Ergofobia: cuando el trabajo se convierte en miedo irracional

Carlos es un chico de 30 años con estudios en economía, vive independizado con su pareja y tiene un puesto de trabajo desde hace unos tres meses en una empresa del sector bancario. Él es una persona muy perfeccionista, altamente responsable, organizado, algo tímido aunque se relaciona de forma favorable con todos los compañeros. Con la única persona con la que tiene temor a hablar es con su jefe.

Hace un mes, el jefe de Carlos le expresó una queja por un error que cometió en el trabajo que presentó. Ante tal situación Carlos se bloqueó. A partir de ese momento Carlos empezó a encontrarse mal, con pensamientos del tipo “no voy a ser capaz de hacer nada bien”, “si me vuelve a decir algo no sé qué voy a contestar”, “cada vez que está cerca de mi siento mucho nerviosismo, me desconcentro”, etc. Con lo cual cada día se le hace interminable en el trabajo. Incluso esta última semana no ha podido ir a trabajar por el miedo irracional que siente a cometer un fallo en su ocupación y que su jefe le exprese de nuevo su disconformidad con el trabajo realizado.

¿Qué es la Ergofobia?

Se define como la presencia de miedo intenso y persistente al trabajo tanto presente como de forma anticipatoria, que provoca a la persona un malestar clínico significativo y/o un deterioro de su actividad cotidiana que no sólo repercute al plano laboral, sino que también conlleva afectación en el área social, personal y familiar.

Estamos hablando de un trastorno de gran repercusión en la vida de la persona afectada, sintiendo ésta un miedo irracional con ansiedad limitante ya sea en el propio puesto de trabajo o de forma anticipada antes de acudir al mismo. También se puede dar dicha fobia en personas que carecen de trabajo y están en búsqueda activa de empleo.

Como consecuencia, se ve aún más repercutida la autoestima de la persona y el autoconcepto, cuyo daño puede agravarse al sentir ese temor intenso, llegando a evitar la situación de asistir al trabajo o de acudir a una entrevista laboral en caso de que estuviera buscando puesto de empleo. Estas situaciones evitativas desencadenan en el sujeto una mayor pérdida de confianza en sí mismo con lo cual le conlleva a disminuir más su autoestima.

Como se aprecia hasta ahora los resultados son muy negativos tanto para la persona que pude estar en búsqueda de empleo como para el propio empleado o para las empresas, ya que en gran número de ocasiones esta problemática genera bajas laborales, en su mayoría por ansiedad.

Causas de la Ergofobia: ansiedad laboral

Identificar las causas del miedo inicial es fundamental para poder trabajar con el paciente aquello que le suscita ese temor. Éstas podrán ser de origen externo o interno:

• Actualmente la COVID-19 está incrementando este tipo de trastorno de ansiedad en la población ya que el miedo a coger transporte público, a estar relacionándose con otros compañeros en el mismo entorno o inclusive el desconocimiento de la normativa de seguridad en el nuevo desempeño, puede hacer que la persona sienta una ansiedad extrema a acudir al puesto de trabajo.
• Se puede dar como consecuencia de haber vivido una situación compleja o traumática con algún jefe y/o compañero de trabajo.
• Miedo a ser rechazado/a en el entorno laboral.
• Excesiva carga laboral.
• Carencia de habilidades comunicativas para poder expresar quejas, recibir críticas, hacer peticiones, decir no.
• Sentimientos subjetivos de infravaloración que dan lugar a una elevada inseguridad en sí mismo. Estas manifestaciones pueden aparecer con pensamientos tales como: “no voy a llegar al objetivo”, “no voy a ser capaz de exponer correctamente el tema”, “mis compañeros lo hacen mejor que yo”, “tengo miedo de que me echen del trabajo”, etc.
• Trastornos del estado de ánimo
• Rasgos de personalidad ansiosa

Síntomas de la Ergofobia

La persona afectada manifiesta síntomas de ansiedad en tres niveles (cognitivo, fisiológico y motor), siendo los más comunes los siguientes:

• Cognitivos: problemas de concentración y atención, inseguridad y culpabilidad que suele aparecer con pensamientos del tipo: “no lo voy a realizar bien”, “sé que voy a fallar de nuevo”, etc.
• Fisiológicos: respiración agitada, aumento de la frecuencia cardíaca, mareos, náuseas, sudor, temblor, nerviosismo, etc.
• Motores: evitación de acudir al puesto de trabajo, bloqueo ante preguntas en el contexto laboral, rigidez en los movimientos.

Tratamiento para la Ergofobia

El tratamiento psicológico más eficaz para las fobias, y en este caso para la Ergofobia, es el tratamiento Cognitivo-Conductual a través del cual trabajaremos con el paciente las siguientes técnicas:

• Cognitivas: orientadas éstas al trabajo interior de la persona. Explorar y reestructurar sus pensamientos y miedos irracionales, por ejemplo si la persona se siente rechazada en el trabajo.
• Respiración y Relajación para que la persona aprenda a autorregular la ansiedad fisiológica.
• Exposición: Desensibilización Sistemática practicando primero en imaginación para posteriormente pasar a exposición en vivo.
• Aprender a gestionar el tiempo dentro y fuera del trabajo.
• Habilidades Sociales: trabajando psicoeducación sobre tipos de comunicación y habilidades comunicativas en el caso que la persona no sepa o no pueda expresar sus necesidades en el ámbito laboral. Este área se abordará de forma práctica a través de modelado y role-play de situaciones que se puedan dar en el desempeño de las funciones.
• Trabajar autoestima para desarrollar y potenciar cualidades en el ámbito profesional.

En Ansiedad Málaga podrás encontrar profesionales cualificados que te ayudarán a superar la Ergofobia.

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