"La película corta", como le gusta llamarla a Núria Rubió, se rodó en verano, en Zaragoza, en el barrio Rosales del Canal y en la propia casa de la directora. Obtuvo la ayuda del departamento de educación, cultura y deporte del Gobierno de Aragón para la realización de cortometrajes. También ha contado para su producción con la colaboración, desde el primer momento del Centro de Producción Audiovisual (CPA SALDUIE), centro de formación de Zaragoza, que aportó alumnos en prácticas y material audiovisual. También este proyecto obtuvo el apoyo de las empresas: Millán Iluminación, Eboca Vending, La Tradicional y Tu Locutor. Mujeres al atardecer es la historia de Andrea, una periodista de más de 30 años, en paro, que siente una crisis existencial. Después de un ERE en el periódico donde trabaja hace 10 años no sabe qué rumbo tomar. Su hermana, madre de un bebé, le organiza una entrevista con un viejo amigo, a la que duda si acudir. Mientras tanto ella paseará por el barrio al atardecer y el encuentro con diferentes mujeres le harán reflexionar sobre qué camino debe tomar. Una historia intimista y poética que tendrá lugar en un barrio al sur de la ciudad.
El viernes, 14 de febrero, se estrena en el Centro de Historias de Zaragoza a partir de las 19 horas.
- Me encanta como en los primeros minutos del corto, el personaje de Andrea se queda mirando la pantalla, viendo atardeceres mientras su hermana la habla ¿En qué piensa Andrea en estos instantes?
Andrea en esos momentos más que pensar se queda absorta y por un instante siente paz consigo misma, se abstrae de las palabras de su hermana, conecta con ella misma. Cuando comienza el corto nos encontramos con un personaje que está saliendo de una crisis, que está buscándose a sí misma.
- Ese encuentro entre mujeres y sus mascotas al atardecer, esas escenas tan cotidianas, pero llenas de encanto y ese lugar al lado del rio, tan lleno de paz ¿Por qué esta elección?
Pues en primer lugar porque es una localización que conozco, es donde yo paseo a mi perro todos los días, a Lucas, y me encanta. La naturaleza está muy cerca de mi barrio. No es un río, es el canal imperial de Aragón que pasa por allí. Y luego está el lago donde hay patos. Convivimos los vecinos y animales. Me gusta ese ambiente, las escenas cotidianas, el cine realista, donde la realidad se mezcla con la ficción.
- Adoro la relación que tiene Andrea con Lucas ¿Fue difícil trabajar esas miradas, esos gestos o cómo surgió la idea de unir a estos dos personajes de esta manera?
Desde el principio en el guion siempre partimos que la protagonista tenía un perro. He de confesar que es una historia con tintes autobiográficos. Vamos que Andrea está muy inspirada en mí y yo vivo con mi perro, con el mismo vamos, porque Lucas es mi perro también.
No fue para nada difícil trabajar con Lucas porque tenía que hacer cosas sencillas. Lo único en el plano que bebe agua si que el día anterior le quite el cuenco para asegurarnos que al grabar esa toma bebiera agua. Luego las demás tomas era pasear que eso pues es sencillo. También tratamos de grabar siempre en horas de menos calor e íbamos con cubos de agua para Lucas y los demás perros. Aunque si que es verdad que fueron días de mucho calor y eso sí que lo complico un poco, pero compañeros del equipo se ocupaban de los perros e iban de localización en localización en coche, aunque estuviera todo muy cerca.
- ¿Qué crees que le asusta más a Andrea? (tomar una mala decisión o hacer lo que le dicta el corazón)?
Andrea simplemente se siente incómoda y necesita salir de ahí. Sí que es verdad que no es la mejor reacción pero ella no sabe enfrentarse de otra manera. Yo en ese caso no hubiera podido hacerlo. A mí me gusta no juzgar lo que hace si no verlo como que no está preparada para decir que no o aparentar. Como decía al principio nuestra protagonista está "baja" y para ella todo es un esfuerzo. Ha pasado por una depresión y tiene que coger aire.
- ¿Cuál crees que sería el trabajo ideal para Andrea?
Yo creo que en el momento que cuento la historia: ninguno. Está en un momento que necesita estar bien consigo misma, encontrarse. No todo el mundo puede permitírselo claramente, pero ella tiene unos ahorros del anterior trabajo para formarse más o darse un tiempo de viajar para parar y saber qué quiere hacer. Pienso que en España, en general, seguimos unos esquemas de estudiar y cuando terminas trabajar, encontrar ya el trabajo para toda la vida, y pienso que no nos damos tiempo de pararnos a saber qué queremos hacer y muchas veces no hacer nada es también una opción. Por ejemplo en Estados Unidos los estudiantes cuando terminan se van un año sabático. Andrea desde que estudiaba trabajo y siente que no ha vivido que no sabe ni siquiera quién es o qué quiere hacer.
- ¿Crees que las empresas deberían de abrir su mente más o pensar de distinta forma y dejar que en los trabajos donde se estuviese muchas horas, se pudiesen llevar a las mascotas (perros) o tener algún sistema dentro de la empresa para esto?
Claramente ¡sí.! Muchas cosas deberían de ser distintas como por ejemplo trabajar desde casa. Pero bueno poco a poco ya se va cambiando la mentalidad y ya hay empresas que han cambiado la mentalidad ¡Menos mal! Al igual que pueden traer sus perros a la empresa.
- La canción del final es simplemente maravillosa y esas imágenes del final, la del avión (como metáfora de que Andrea quiere tener alas) o la de ella con Lucas mirando simplemente es sencilla, pero preciosa ¿De dónde surge esa canción? ¿Tenías claro ese final tan continuará, de incertidumbre, pero en el fondo saber lo que quería? Y además Andrea empieza el corto mirando a la gente y termina como un ciclo
Muy bien visto. No tenía claro qué canción pero desde que fui avanzando en el proyecto sí que sabía que quería una canción de autor. En este caso María José Hernández llego a mi vida porque quería alguien de mi tierra y al escucharla sabía que era quien quería para el corto. A ella le gusto el corto y colaboro en el proyecto encantada. Me gusta que la canción sea un solo de su voz al principio mientras ella se columpia y también que sea corta porque se ajusta perfectamente al final y a los créditos. No quería que se cortará la letra.
El final abierto fue más bien idea del coguionista Xabi Larrañaga. En mi anterior corto había hecho un final cerrado, un final feliz, me pareció que para este tipo de historia dejar al público pensando y que fuera más abierto era un acierto.
- ¿Quisieras añadir algo más a esta entrevista o decir algo a los seguidores de la web?
Les diría a los seguidores de la web que sigan viendo mucho cine. Es un arte en el que los autores nos podemos expresar con libertad y sin el público nuestras historias no existen. Quiero agradecerte también a ti que dediques tu tiempo a difundir cultura que si no fuera por páginas como la tuya no llegarían. Muchas Gracias.