Hoy en día, podemos aprender infinidad de cosas con el simple hecho de hacer un clic. Pero, ¿qué sucede cuándo a pesar de tener todos los elementos para mejorar como persona, nos negamos al avance? Si internet nos hace la vida más fácil entonces, ¿Por qué insistimos en complicárnosla?
Lo anterior tiene relación con el uso de nuestra ortografía. Tal vez puedo comprender que todavía exista gente que confunda "Ahí, hay, ay", "Allá, Haya", o que crea que "Haiga" existe; pero, sólo se entiende de personas que no han tenido la oportunidad de estudiar o de prepararse. Lo que sí se me hace sumamente INEXPLICABLE, es el hecho de que un "lector" que se supone que lee libros en cantidad y se jacta de ello, cometa horrores ortográficos tan sencillos, y se excuse con pretextos estúpidos (como: no soy yo, es mi celular el que escribe mal, ¿En serio? ¡Creí que ya estábamos en la época de los teléfonos inteligentes!).
Porque como tal, debemos preocuparnos de cómo escribimos, ya que no se necesita ser un gran genio, para saber diferenciar entre "Ha, He", de haber; y "¡Ah! ¡Eh!", de exclamación.
No digo que yo sea la perfección escribiendo, porque no lo soy. Hasta yo cometo errores, pero siempre intento mejorar, y que, en cuanto tengo una duda sobre cualquier palabra, recurro a San Google y busco como se escribe.
Al final, siempre dependerá de uno mismo, y del hecho de que se quiera avanzar como persona/lector/escritor/blogger(?), etc. Es muy de mediocres decir que la ortografía no importa. Por supuesto que importa, y si piensas lo contrario ¡Fracasaste como lector! También eres lo que escribes ;)
Y ustedes, ¿Qué opinan? ¿Creen que por el sólo hecho de que plataformas como Twitter/Facebook/Blogger, entre otras, no sean del todo formales, debemos dejar pasar todas esas fallas?
P.d. Deberían darse una vuelta por el blog de Alba, sus clases de ortografía son la onda.
Artículo escrito por Girly Books, si tomas la info indica la fuente ;)