Juan Manuel de Prada nace en Barakaldo en 1.970, aunque pasó su infancia y adolescencia por las tierras de Zamora. Con dieciséis años comenzó a escribir relatos, aunque se desplazaría a la Universidad de Salamanca a estudiar Derecho. No ejerció jamás como abogado, y en 1.995 publicaría Coños y dos años más tarde se alzaría con el Premio Planeta con su libro La tempestad. Tiene además varios premios que reconocen su labor periodística como el Mariano de Cavia o el Joaquín Romero Murube.
- Como muchos, lo conocí con La tempestad, y he ido siguiendo su trayectoria literaria y sus publicaciones hasta que, tras 5 años sin publicar nada, he podido leer su último título, Me hallará la muerte. Es el intervalo más largo, ¿por qué tanto tiempo?
- La razón fundamental radica en que no he querido ponerme a escribir una novela hasta que tuviera en la cabeza una historia que a mí me pareciese lo suficientemente interesante y atractiva como para plasmarla en una novela. Por otra parte, he de decir que también he atravesado por una etapa de cierto descreimiento y escepticismo acerca del sentido que puede tener escribir novelas, pues creo que las grandes obras ya están escritas y en estos aproximadamente cinco años de barbecho creativo me he cuestionado en profundidad si verdaderamente puedo aportar algo con mi modesta producción literaria. Al final me puse a escribir, quizá porque no pude evitarlo.
- Además es usted un hombre que nos ha acostumbrado a hacernos partícipes de su opinión sobre la realidad, la actualidad... ¿cuál cree que es la actualidad literaria entre papel, digital, pirateos y demás?
- Creo que el mundo editorial, en general (incluyo la prensa escrita), está llegando a su fin tal y como lo conocemos, pues internet, y las nuevas modalidades de edición digital, están ocupando el lugar que ha tenido hasta hoy la edición en papel. Quizá este fenómeno no plantearía mayor problema si se respetase la propiedad intelectual, cosa que actualmente no está ocurriendo. Yo, desde luego, soy partidario de la edición en formato libro tradicional, pues para mí el libro es un objeto digno de culto; no me imagino una casa sin libros impresos (no, desde luego, la mía), ni un mundo sin bibliotecas y librerías tal y como las conocemos todavía.
- Veamos, el título... ¿por qué elige precisamente este título, un verso de Cara al sol? ¿Es algo que puede interpretarse como provocación o tal vez asume que mucha gente no lo va a relacionar al verlo?
- La verdad es que ni lo uno ni no otro. Simplemente elegí este verso del Cara al Sol como título de la novela porque, lejos de pretender una exaltación de todo lo que dicho himno significa, el citado verso tiene mucho que ver con lo que ocurre en la novela. Tenga en cuenta que el alistamiento del protagonista en la División Azul es un episodio clave en "Me hallará la muerte".
- Cuando uno se acerca al libro no puede evitar pensar en "otro más" sin embargo se ha desmarcado con una historia en la que La División Azul es protagonista tomando así un rumbo diferente del habitual, ¿por qué la división azul?
- Pero lo cierto es que no se han escrito mucho libros o muchas novelas acerca de la División Azul, aunque sí sobre la Guerra Civil. Ahora bien, "Me hallará la muerte" no es en absoluto una novela sobre la Guerra Civil, ni tampoco sobre la División Azul (que protagonizó, en el frente ruso de la Segunda Guerra Mundial, algunos de los episodios militares más heroicos de nuestra historia reciente). El asunto de la División Azul me procuraba la coartada argumental necesaria para que el protagonista (o los protagonistas, si tenemos en cuenta la dualidad que plantea la novela) estuviese muchos años (concretamente doce) ausente de nuestro país y muy alejado de la gente y el ambiente que frecuentó, así como de las cuentas que dejó pendientes antes de su marcha.
- ¿Cómo surge Me hallará la muerte, cómo nace Antonio Expósito?
- Nace de la necesidad -digámoslo así- de recrear una historia sobre suplantación de personalidad que, a su vez, me sirviera para indagar en asuntos que me interesan especialmente como temas de mis novelas. Algunos de ellos son la dualidad o incluso el carácter poliédrico de la personalidad; la línea tan difusa que, en ocasiones, separa el acto heroico de la vileza; la culpa y, sobre todo, la idea de que sobre la base de un mal, no se puede obtener un bien. Básicamente así surge el personaje que dará vida a la trama.
