Estas alturas de mi vida no estoy para callarme nada, a mí me gusta la verdad y la verdad no siempre es suave ni dulce, a veces golpea con fuerza pero, la prefiero siempre. A estas alturas de mi vida no intento ganar amigos siendo lo que no soy, intento cuidar a quienes me valoran a pesar de todos mis errores. A estas alturas de mi vida mi única meta es ser feliz y mi único límite es no joder al otro. A estas alturas de mi vida me quedo con quienes saben de mis luchas personales, con quienes saben que siempre defenderé al débil y que jamás permitiré un atropello ni hacia mí ni hacia ninguna persona. A estas alturas me importa muy poco el dinero si no sirve para ser feliz y para ser feliz necesito cosas que no tienen precio: la salud, el amor, la familia, el trabajo, el arte. A estas alturas de mi vida me río de los que critican y no hacen nada y de los que me cierran las puertas, me río y espero porque algún día yo estaré del otro lado, como todo en la vida. A estas alturas yo solo quiero amar, soñar y crecer. No escucho nada más que a mi corazón y aunque me equivoque, siempre salgo ganando algo. A estas alturas de mi vida, cuando recién empiezo a vivir, no permito que nadie me diga cómo. A estas alturas soy yo, en todas las dimensiones de mi existencia, no todos tienen el coraje. NO todos se juegan enteros. Y soy feliz. Le pese a quien le pese.
Texto: Silvia García Marchetti 👏👏👏