado, no hay cartón piedra y todos saben dar vida a unos personajes tan carismáticos que se comen la pantalla. Pero por encima de ellos se encuentra el actor Jeremy Piven, que interpreta al mejor agente de Los Ángeles Ari Gold. Un tipo trajeado, con migrañas, siempre pegado al teléfono móvil, desagradable, homófobo, machista y malhablado que gana en carisma al mismísimo Doctor House. La interpretación de ese hombre (al que recomiendo ver doblado y en versión original, porque ambas voces lo clavan) es magistral, y si no fuera porque aquí en España La Sexta la ha tratado tan mal (y a que la serie no es apta para todos los públicos), estaríamos hablando de un peronaje mítico de la televisión.

Con siete temporadas, todas ellas bastante cortas, a la espera de la última y de una adaptación al cine ya en preparación, Entourage es una serie de culto en Estados Unidos. Superando con creces el nivel de “Extras” y repleta de personajes casi perfectos y famosos que se interpretan a sí mismos siempre dando la nota (como Matt Damon, al que pintan como un obseso de las ONG desagradable, o Bob Saget, el padre amantísimo de la serie “Padres Forzosos”, con las gemelas Olsen y que aquí es un putero vicioso). Sirve para conocer un poco del mundo y juego de Hollywood, o tal vez, cierta imagen de Hollywood. Recomendada para todo aquel al que le guste el humor negro y una serie completamente adulta, pero sobre todo para aquellos que conocen el nombre de un puñado de directores y estrellas, porque así la disfrutarán más.

Al fin y al cabo, estos serán los únicos que entenderán la cara que pone Vincent Chase y Ari Gold al descubrir que Aquaman 2 la dirigirá Michael Bay… con guión de Kevin Smith.

Y ahora, echadle un vistazo al regalo de cumpleaños de ‘Drama’