- Y, tras leer la novela, es imposible no preguntarse por el tiempo que se tarda en escribir un libro en el que un hombre intenta ser otro, una historia sobre historia olvidada, una época...
- Pues entre la labor de documentación, la escritura, el transcribir mi manuscrito (pues mi escritura es de puño y letra), y la corrección, unos dos años.
- En casi todos sus libros, por no decir en todos, el lector reflexiona sobre lo que lee, como si usted buscase precisamente eso por encima del acto lúdico que es la lectura. ¿Cuál sería la reflexión buscada en Me hallará la muerte?
- Efectivamente, en mis novelas, además de contar una trama protagonizada por unos personajes, me interesa reflexionar sobre algún asunto que aparece como clave en la obra, y con ello, como es lógico, me interesa también animar al lector a esa misma reflexión. En "Me hallará la muerte ", lo que planteo es, además de todos los grandes temas a los que ya hemos hecho alusión en esta entrevista, la idea de que el mal nunca nos puede conducir a algo bueno; más bien todo lo contrario, el mal va degradando y envileciendo a los personajes y también a las sociedades. Lo dice uno de los protagonistas de la novela, refiriéndose al tema de Macbeth: "Fíjate en Macbeth: pensó que entre él y la corona de Escocia no había más obstáculo que el cuerpo durmiente de Duncan. Y decidió matarlo, creyendo que así lograría alcanzar un mayor bien. Pero la vida es una unidad, el ser humano acaba siempre pagando el precio de las consecuencias de sus actos malos. Y lo mismo les ocurre a las sociedades y a las naciones. [...]"
- ¿Cómo recuerda sus comienzos en el mundo literario?, ¿ha quedado algo de aquel Juan Manuel de Prada?
- De mis comienzos en el mundo literario, como es natural, tengo el recuerdo del deslumbramiento inicial que te produce el poder verte de pronto en el lugar en el que antes veías a los autores de los libros que leías. Pasas de buscar y contemplar libros y escritores entre los anaqueles de las bibliotecas o las librerías a verte a ti mismo junto a todos esos nombres que tanto ocuparon tu tiempo de lectura. Por lo demás, y como creo que también es natural, el deslumbramiento viene del hecho de llegar -o creer haber llegado- adonde tanto anhelaste, que no es otra cosa que el poder vivir de la escritura.
- ¿Es una vuelta en toda regla a la literatura? ¿Está en su cabeza o tal vez sobre el papel alguna nueva historia?
- "Me hallará la muerte" es, desde luego, una vuelta a la novela o, si lo prefiere, una vuelta a la literatura, que, en realidad, yo nunca había abandonado. En cuanto a la segunda pregunta, sí tengo alguna historia en la cabeza, pero son varias cosas y no merece la pena hablar ahora sobre ellas; quizá sea demasiado pronto, y lo más conveniente es dejar madurar todo un poco. Ya veremos.
- Por último, me gustaría saber cuáles son sus favoritos literarios, y qué libro está leyendo actualmente.
- Pues, aunque suene tópico decirlo, mi favorito de verdad es Cervantes. Creo que después del Quijote, todo lo demás no es sino añadidura; pero no es necesario ponerse tan radical. Lo cierto es que me gustan los grandes autores de la literatura universal y que pueden estar en la mente de todos: desde Homero o Virgilio hasta nuestros días. Puedo destacar, cómo no, a los grandes novelistas del siglo XIX, como Víctor Hugo o Dostoievski. También a Henri James o a Marcel Proust. Entre los autores contemporáneos destacaría a Don de Lillo, Paul Auster (especialmente el "primer" Paul Auster) o a James Ellroy
Quede mi agradecimiento a Juan Manuel de Prada por haberse acercado a este blog y haber respondido tan amablemente a las preguntas y, como no, gracias a todos los que venís cada día por aquí.
-Bibliografía:
- El silencio del patinador
- Coños
- Las máscaras del héroe
- La tempestad
- Reserva natural
- Animales de compañía
- Las esquinas del aire. En busca de Ana María Martínez Sagi
- Desgarrados y excéntricos
- La vida invisible
- El séptimo velo
- La nueva tiranía
- Me hallará la muerte